El soldado veterano
Estoy convencido que a muchos veteranos les sucederá lo mismo que a este viejo soldado. En la reserva o retirados seguimos siendo militares. Así nos sentimos y así nos consideran en nuestro entorno, donde nos identifican como tales por nuestra actitud y conducta. Visto desde fuera, muchos no distinguen la diferencia de estar en activo o en otras situaciones. No es extraño por tanto que, el kiosquero que nos vende el periódico – pongamos por caso- nos pregunte:
- ¡Qué! ¿Cómo están vds, los militares viviendo esta situación? –
- Pues con la misma preocupación que todos los españoles. La patria está en peligro-.
Vivo cerca de un cuartel que acoge una unidad de transporte pesado del ET. A veces se ven salir del mismo esas enormes góndolas transportando tanques u otros vehículos de combate. No es infrecuente entonces oír expresiones del tenor:
- Venga, venga, hasta Cataluña sin parar -.
- Oiga, que no se han hecho los tanques para estacionarlos en la Diagonal….-
En el café de la esquina, te puede interpelar un parroquiano habitual, poniendo de manifiesto la inquietud que a todos nos embarga:
- tranquilos. Dedíquense a las operaciones en el exterior-.
- Pues mire, la misión que la Constitución asigna a las FAS, entre otras cosas, es precisamente defender la integridad territorial y el ordenamiento constitucional. Además, mal podrían esas Fuerzas Armadas contribuir a la paz y la convivencia en otros países atormentados por conflictos si no somos capaces de hacerlo en el nuestro.
- ¿Entonces qué? ¿A qué están Vds.?
- Pues mire, yo no puedo hablar más que por mí mismo. A diferencia de los que están en activo, ya no mando unidades. Pero por encima de esa diferencia está lo que nos une, el juramento que prestamos ante la bandera de cumplir con ese artículo de la constitución hasta la última gota de nuestra sangre.
- Sí, pues entonces qué van a hacer?
- Pues a las órdenes de SM Rey, por el conducto de la cadena de mando-.
¿Qué pensaba cada uno de mis vecinos que le iba a responder? Los militares no estamos para cantos de sirena.
Adolfo Coloma
GB (R) del ET
Blog: generaldavila.com
General Dávila 
El soldado sabe de honor y de lealtad; conoce que la milicia es jerarquía y disciplina; sabe que su preparación es integral; que es dura, exige entrega individual (instrucción) y en equipo (adiestramiento). El soldado sabe también de sus limitaciones. Sabe que su preparación, información y responsabilidad, aumentan proporcionalmente al rango en la pirámide jerárquica.
El soldado, conocedor de ello, confía, se mantiene sereno, se muestra atento a la voz de su jefe. Y en los momentos de alto estrés y gran incertidumbre, la serenidad y la firmeza del jefe acrecientan su ánimo.
Los viejos soldados, los que ya dejamos la actividad, mantenemos esos sentimientos inevitablemente… el soldado nunca deja de serlo psicológicamente. Y hemos oído su voz, hemos tenido su ejemplo, el jefe supremo, SM el Rey Felipe VI, que Dios nos guarde, ha hablado y lo ha hecho como se esperaba de él, con firmeza, rotundidez y serenidad. Nos ha elevado el ánimo, nos ha tranquilizado.
Si alguien pregunta a este viejo soldado cómo se siente ante la tremenda situación que han provocado los desafectos del Estado, mi contestación hoy, seria: “Sereno por la contundente voz del Rey y preocupado porque, sin duda, estas situaciones siempre provocan daño a compatriotas, inocentes unos y equivocados otros”
¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA EL REY!
