Sin Navidad en el Frente

images

El año pasado con este artículo felicitaba a nuestras tropas destacadas en distintas misiones por el mundo. Al volver ahora a leerlo me doy cuenta de que casi nada ha cambiado. Hemos dejado Afganistán en una operación difícil, silenciosa y poco valorada en el conjunto de la sociedad, porque no se ha explicado lo suficiente. Todavía allí, y en muchos otros rincones del mundo, siguen nuestros soldados velando por los intereses de España, es decir, de los españoles. Pero esa Navidad en el frente se enrarece cuando el apoyo desde la retaguardia no es completo ya que el sonido separador se oye con demasiada fuerza.  El Presidente del Gobierno al dirigirse a nuestra tropas en misiones internacionales ha dicho que «llevan nuestra bandera allí donde son necesarios» y ha resaltado la importancia de ser español, el orgullo de representar a nuestra patria. Gracias al Presidente por sus palabras; seguro que las dice para que las oigan todos los españoles. También les ha ordenado » volver sanos y salvos», cosa que cumplirán si la misión y las condiciones de la misma se lo permiten. Ya sabe Señor Presidente que lo que ellos han jurado o prometido, es incluso a costa de la vida.

images (1)

Los frentes en la guerra tienen la necesidad de estar íntimamente ligados a la retaguardia desde donde les llega la corriente espiritual y material que les sustenta. Si este flujo se rompe, las tropas quedan aisladas y a merced del enemigo. Nuestros soldados destacados en los frentes de Afganistán, África, Líbano, Índico y otros rincones del mundo saben que el flujo material no les va a faltar a pesar de las dificultades por las que pasa su retaguardia.

Imagen

Asumen la lejanía y la vida austera, una vez más,  para ellos y sus familias, como las de la mayor parte de los españoles, sin que por ello haya tristeza. En el frente nunca estás solo ni sientes soledad porque estás envuelto en el compañerismo, la amistad, la unión y el socorro. Las familias también se arropan mutuamente y entre lágrimas de ausencias y sonrisas de amores miran más allá del momento temporal y emotivo. La Feliz Navidad se queda en un recorrido de sentimientos del frente a retaguardia y viceversa. Es España, el servicio a España, la razón que obliga a esta lejanía, a la ausencia, y eso no duele. Lo que duele y hace inconmensurable la distancia es el interrogante que surge sobre lo que está pasando en España, sobre el empuje espiritual de la retaguardia que llega sin fuerza y se enfría por momentos. ¿Por qué no quieren ser España? ¿Conjuras, maquinaciones, traiciones? Es un duro interrogante que requiere de una rápida y contundente respuesta. Si no es así no hay Navidad en el frente. Los soldados no han vacilado en el sacrificio, incluso en derramar el tributo de su sangre. No se quejan, pero necesitan saber lo más rápidamente posible que sus conciudadanos y dirigentes les comprenden, les apoyan, les protegen y que con ellos y como ellos, defienden la grandeza y la unidad de España.

Imagen

¡Feliz Nochebuena y Día de Navidad! a todos los que desde cualquier rincón de España o del mundo, desde cualquier profesión o trabajo, hoy nos prestan su servicio

Rafael Dávila Álvarez. General de División(R)