A muchos extrañaron las palabras de la ministra de Defensa cuando, durante la celebración de los cuarenta años del actual ministerio de Defensa, recordó cual es la misión Constitucional de las Fuerzas Armadas. Lo he explicado en un reciente artículo, pero como veo que no queda claro voy a volver a hacerlo y dar un paso más hacia vanguardia para intentar aclarar lo que, a mi juicio, hay detrás de cada palabra y con lo que podemos encontrarnos al final de este ya demasiado largo camino de incumplimiento de la legalidad, de permanente proposición para delinquir. Un proceso que me temo consta de dos partes.
-Primera parte. El golpe de Estado en marcha.
Es conocido y anunciado. Se sabe casi todo y no se hace casi nada.
¡Hemos escrito tanto…! Repetimos siempre la misma idea: La unidad de España es innegociable y no admite diálogo. La Ley no solo se debe cumplir sino que algunos han jurado o prometido algo más: hacerla cumplir. Así estamos hace demasiado tiempo. Nos dicen que Cataluña no alcanzará esa pretendida independencia, pero no sabemos cómo se hará eso. Tampoco lo vemos muy claro.
‹‹Al Estado le bastan 24 horas para parar la ley del referéndum››, repite la vicepresidenta del Gobierno. Pero no va más allá.
Voy a intentar explicárselo. El Gobierno en el tema de la independencia de Cataluña ha confiado en los tribunales y para ello ha dado atribuciones al Tribunal Constitucional. La lentitud de la justicia acabará juzgando hechos consumados sin más. Hay un momento en el que el TC no puede ir más allá y alguien tendrá que ejecutar, es decir hacer cumplir la Ley o sus sentencias. No hay otro que el Ejecutivo. La hora del Presidente del Gobierno y de sus ministros. La hora de la responsabilidad. De lo que vayan o no a hacer no sueltan prenda. La democracia parece que consiste en presentar un programa de intenciones, bajar el telón y actuar tras las bambalinas.
Algo de todas maneras sabemos de esta primera parte. O lo sospechamos. Cada ministerio tiene su tarea hecha. Ante la amenaza independentista los planes no se pueden dejar para última hora. Y en mi criterio a eso responden las palabras de la ministra de Defensa cuando hace unos días recordaba la misión Constitucional de las Fuerzas Armadas. Misión que no se ha inventado ella ni los militares y que figura ni más ni menos que en el preámbulo de la Constitución. La amenaza existe. Que no será necesario recurrir a ello es más que probable. Sería en cualquier caso una grave irresponsabilidad no estar preparado para la hipótesis más peligrosa. Y eso se ha limitado a decir la ministra de Defensa: Mi ministerio tiene la tarea hecha.
De la misma manera podríamos hablar del ministro del Interior en cuyo ámbito recae una de las mayores responsabilidades ya que la aplicación de la Ley puede exigir la intervención en diversos y delicados aspectos de orden público, control y mantenimiento del orden. Lo mismo podríamos decir del ministerio de Exteriores en lo que se refiere a las relaciones internacionales, del de Justicia, Hacienda… El Centro Nacional de Inteligencia tampoco está dormido. Todos tienen su responsabilidad y estoy seguro que cuentan con los planes detallados para ponerlos en marcha en cuanto reciban la orden. No hacerlo sería caer en una gravísima irresponsabilidad. A esto responden las declaraciones de la ministra de Defensa y las de la vicepresidenta. Todos estamos preparados y con los deberes hechos.
‹‹Por tierra, mar y aire, las Fuerzas Armadas y la Guardia Civil se encuentran donde haya que proteger los valores de la democracia y la Constitución, pero también la integridad y la soberanía de nuestro país››,
‹‹Al Estado le bastan 24 horas para parar la ley del referéndum››. Sin duda.
¿En qué acabará esta primera parte? La tarea está o debe estar hecha. Ahora queda esperar acontecimientos, aunque sembrada una mala semilla…
Y que nadie le tiemble el pulso a la hora de poner en marcha la Ley.
-Segunda Parte. Cambiemos la Constitución. Hagamos legal lo ilegal.
Está ya en marcha y requiere un análisis detenido y profundo. Las líneas maestras son las siguientes.
El presidente del Gobierno declara estar muy satisfecho con la posición de Pedro Sánchez sobre Cataluña. El secretario general del PSOE declaró estar siempre en la defensa de la legalidad y la Constitución y contra cualquier intento de romperla. No olvidamos que el PSOE aprobó la ponencia política de su nuevo secretario general ‹‹el carácter plurinacional del Estado›› incorporando la necesidad de ‹‹una reforma constitucional federal, manteniendo que la soberanía reside en el conjunto del pueblo español››. Es decir el mismo juego de palabras de Zapatero, origen del problema, con aquello de ‹‹el concepto de nación es discutido y discutible››.