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Tu artículo mi general, pone de manifiesto de forma muy certera la preocupación de los militares, y de los españoles que como ellos aman a España, ante los acontecimientos que estamos presenciando entre alarmados e incrédulos. A unos y otros nos preocupa el futuro de España y su incertidumbre. Nos lacera el alma pensar en la España que recibimos de nuestros padres y en la que dejaremos a nuestros hijos. Recibimos Una España Grande y Libre, ganada con la sangre de quienes lo dieron «TODO POR LA PATRIA» y tal vez les dejemos una herencia dilapidada durante nuestra vida. Los pueblos que olvidan su historia, están condenados a repetirla. Pero lo inaudito es que el olvido se haya producido en una sola generación. Ello induce a pensar que no es cuestión de olvido sino de traición. Al final de tu magnífico artículo dices mi general que «los militares no estamos para cantos de sirena» y yo lo apostillo diciendo que ni estamos, ni debemos estar y que por ello tal vez venga al caso -con la vista puesta en el artículo 8 de la Constitución-
recordar aquella frase histórica: Tiembla Roma con la cólera de tus legiones». Un abrazo y siempre a tus órdenes.
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A las órdenes de V.E., mi Genral. Qué bien y con qué consciencia lo resume en pocas palabras. Cómo echo de menos mis años de vida activa en el Ejército por lo fácil que era limitarse a obedecer y procurar hacer bien las cosas que el mando le encomendaba a uno, La única preocupación, que en absouto temor, era no defraudar al superior en nada relacionado con el servicio y superarse cada día. Con qué tranquilidad se iba uno a descansar al final de la jornada, soñando con el día siguiente y lo que pudiera traer de nueva experiencia.
Qué cierto es que nunca se deja de ser y pensar como Militar, aunque solamente se pasara por e Ejército para cumplir los dieciocho meses de servicio obligatorio. Y qué difícil resulta ahora verse huérfanos, sin entender nada de este juego diabólico y aterrados por el porvenir de la Patria, pues uno y sus intereses personales no cuentan para nada, con la juventud que ya no podemos volver a ella para poder rendir al máximo. Existen en la actuaidad Asociaciones de antiguos Soldados, que han sido iniciativa y fundación de eso, antiguos Soldados que sólo hicieron «la mili» regamentaria, a las que nos hemos adherido antiguos mandos intermedios, muchos Oficiales y algunos Jefes. Todos coincidimos y nos conocimos en el cuartel hace más de cincuenta años, y es asombroso y muy gratificante, y un inmnenso orgullo, comprobar que el espíritu de todos sigue siendo el mismo, y que a todos nos embarga en estos momentos la misma preocupación y el mejor patriotismo.
Al menos podremos ir muriendo en paz, sin haber abjurado de nada y con la paabra Patria, España, entre los labios.
¡¡¡VIVA ESPAÑA111. ¡¡¡VIVA E REY!!!. ¡¡¡VIVA EL GLORIOSO EJERCITO ESPAÑOL!!!
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Buenos días, mi General. Lo explica usted con una sencillez propia de quien conoce perfectamente no solo todo lo relacionado con el Ejercito, sino quien tiene una gran cultura e inteligencia.
Le felicito.
Es muy frecuente oir a algunos ciudadanos que para arreglar las situaciones que la mala política nos depara, digan aquello de «pues yo mandaba la Legión y eso lo arreglaban en un periquete», otros dicen aquello de «lo que mandaba son los tanques», a lo que habría que contestar como hace usted en su artículo, «no se han hecho los tanques para estacionarlos en la Diagonal..»
Es inudable que el Ejército tiene una misión fundamental. Defender la unidad de España, y tan pronto la cadena de mando así lo disponga, estoy seguro que lo llevarán a cabo con la entrega y valentía con las que realizan todas aquellas misiones que le son encomendada. No tengo la más mínima duda.
Sin embargo, y aunque la sangre arda en nuestras venas, al contemplar las maniobras sucias, llenas de de provocación y de traiciones, que proceden de ciertos políticos del nordeste y de las masas de ciudadanos convenientemente adoctrinadas, no se puede hacer lo que el enemigo pretende que se haga e incita a ello mediante su provocación.
