LA LINEA DE MÁXIMO RETROCESO (Teniente General Emilio Pérez Alamán)

9398809--644x362Ya tenemos en las pequeñas pantallas de nuestras casas la versión española de “Salvar al soldado Ryan” pero….¡Qué diferencia!

No lo digo porque el elenco no sea el de Spielberg, Tom Hanks y compañeros de reparto, las comparaciones son odiosas, pero no puedo dejar de preguntarme cual es el objetivo de la iniciada serie aunque mucho me maligno que será el de casi siempre en general y el de siempre en la cadena que la emite.

CARTEL LOS NUESTROSSobre todo lo que no termino de entender es que se haya realizado, con el apoyo del Ejército que, por lo que se ve, no ha escatimado medios para facilitar su puesta en escena sin el adecuado control de la finalidad de los promotores y el descrédito que ha supuesto para nuestra Institución la sola proyección del primer capítulo. Para ello parece que no se ha exigido la presencia de un asesor militar especializado que impidiera las barbaridades que se exhiben como conducta normal en nuestras Unidades. Lo digo porque no quiero pensar que ha existido un asesor de uniforme que, una de dos: o no sabe lo que es la milicia por muy uniformado que vaya y por lo que habrá que vigilar a quien lo designó, o que haya recibido instrucciones respecto a su cometido, en cuyo caso me quedo sin palabras bien sonantes para continuar este párrafo.

Por supuesto que digo todo lo anterior sin que se me pase por la cabeza el criticar siquiera el derecho a la libertad de expresión pero ese derecho no debe suponer que “además de… se ponga la cama”.articulos__skilab-sera-el-taller-de-la-ume_betanieve2_33_1413983798

En uso de la libertad que disfrutamos cada cual puede hacer de su capa un sayo y si desea arremeter contra el Ejército o parodiarlo que resucite al sargento Arencivia pero con sus medios y comprando el atrezzo en el rastro. Si por el contrario quiere hacer una representación real y por lo tanto digna de nuestras Fuerzas Armadas, el Ejército estará como siempre dispuesto a colaborar como lo está frente al fuego, la nieve o las inundaciones.

RROO_1978_100Esta representación ofensiva y mentirosa en forma y fondo de nuestros soldados, unida a la contestación negativa a mi solicitud (Febrero 19 2015), de mantener el nombre de “BRUNETE” en la División de la nueva reorganización de la Fuerza, por primar lo políticamente correcto sobre el historial, tradiciones y símbolos de la Unidad, hacen que reclame al Mando actual, como lo hice en mi situación de activo, siguiendo el conducto reglamentario, la necesidad de diferenciar la debida subordinación y acatamiento legal de las disposiciones del poder político de su intervención en el régimen interno propio de los Ejércitos recogido en las Reales Ordenanzas.

Este Código de Conducta de los militares, principios éticos y reglas de comportamiento fue redactado por miembros de las Fuerzas Armadas de todos los empleos y a pesar de las correcciones y adaptaciones realizadas con criterios políticos, no deja de expresar los condicionantes pura y exclusivamente castrenses.

Aún así no deja de ser intervenido de forma variante por la acción de los distintos gobiernos según los programas de cada partido, lo que no beneficia, ni mucho menos, el ejercicio adecuado del Mando ni la buena marcha de los Ejércitos y sus componentes.esp

Por tal motivo los máximos responsables de asumir ese mando deben tener autentica autonomía para ejercer su propia y específica función sin que ello tenga que producir ningún temor a un comportamiento antidemocrático.