‹‹La legalidad y la Constitución deben ser el límite. Ahora todo lo que está haciendo el Govern sitúa a Cataluña fuera››. ‹‹Aplicar el artículo 155 solo sirve para alimentar el independentismo››, dice el secretario general del PSOE. Como para fiarse del compañero de pareja. En fin una cosa y la otra.
¿Estarán pensando en Moncloa, sometidos cada vez a más presión, jugar con el artículo 92 de la Constitución y caer en la trampa de poner en riesgo la unidad de España de manera frívola y engañosa?
Artículo 92.-
- Las decisiones políticas de especial trascendencia podrán ser sometidas a referéndum consultivo de todos los ciudadanos.
- El referéndum será convocado por el Rey, mediante propuesta del Presidente del Gobierno, previamente autorizada por el Congreso de los Diputados.
A finales de junio se reunían el líder de Ciudadanos y el del PSOE y acordaban crear e impulsar un espacio de diálogo sobre la reforma de la Constitución empezando en otoño las reuniones con juristas de ambos partidos para preparar un borrador.
Es una idea que nos están subliminalmente introduciendo sin que percibamos la intención. Hay que cambiar, hay que cambiar… Y todos señalan a la Constitución, esa que no se cumple. Un grave riesgo en unos momentos como estos y con los dirigentes que tenemos. Todo parece indicar que el único cambio que se pretende introducir es hacer legal lo que ahora no lo es. Para eso quieren cambiar la Constitución. Dar salida a una situación a la que su incapacidad nos ha llevado y no saben resolver. Dar paso a, desde la legalidad inventada y forzada, deshacer España. En definitiva modificar la Ley máxima, la Constitución, en su preámbulo, y dar paso a una nación de naciones que todos saben lo que significa. Así empezamos a entender lo de la negociación y el diálogo, y sobre todo eso de la España plurinacional y federal que lo mismo le da que le da lo mismo.
Luego ya sabemos lo que viene. Nación, Estado, Instituciones, Fuerzas Armadas… Lo tienen todo previsto.
Todo esto si no vemos antes una declaración unilateral de independencia. Hay que estar preparado y con los planes hechos. Como ellos que parecen decir: ‹‹Para lo que me queda dentro…››. Perdón por la grosería y no se dejen engañar.
La segunda parte está en marcha y el pretexto es cambiar la Constitución. No dicen qué artículos, pero está claro que se trata del preámbulo, de la unidad de España y de algo más.
El peligro está en esta segunda parte. Será legal lo que ahora es anticonstitucional. Cuando queramos darnos cuenta será tarde. Tiempo al tiempo.
Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)
Blog: generaldavila.com
13 julio 2017
D. Rafael, muy buenos días.
Gracias mi General, por redactar bien clarito exponiendo la cruda realidad con la que tenemos que lidiar.
El Sr. Rajoy no puede permanecer ni un minuto más, resguardado en la barrera, mientras en la plaza, el morlaco independentista, campea a sus anchas.
Esto no es cuestión de dejar pasar el tiempo, y esperar a que el «toro» , deje de cornear por agotamiento.
Si no tiene los atributos que hay que tener con semejante peligro, que se marche a su casa, por el bien de nuestra querida España.
Buen fin de semana a todos .
Pd: Hemos comenzado en las redes la campaña de 1-O «España Indivisible».
Sugiero con la venia de nuestro General, incluir en nuestro Whatsaap el fondo con nuestra Bandera.
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Un fuerte abrazo don Andrés
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Mi siempre estimado querido amigo y compañero, mi General: de veras siento parecer que soy «don pacontraria». Y nada más lejos de la realidad. Necesitaría algo más que un simple comentario para explicarme y explicarlo. Diré tan solo, que siendo el Poder ejecutivo el Gobierno, hará lo que decida el primer y último poder que es el judicial. Personalmente, y como yo, la mayoría, si no todos los que servimos a España, ¡nunca! nos podrán cambiar el juramento que hicimos a Dios. Podrá cambiar la Constitución. Podrá ser lenta la justicia y lento el Gobierno para aplicarla, pero ¡nunca! habrá lentitud en los componentes, por vocación, de las Fas, para cumplir lo que juraron a Dios y a España besando con unción su Bandera. Dentro de ese compromiso sagrado, sí pienso también en la prudencia. La provocación es clara. La intención, también: crear mártires. No entremos al trapo. ¿Cómo…? Fácil decir. No tanto «poner el cascabel al gato»… Mi General: siempre a tus órdenes.
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Mi general, un magnífico y certero análisis que comparto plenamente. Clarividente al presentar las «dos fases». Pero una vez más mi general, compartiendo opinión sobre el presente y el futuro, discrepamos en el «pasado».