Ya vimos cómo la masa humana entorpecía a las FyCde Seguridad del Estado el día de la ¿votación?, y quienes los incitaban ya tenían preparadas mil trampas para que la imagen, de nuestrra Policia y Guardía Civil y la de nuestro Gobierno, sembrara dudas respecto al trato aplicado a la masa.
La «partida politica» que se está desarrollando, y que a pocos puede gustar el ver cómo está discurriendo, requiere de mucha inteligencia, de mucha tranquilidad y saber golpear, si es que el Senado autoriza la aplicación del artículo 155, en el momento justo y en el lugar adecuado.
Ojalá no sea necesario el uso de la fuerza de nuestro Ejército, porque ello supondría que la situación se agrava considerablemente.
No obstante, a mí, mi Ejército, el de mi Patria, España, me ofrece todas las garantías. Por su Disciplina, valor, heroísmo, entrega, inteligencia y preparación.
Un cordial saludo, mi General
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Buenos días mi General,
Como bien dice nuestro Coronel Alonso Marcili, las palabras de SM el Rey han constituido el verdadero soporte para hacer frente a la deriva secesionista.
Tantos meses de inacción gubernamental, nos han llevado al borde del precipicio.
Ahora toca recuperar el corazón de los Catalanes de bien, que han padecido años de humillación y abandonados a su suerte.
En el discurso del Sr. Rajoy, eché a faltar un apoyo incuestionable a la Unidad de España.
A Mariano le falta mucha chispa patriótica.
Viva España!!!
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Estimado mi general, como siempre acertado en su art’iculo, me gustari’a resaltar el u’ltimo parrafo….» A las ordenes de su Majestad el Rey por el conducto reglamentario.
Reciba un fuerte abrazo legionario y queda a sus o’rdenes.
Alfonso Morant.
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Buenos días mi General:
Muy bueno su articulo de hoy como siempre,. como los comentarios de los colaboradores,
Me quedo también con la ultima frase, » a las ordenes de su Majestad el Rey por el conducto reglamentario..»
Gracias mi general, Un afectuoso saludo.
!! VIVA ESPAÑA, !! !! VIVA EL REY !! !! VIVA EL GLORIOSO EJERCITO DE ESPAÑA !!
Josea López del Moral Beltrán.
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Mi General como bien dice en su escrito y ratifica el Cnel E. Alonso y como viejo soldado que soy, aún habiendo servido mucho más tiempo bajo la bandera Francesa y menos bajo la bandera española siempre sentí que mi patria es España, aún hoy pudiéndome nacionalizar francés nunca lo quise.
Con arreglo a su escrito sobre las FF.AA S.M. el Rey y como bien sabe mi General, el Rey no tiene poder de decisión en nada, salvo la mediación, para mi y más denigrante si cabe es que siendo el Jefe Supremo de nuestras FF.AA no tenga poder alguno ni de mando.
El mando supremo de las Fuerzas Armadas lo ejerce el Rey como instancia de influencia sin poderes reales y efectivos sobre ellas. Y ello es así, por la doble razón de que en la Monarquía parlamentaria el Jefe del Estado no es, obviamente, el Jefe del Gobierno y porque el artículo 97 atribuye al Gobierno la dirección de la Administración militar y la defensa del Estado. y agrego que pésimamente nos defiende.
Buceando por internet buscando fuentes y opiniones, me encontré con dos que me llamaron la atención
La primera sería que S,M. El Rey también entre otros títulos nobiliarios también es Rey de Jerusalem
http://www.xlsemanal.com/conocer/20160403/felipe-jerusalen-9644.html
Y mientras se redactaba la Constitución el diputado de Unión de Centro Democrático (UCD) José Miguel Ortí Bordás propuso añadir un punto 3 al ahora artículo 155 con la siguiente redacción:
— “El Rey, a propuesta del Presidente del Gobierno, tras deliberación del Consejo de Ministros y previa consulta con los Presidentes del Congreso y Senado, podrá decretar la disolución de la Asamblea regional por la comisión de actos contrarios a la Constitución, por violar gravemente la ley o por razones de seguridad del Estado”.
Los ponentes de la Constitución (que pertenecían a UCD, PSOE, PCE, AP y Minoría Catalana), en su informe de ponencia, rechazaron esta enmienda de José Miguel Ortí Bordás. Así se evitó que la Carta Magna tuviera un mecanismo automático para disolver el Parlament en las actuales circunstancias de rebelión independentista.
Lo curioso de todo esto es que aquel AP del 78 no voto la Constitución que hoy tanto defiende el PP
http://lahemerotecadelbuitre.com/piezas/los-partidos-de-silva-y-fdez-de-la-mora-rompen-con-alianza-popular-por-su-negativa-a-apoyar-la-constitucion-espanola-de-la-que-fraga-es-co-autor/
En fin mi General he pasado muchos años fuera de España como militar y ya sabe que mientras estas en activo «no te ocupas de según que» y bien cierto es que hasta hace bien poco tiempo intento saber lo que fue sucediendo en la España del 78 y constato con decepción y amargura que aquellos que perdieron la guerra por las armas la han ganado por la Constitución de ahí la destrucción de la unidad de España.
!!!VIVA ESPAÑA!!! !!!VIVA EL REY!!!
A su orden Mi General
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Con el permiso de Vuecencia mi General. A decir verdad. NO me esperaba la contundencia del Rey de ESPAÑA, sobre todo en la forma tan serena, clara y sin dar lugar a la duda que tanto daño ha estado haciendo al conjunto de la sociedad de sentimientos Patrios. Ya estaba haciendo mucha falta un mensaje de tranquilidad como el que dio S. M. EL REY DE ESPAÑA.
Y como muy bien dice Vuecencia, (Pero por encima de esa diferencia está lo que nos une, el juramento que prestamos ante la bandera de cumplir con ese artículo de la constitución hasta la última gota de nuestra sangre.)
Además de la inmensa mayoría de los que entran en este blog, con la excepción de algunas personas partidistas y enemigas de ESPAÑA. Que no han sabido medir la capacidad de acción para hacerles frente de una manera juiciosa y valiente.
Atentamente y a las órdenes de ¡¡¡A MÍ LA LEGIÓN!!!
Ramón Lencero Nieto
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querido Enrique, mi coronel. Suscribo íntegramente tus palabras “Sereno por la contundente voz del Rey y preocupado porque, sin duda, estas situaciones siempre provocan daño a compatriotas, inocentes unos y equivocados otros”
¡VIVA ESPAÑA! ¡VIVA EL REY!l
Un abrazo legionario
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Si señor, Lorenzo: «TODO POR LA PATRIA»
Un abrazo
Adolfo
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Qué grandeza encierran sus palabras, Don Rafael.
Ayer compartí una inclemente jornada de montaña con veteranos boinas verdes. viejos soldados, como yo. Yos había fotógrafos, fontaneros, empresarios, abogados. Cada uno ha tomado su camino. Todos tienen en común el amor a España, el recuerdo de su paso por las filas militares y el no haber abjurado jamás de España.
Y en la cima de Peñalara, contra el viento y la lluvia, en medio de las adversas condiciones de la jornada, nos dimos cita para desplegar una bandera de España.
¡Qué magnífico ejemplo.
Adolfo Coloma
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Estoy con Vd. don Emilio. gracias por decirlo alto y claro.
Adolfo Coloma
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Si, don Andrés. «recuperar el corazón de los catalanes» esa es una tarea importantísima a medio y largo plazo. confío en que las autoridades de la nación. sepan diseñar las políticas que conduzcan a ello, especialmente en materia de educación y comunicación.
Atentamente
Adolfo Coloma
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Alfonso, querido y viejo legionario. Te has fijado en lo esencial.