No es que el Gobierno -este y los anteriores- haya confiado la solución del problema a los tribunales…No, es que les ha pasado «la patata caliente» eludiendo su obligación y responsabilidades.
La Constitución es «papel mojado» y no por incapacidad -o solo por incapacidad- de la clase dirigente, sino por sucesivas traiciones y perjurios, sean por estulticia o por cobardía.
Como muestra un botón: Se ha permitido que se persiga, como fuera de la ley, el escudo del Águila de San Juan, que junto a la leyenda de Una España Grande y Libre, figura en la primera página de la Constitución todavía vigente… Por más que ya habíamos visto en TV distorsionar esa realidad.
Naturalmente que si se modifica la Constitución para hacer legal lo ilegal -como muy bien dice- haciendo un «Estado Plurinacional» lo primero que desaparecerá será ese escudo en la primera página de la nueva Constitución «reformada»…. y a continuación, o en un espacio de tiempo no muy largo, lo que VE teme y veladamente apunta.
Y no sigo mi general para para no «herir susceptibilidades»
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Buenos días mi general : Gracias por la magnifica aclaración, de la delicada y grave situación en la que nos encontramos en España en estos momentos.. y entendamos mucho mejor.
Si, también estamos trabajando en las redes sociales, » España es indivisible » y desde hace muchos años, personalmente, tengo la bandera de España en mi Whatssap, como fondo de pantalla.
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Como menciona,( y tranquiliza..) en el gobierno, los ministros, todos tienen sus deberes hechos, y están preparados.. mi deseo es, que la Constitución, no se toque.
Un saludo, mi general.
Josefa Lopéz del Moral Beltrán
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Tengo malas noticias para los que creen que se puede ir a un estado plurinacional mediante la reforma del Título VIII de la Constitución Española por 210 votos de 350 diputados. La reforma de la Constitución por ese título nos permitiría eliminar las autonomías (que de hecho ya son una especie de federaciones). El estado plurinacional afecta a la unidad de soberanía del pueblo español y a él solo se puede acceder mediante reforma por el sistema agravado; es decir, imposible hacerla con la aritmética actual. Y quien lo pretenda hacer mediante una mesa de camilla o una mayoría en el Parlamento, a espaldas del procedimiento tasado y de la decisión soberana y vinculante del pueblo español, está dando un golpe de Estado (cosa que no vamos a consentir los que hemos jurado defender España)
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Veraz y actual a mas no poder su articulo Mi General. que no por repetitivo deja de serlo.
Llevan ya demasiado tiempo los políticos, queriendo cambiar las reglas del juego a mitad del partido, pero lo que ellos no saben, o si, es que para poder cambiarlas en artículos tan importantes, tienen que contar con el Pueblo, por mucho que quieran «metérnosla doblada», la Constitución emana del consenso del Pueblo, y no hay otra forma para esta reforma que pretenden que contar con nosotros.
Dicen algunos, sobre todo los interesados, que esta constitución que tenemos, no la han votado los generaciones actuales, y que por eso hay que cambiarla, ¿acaso las Constituciones de las demás naciones democráticas, han sido votadas por sus generaciones actuales ?. simplemente no, y no veo en ninguna otra Nación de nuestro entorno, que por ello haya que cambiarla.
El problema de España señores, no está en la Constitución, ni en el Pueblo, ni en las Autonomías, ni en el régimen democrático que tenemos, el verdadero problema, está en los Partidos Políticos que tenemos y en el egoísmo e ignorancia supina, que tienen la mayoría de sus dirigentes, que no sienten amor alguno por ese Pueblo del que se les hincha la boca, decir defender, y que a costa de lo que sea están dispuesto a joder.
En España desde hace ya bastante tiempo, en vez de hablar de las cosas que nos interesa a los Españoles, como puede ser, trabajo, corrupción, bienestar, paz social, sanidad, enseñanza, etc. etc., nos tienen entretenidos, con la monserga de que la Constitución, es la madre de todos nuestros males, y por eso hay que cambiarla, siendo en mi opinión todo lo contrario, y es debido a ella y a la buena redacción, que los Padres de esta hicieron en su día, por lo que aun no hemos llegado al enfrentamiento entre nosotros.
Por lo tanto pediría, desde mi humilde opinión y como parte del Pueblo a nuestros representantes Políticos, que se dejen ya de una vez por todas, de sus luchas intestinas, por el poder y los votos,y se dediquen a desempeñar las funciones para lo que los votamos que no es otra que el hacernos la vida lo mas sencilla posible y dejen de enfrentarnos a todos contra todos, por el mero hecho solo de sus intereses partidistas.
Un saludo
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Claro, conciso y concreto Rafa, mi General!.