¡La grandeza de la gente sencilla y buena!
Un abrazo legionario.
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José María: gracias por su intervención que, como nos tiene acostumbrado, hay que leer con detenimiento.
como Vd sabe, al Rey le corresponde el «MANDO SUPREMO de las FUERZAS ARMADAS» (Art. 62.h de la CE), mientras que el Gobierno «Dirige la política exterior e interior, la administración civil y militar y la defensa del Estado» (Art. 97 de la CE)
Hay una clara diferencia entre el mando y la dirección.
Gracias por su intervención.
Adolfo Coloma
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Gracias, Goana.
Como bien dices, las palabras de SM el Rey, van dirigidas a todos los españoles, sin distinción de si son catalanes o no, militares o no. a todos por igual. Y han sido claras, serenas y contundentes, transmitiendo un mensaje de serenidad y confianza a todos los españoles.
Gracias por ponerlo de manifiesto.
Un abrazo legionario
Adolfo Coloma
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Gracias a Vd. Señora López del Moral
Atentamente
Adolfo Coloma
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Reblogueó esto en Fenix 837#Red.
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Buenas tardes.
Como soy una ciudadana corriente, y en este blog creo que somos minoría, me animo a comentar el artículo del General Coloma.
Me cuesta mucho entender a casi todos los estamentos: civil (político), militar, religioso, monárquico.
La monarquía: el Rey habló, se pronunció, pero parece ser que no puede «ejecutar», no tiene el poder suficiente para ello….
Los militares: obedecen a su «capitán». Su capitán da su parecer pero no puede «resolver», por lo que se quedan tranquilos, «con la satisfacción del deber cumplido», como diría mi madre….
La Iglesia: obedecen a su «Capitán», aunque a algunos
se les olvide, pero ese «Capitán» no es de este mundo, y no se ocupa de estas resoluciones…
Los civiles, los políticos: el Gobierno no actúa solo, quiere mayoría, cuanta más mejor, así las responsabilidades y posibles equívocos se reparten.
Los ciudadanos; ejercen cada 4 años, con la única misión de emitir 1 voto
La Constitución: parece ser que es lo que une a todos porque la votaron. Pero resulta que ésta no aclara casi nada porque para casi todo deja resquicios…
Entonces, ¿nos queda algo claro a los ciudadanos? Miramos a un lado y a otro, a unos y a otros, y vemos que todos tienen la mirada perdida. Eso si, unos y otros repiten una y otra vez: «el.pueblo tiene que despertar, «se tiene que mover», «a ver si surge alguien», «el «españolito» tiene que reaccionar»…
Pero lo que más llama la atención es que se sorprendan de las preguntas que un ciudadano hace: se «sorprenden» de los «sorprendidos». Por una cosa o por otra, aquí nadie es responsable, nadie se hace responsable, y encima quieren que los «súbditos», los «gobernados» lo sean, pero únicamente cuando ven su barco zozobrar. Pena, penita, pena
Agradecería que alguien me corrigiese y si es en su totalidad, mejor: nada me gustaría más que estar equivocada y poder entender
Buenas tardes a todos
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Es Vd. una ciudadana corriente, doña Fuensanta, pero si me lo permite, añadiría yo como se decía antes «de esas que se visten por los pies».
No, no crea Vd que son minoría en este blog las personas corrientes, porque como suele decir el General Dávila la acepción más corriente del término «general» no es otra que «parte de lo común»
Y entrando en la cuestión que de una manera tan analítica y tan clara expone, le diré que yo no estoy sorprendido. Así lo reflejo en ese Visus Mílitis (que no pretende ser más que él vistazo de un viejo soldado a los acontecimientos que vive) esta semana «con la misma preocupación que todos los españoles» con la misma preocupación que Vd. Y debo añadir que parte de esa preocupación tiene la base en las mismas preguntas que Vd se hace, que nos hace y que yo no puedo responder.
Solo puedo atisbar un camino: La unidad. La unidad de todos los que sienten a España, poniendo lo mucho que nos une, lo más importante, por encima de sensibilidades, percepciones o matices que nos llevan a perdernos en un dédalo de discusiones que difuminen nuestra fuerza. Compromiso de cada cual dentro de sus capacidades, en la defensa de esa unidad. Y lealtad con nuestro ordenamiento y con los que están a los mandos de la nave. ¿o es que piensa Vd. que, por ejemplo, la multitudinaria manifestación que vivimos en Barcelona el día 8 de Octubre no sacudió muchas conciencias?
Comparto pues Dña. Fuensanta sus preocupaciones y le invito a compartir mi fe.
atentamente
Adolfo Coloma
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Mi estimada Fuensanta, permítame comentar su interesante intervención en este nuestro querido Blog, que deseo sea de su interés seguir comentándolo.
A parte de confirmarle que todos los que intervenimos aquí somos ciudadanos corrientes, creo que todos entendemos algo de lo civil, político, militar, religioso y monárquico, porque forma parte de nuestra vida cotidiana y lo hablamos asiduamente en el bar, en familia, en el trabajo, etc.
Según nuestra Constitución, tiene usted razón, el rey se pronuncia pero no ejecuta porque para eso está el Ejecutivo. Los militares obedecen porque se deben a su disciplina y neutralidad. La Iglesia tiene su jerarquía, espiritualidad, apostolado, servicio, ritos, pero sin olvidar su carácter humanístico.
Y llegamos al fin a los civiles, que somos el común de los mortales, el pueblo llano que elige a sus políticos y que a veces se equivoca porque somos muy variados en nuestra formación, ideología y valores.
A mi entender, estamos en la peor época de nuestra generación, con la generalidad de políticos que no dan la talla, que solo buscan el sueldo, el sillón, el poder, el voto, el protagonismo; pero no el servicio, la dedicación, la gestión, el bien común,…
Y una Constitución que es la que es, pero que es y representa, hoy por hoy, lo único que tenemos, con sus luces y sombras, para la convivencia y guía.
Y, sobre todo, estimada amiga, el ciudadano está confundido, desorientado y cabreado porque sus representantes solo piensan en sus propios intereses, ideología, enfrentamiento y no en el conjunto de la inmensa mayoría.
Pero eso es lo que todos y cada uno hemos votado y es lo que hay y lo que impera en la actualidad, por eso estoy con mi querido General Coloma en lo referente a la fe, pero yo añado la confianza en que en un futuro se corrijan todos los males.
Créame si le digo que este humilde veterano ha estado y está muy preocupado y cabreado con todo lo que está sucediendo en nuestra querida España; y me solidarizo con su inquietud y preocupación.
Pero sobreponiéndome a todo lo anterior, le envío un fraternal abrazo.
Pedro Motas
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Millón de gracias, General Coloma, por responder a mis dudas e inquietudes.
Apela a la Unidad y, si es por ESPAÑA, SIEMPRE. No comparto, hoy por hoy, tanto su fé, me refiero a la fé política,o en política, porque la otra Fé, como dijo un político «ahora no toca», ahora estamos con el «Cesar». El horizonte se fué alejando con los años, y, ahora veo ese horizonte muy lejos y poco despejado. Quizás este blog me ayude a conservarla y aumentarla y agradezco enormemente la existencia del mismo porque nunca tuve la experiencia de la cercanía en el trato con el mundo militar, y éste es uno de los motivos que me empujaron a participar, para poder conocer sus opiniones de primera mano, por un conducto directo, como hago tambien en varios chats de tendencias y pensamientos diversos porque creo que eso abre mucho la mente y hace pensar, asi que, con este blog, el espectro queda bastante equilibrado.
Reitero mi agradecimiento y lo acompaño con un profundo ¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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Buenas tardes, D. Pedro Motas. Agradezco infinito su atenta respuesta.