Nada que añadir a los puntos expuestos.
Cuando un Jefe No transmite, NO informa, NO decide, sus subordinados se sienten defraudados, abandonados, huerfanos…
Es la peor condicion del Mando. Y de éso nosotros sabemos bastante.
Cuando las togas se agoten y el Tancredo empiece a andar, esperemos que todo sea una cuestion de Orden Publico…nada más.
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Brillante análisis. Por más que lo nieguen los que consideran que la Historia empieza en ellos, me permito recordar que antes de esta Constitución había otra que eran las Leyes Fundamentales del Reino a las que se podrá negar su origen democrático, pero de las que se presumió ir «de la Ley a la Ley» (faltó decir exterminando la Ley). Así que en esa segunda fase que acertadamente anuncias podríamos volver a lo mismo y no hay que confiar en el Ejército y en su misión constitucional, porque lo volverán a maniatar.
A tus órdenes, un abrazo
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Con permiso de Vuecencia mi General: Antes de dar contestación a su ilustrado comentario he repasado los pensamientos en él sobre los acontecimientos en lo referente a los perturbadores catalanes contra ESPAÑA, su misma Nación. Porque ESPAÑA es Nación de naciones fuera de sus fronteras. NO dentro de ESPAÑA, como es el caso de ciertos sectores de Cataluña; ya que NO es en su conjunto de los catalanes.
Yo SÍ pienso que habría que cambiar ciertas cosas de la Constitución. Y ellas deberían ser siempre en el favor del conjunto de los españoles de buena voluntad. Es decir quitar privilegios a los políticos y ciertos funcionarios que amparados en ellos se pueden cachondear del pueblo honrado y trabajador; ¡¡¡Del más indefenso!!!. Que nadie, absolutamente NADIE pueda quedar inmune al delito cometido. Ya que mientras que pueda existir una sola persona; entonces NO hay libertad, y mucho menos igualdad entre los ESPAÑOLES DE BUENA VOLUNTAD.
He querido entender su comentario, mas; NO he quedado convencido. Y NO creo que piense que le estoy faltando el respeto, todo lo contrario, aprecio lo que dice en él, y me gustaría confiar en el fondo de lo expresado por Vuecencia. Pero hay algo que me invita a desconfiar. NO me fío de ningún político de esta Nación llamada ESPAÑA empezando por el partido en el gobierno, pasando por el PSOE y Ciudadanos y terminando con podemos y alrededores.
Entenderé que no lo publique, mas, aún así pienso seguir leyendo y mandando pensamientos a su página hasta que sean negados en la misma.
Atentamente y a la orden de las personas dispuestas a dar la vida por la unidad de ESPAÑA: Ramón Lencero Nieto
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Reblogueó esto en Fenix 837#Red.
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La ultima palabra la tiene el pueblo español. Ante una hipotetica pregunta, en referendum sobre la Unidad, Condicion, Naturaleza de la Nacion española y Organizacion del Estado se ha de exigir que sea clara y concisa, que no admita equivocos. Estoy tranquilo, estoy convencido que los españoles solo queremos una Nacion, dentro de su pluralidad y diversidad.
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El sr. Dávila ya ha «cambiado» la Constitución. Ilustra su artículo, entre otras, con una imagen de la primera página de la Constitución española, primera página falsificada que aparece en muchas ediciones, desde hace bastantes años, con el escudo de España de 1981. Pero la verdadera Constitución no lleva ese escudo, lleva el de 1977, que tanto se parece a los del régimen anterior de 1938 y 1945, pero que es el aprobado por Decreto de 1977.
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Se equivoca
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Razone su errónea respuesta. La Constitución -1978, lleva escudo de 1977, vigente al tiempo de su promulgación. Escudo de 1977 que lleva el BOE de 29-12-1978, con la Constitución en las lenguas castellana, gallega, vasca, catalana, valenciana y balear. Vaya al «BOE histórico».
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Retirado (R.)
Retirado (rtdo.)
Consulte y entérese y razone con razón
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El 13-12-2013, si ilustró su artículo «La Unidad de España y las FAS» con la primera página auténtica de la Constitución-1978, es decir con el escudo de España de 1977.
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Que sí, que ya le hemos escuchado!!!
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Sí, me la «leído» (que no escuchado), pero la soberbia le impide entenderme. Como la soberbia, y la falsa creencia de estar en posesión de la verdad, le ha hecho decir las barbaridades que ha escrito sobre el ex-JEMAD don Julio Rodríguez.
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Empecemos por ahí. Acaba de darse a conocer. Se equivoca de lugar pero se agradece que le guste leer «barbaridades» que le molestan de lo que me alegro.
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Un placer leerle, pero ni intente adoctrinar en este foro. Todos sabemos interpretar e incluso leer.
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