Dice Vd que «el Rey se pronuncia pero no ejecuta», que para eso está el Ejecutivo. Pués ahí está la cosa. El ejecutivo «ejecuta» pero no garantiza que coincida su ejecución, sus formas, su intensidad, etc..
con la del Rey. Y, si así fuese, no entiendo bien la utilidad de la Monarquía en la actualidad, como tampoco entiendo bien que su alocución tranquilice tanto. Es de agradecer su opinión pero no va mucho más allá pues dicen que tiene las manos atadas.Surgió lo de Barcelona y Madrid por el.esfuerzo y organización de varias asociaciones y personas pero en modo alguno se movilizó tanta gente por la anteriormente mencionada alocución, sinó que nos movió y unió España y solo España.Su Unidad. El Rey tardó mucho en intervenir. Está reacción masiva fué por la unidad de España y, «paralelamente», la Monarquía salió reforzada, que falta le hacía. Voy a releer otra vez, y tener a mano, el Testamento de Franco. Nos pidió que arropásemos al Rey Emérito y allí fuimos muchos, tantos que estaba la Plaza y aledaños llenas y, haciendo un esfuerzo inmenso, por lealtad y agradecimiento, le escuchamos en silencio, aplaudimos y casi vitoreamos. Nos costó. Pero la vida pasa y te va mostrando comportamientos, y algunos somos como.los adoquines: duros, como nuestra memoria. Pero, con su ausencia, nos tocó otro «tempo», y aprendimos otras formas, pero nuestra raíz, nuestra base, es la misma, y el sentido de determinados vocablos no ha variado.
Sobre la Constitución ya vemos a donde nos ha llevado, y ya sabemos, ya hice mención a ello, que está llena de resquicios por donde colarse. Tambien pienso que ahora no es momento de revisarla porque primero hay que hacerla cumplir a todos. Pero no me gustaría conformarme con «esto es lo que hay», «es lo único que tenemos», «es lo que es», porque así no vamos a ningún lado, no vamos bien. Querría que se reformasen y variasen algunos puntos, y ahí es donde se tambalea mi fé.
Pero toda esta preocupación no nubla ni merma mi optimismo y confianza en el futuro y el de nuestros hijos porque creo que, a la larga, «ésto», (este «ésto» entendido como global), no da más de sí. Me gustaría, si Dios quiere, ver aquí cómo algunas cosas vuelven a donde deberían estar, en todos los ordenes. Como dice el Papa: «ésto no es un cambio de época sinó una época de cambio». Agradezco muchísimo todas sus puntualizaciones, con la convicción de que el mejor aprendizaje es escuchar a todos con el respeto debido, y, partiendo de ahí, formar nuestro propio juicio, siempre atentos a una posible modificación. Un abrazo fuerte y fraternal, acompañado siempre de un sonoro ¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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Lo siento. Escribi mal la frase del Papa. Es justo al contrario de como lo puse. Gracias
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No estoy de acuerdo. Creo que el juramente a la Patria obliga a algo más que esperar a que sea destrozada por sus enemigos. Al igual que Daoiz y Velarde se sublevaron el 2 de mayo de 1808 en Monteleón contra ltoda la superioridad afrancesada, al igual que los dos corregidores o alcaldes de Móstoles se levantaron porque el gobierno está secuestrado, igual que Franco se levantó en su momento porque la patria estaba siendo exterminada, creo que cada militar que ha realizado su juramento tiene obligación de defender a su patria por encima de cualesquiera otras obligaciones de cadena de mando u otras. Esa era la idea de ejército en el que me hubiera gustado entrar y no entrré por minusválido y me están demostrando que cada vez más los ejércitos se dedican a guerritas virtuales en ordenador olvidándose de la realidad terrible que tenemos en España. No estoy de acuerdo y lo manifiesto con bastante dolor. No me gustan sus comentarios porque nos esclavizan sin darnos ni un rayo de esperanza. Muy malo para España. Allá ustedes
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Estimado Sr (?).
Aunque respeto su opinión no puedo estar de acuerdo con usted.. El soldado palabra esta por cierto continuamente criticada , debe de cumplir con el principio básico de todo militar z la razón de su existencia mas allá de divagaciones filosóficas que es la disciplina , pilar básico para el buen funcionamiento de los ejércitos y para el país a que sirve.
Si bierm es cierto que juramos defender a Espana hasta la ultima gota de nuestra sangre , no es menos cierto que también juramos defender el orden constitucional establecido y en nuestra constitución el jefe del estado es SM el Rey y jefe supremo de las fuerzas armadas.
Si cualquier militar pensara en cualquier momento que espana se encuentra en peligro y actuara de una forma subjetiva esto seria un caos.
Y es por lo que reitero y hago hincapié a las ordenes de SM el Rey por el conducto reglamentario.
Atentamente.
Alfonso Morant
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Doña Fuensanta: Comprendo su desazón, su desconcierto y – no tanto – su fe en el futuro. Pero en definitiva la entiendo. Créame, la entiendo. Quizás por el hecho de ser militar, de estar educado en que siempre hay opciones «en cualquier circunstancia por desfavorable que esta sea» de tener claro que la rendición no es una opción, yo me aparte de vd en la fe en el futuro.
Argumenta Vd que «El horizonte se fue alejando con los años, y, ahora veo ese horizonte muy lejos y poco despejado» y no le falta, desde mi punto de vista, toda la razón. Pero ¿ahora qué? ¿Nos quedamos solo con el lamento? Es por eso que en esta hora decisiva, no encuentro mejor camino que la unión y apoyar y empujar al que tiene la responsabilidad de tirar del carro.
Algo similar le diría al Sr «Lapatriaestaenpeligro», respetando naturalmente su desacuerdo. Las guerritas que Vd llama virtuales, no es más que la forma de abaratar los costes del adiestramiento. Créame al menos esto. En cuanto a la intervención, creo que don Alfonso Moránt, le da cumplida explicación y a ello me remito. Lo que no resta un ápice de mérito a su argumento sobre la patriótica actuación de los Capitanes Daoiz y Velarde frente a los franceses – un enemigo exterior en aquel momento – Simplemente, no ha llegado ese momento, en mi opinión.
Y abundando en mi criterio de la unidad, le reitero que a las órdenes de SM el Rey y por el conducto de nuestra cadena de mando.
Gracias a los tres , por su participación en este blog.
Atentamente
Adolfo Coloma
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Siento tener que puntualizar, General Coloma, pero es que no es la primera vez que ante la disconformidad se apele al lamento por toda acción.
Primero describo mi visión del horizonte y, después, participo mi optimismo, aunque voy a cambiar esa palabra por otra que me gusta más: ESPERANZA, porque sin ella uno no se mueve, no avanza, se paraliza. Participo tambien mi deseo de, en su debido momento, ver cambios en la actual Constitución. Ésto no creo que sea «quedarse en el lamento», simplemente describo mi visión de las cosas y mi deseo de cambio a mejor. Pero es solo mi opinión, una opinión más. Dijo Vd que quería compartir su fé, y yo me adhiero a ella. A la fé y a la esperanza. Por eso haré todo lo que esté en mi mano para estar en Barcelona el próximo Domingo, con mi Bandera, la Bandera de todos y, una vez en Madrid, volver a exponer mis opiniones: buenas y malas, y a la espera de cumplir con lo único para lo que se me requiere: dar mi voto. Mientras ésto no llegue, me adhiero tbien a la, en estos momentos, tan necesaria unidad, aunque algunos criterios no se compartan. Agradezco enormemen-te su dedicación y la disponibilidad de su tiempo a este Blog tan interesante y enriquecedor. Buenas tardes y
VIVA ESPAÑA
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