Por ello, pienso que los Jefes, en todos los niveles pero sobre todo en los más altos, deberían haber ejercido y ejercer sus responsabilidades en muchas ocasiones, sin mas directriz que su amor a la responsabilidad y capacidad para decidir

Por ejemplo, en el segundo de los asuntos arriba mencionados, se debería tener en cuenta lo contemplado en las Reales Ordenanzas y “conservar y transmitir el historial, tradiciones y símbolos de la Unidad para perpetuar su recuerdo, contribuir a fomentar el espíritu de Unidad y reforzar las virtudes militares de sus componentes”. Todo ello debe prevalecer a cualquier otro interés y ser responsabilidad exclusiva del JEME.2872

En el caso de la desdichada serie, que ha producido un alto grado de malestar, el Mando del Ejército debe actuar impulsado por el sentimiento del honor, porque para el militar “la dignidad y los derechos inviolables de las personas son valores que tiene obligación de respetar y derecho a exigir”

Estos ejemplos, como otros tantos que afectan intrínsecamente a nuestro carácter castrense, han sido y son frecuentemente intervenidos por otro estamento cuyas atribuciones sobre las Fuerzas Armadas son estrictamente asumidas y cumplidas sin excepción y se debe aceptar que la “Autoridad militar implica el derecho y el deber de tomar decisiones, hacerlas cumplir, fortalecer la moral y motivar a los subordinados”.

De siempre, en mi situación de retirado y en la anterior, he manifestado a mis superiores este desequilibrio y la necesidad de corregirlo. Sin embargo la realidad es que el Ministerio iba y va avanzando mientras el Ejército parece que , rememorando la Doctrina de 1980, está realizando una larga Maniobra retardadora, cediendo terreno a la espera de tomar la iniciativa. Pero lo más importante e imprescindible de dicha Maniobra es decidir el momento y el lugar donde parar ese retroceso y recuperar la iniciativa. La decisión de elegir el donde y cuando de ese cambio de actitud es única y exclusiva del JEFE y en ella asume su responsabilidad y empeña su prestigio. Esa linea a mantener sin retroceder ni un metro más la llamábamos entoncespajara3--644x408

LINEA DE MÁXIMO RETROCESO

Emilio Pérez Alamán Teniente General (R)

15 pensamientos en “LA LINEA DE MÁXIMO RETROCESO (Teniente General Emilio Pérez Alamán)

  1. Como ya es sabido por el General Dávila y por los diferentes grupos a los que pertenezco de Twitter, Facebook y Google+, he puesto mi opinión escueta al respecto, pero la repito aquí para que quede constancia, una vez más:
    «Visto el comienzo… no pienso seguir viendo más porque con lo visto hasta ahora me basta. Es un culebrón más, digno de TV5; es la clásica españolada burda y de mal gusto que deja en mal lugar a las Operaciones Especiales; nada que ver con la realidad. Me siento decepcionado y lo siento por el prestigio de una Unidad que merece otro trato y consideración. Es mi humilde opinión.
    Pedro Motas»

    No obstante, me permito la libertad de poner aquí dos cartas que el Presidente de la Hermandad de La Legión de Murcia, acaba de poner en el Grupo, al cual pertenezco. No pongo la identidad de los firmantes, por prudencia y respeto a los mismos, pero si dejo constancia de que son personas que saben del asunto en cuestión.:

    1ªCARTA
    Queridos amigos:
    Ayer con toda ilusión me puse cómodo para ver la serie » Los Nuestros » de TV5, pues después de tanto anuncio parecía que seria algo interesante dado que se publicitaba que los actores se habían entrenado en el GOE de Alicante al tratarse de una Película de Operaciones Especiales y que además el Director de la serie había contado con el asesoramiento de un Tte.Coronel.
    A medida que la serie avanzaba me llevaba las manos a la cabeza pues lo que se presentaba ante mis ojos era un zafiedad con «folleteo inclusive» como es habitual en el cine español, observando las siguientes cosas:
    Un Teniente que lleva el pelo cortado a lo » indio cheroki» y con un «tatuaje en el cuello» que como sabemos está prohibido en nuestras FFAA,s.
    Ese mismo «Teniente se folla a una cabo»(protagonista de la serie) en un camión, lo cual constituye un «Delito»por estar dentro de una Base, aunque sea de ONU.
    Ese mismo Teniente habla con dicha cabo mientras ella está con la camisola abierta y medio sentada y se permite decirle a ese Tte. que ya adivina lo que el quiere ( Follar), lo cual constituye una falta de disciplina grave.
    Un Comandante melifluo y con el pelo mas largo de lo reglamentario y que usa un vocabulario no acorde con su condición militar y parece un paisano cuando da las ordenes.
    Un Coronel con la insignia de EM en el parche de grado, con la cara llena de viruela que parece mas un gánster que un Coronel y que se deja ningunear por el comandante apareciendo siempre detrás como un fantasma.
    Un soldado que mata una cabra sin venir a cuento y que se pone histérico cuando la ve avanzar hacia él.
    Una operación de rescate ridícula donde no se toman las medidas de seguridad adecuadas, ni se reparten las misiones adecuadamente y que para terminar de cagarla disparan a todo quisqui poniendo en riesgo a los niños rehenes, lanzando un bote de humo dentro del camión ( donde suponen que están), desconociendo la peligrosidad y toxicidad del humo dentro de un reciento cerrado y con la posibilidad de que caiga en el cuerpo de uno de los niños a una temperatura de 100º que es la alcanza en su boca el bote de humo.
    Y así podría seguir hasta llenar dos folios de aberraciones.¡¡¡ MENUDO ASESOR HAN TENIDO !!!
    Los americanos han hecho ciento de peliculas de este tipo y jamás han mezclado el coño con las operaciones especiales , nosotros ademas de meter escenas de sexo, llenamos la Unidad de mujeres por eso de la igualdad.
    Espero que el JEME o el Mando del GOE eleve la queja reglamentaria ante quien esa el inductor de esa ignominia y cese a todos los que han colaborado con esta repugnante serie.

    2ªCARTA
    Queridos amigos:
    Ayer , cuando tuve noticias sobre la emisión de la serie televisiva «Los nuestros», difundí ampliamente entre mi familia, circulo de amigos e incluso a sectores de la Universidad de Sevilla, dicho evento.
    ¡Para que lo haría!. Nunca he visto un programa tan zafio, tan alejado de la realidad, tan falso y tan destructivo. Lo considero un verdadero insulto a la verdad.
    Responde a mi entender a una idea sibilina y maquiavélica de como destrozar una buena reputación mediante la publicación de un una aparente alabanza y una verdad a medias.
    Los que durante muchos años hemos trabajado bajo unas técnicas, unos protocolos y unas normativas muy serias; los que hemos llevado con infinito orgullo, dedicación y respeto la boina verde de Operaciones Especiales y hemos vividos con intensidad los primeros años de las mal llamadas «Misiones de Paz», la primeras preguntas que nos asaltan son:
    – ¿Quien o quienes -ajenos a las Fuerzas Armadas- están detrás de todo esto?.
    – ¿Quien supervisó la utilización de la serie en el sentido de que al menos se adaptase a la realidad?. Porque el costoso material militar que se ha utilizado lo ha tenido que facilitar las Fuerzas Armadas (FAS).
    ¡Jamás he tenido noticias de un compadreo asi dentro de las FAS y mucho menos en la actuación de un equipo de Operaciones Especiales.!.
    Nadie hace la menor mención a la legislación que prohíbe taxativamente las relaciones de tipo sexual dentro de un establecimiento militar. ¿Alguien ha visto un mando con «la pinta y formas» del Teniente que sale en la serie?.
    ¡Ya me parecía extraño que esa cadena de TV. hiciera algo positivo para las FAS!.
    Hace algunos años, cuando las FAS empezábamos a «despegar» positivamente en la opinión pública después de una campaña atroz y negativa hacia los militares, me contaron que un conocido y famoso periodista-presentador, muy a fin a esa cadena televisiva, se refirió a una encuesta del CIS. en la que salíamos muy bien parados, comentando: ¡Con el trabajo que nos ha costado desprestigiarlos, ahora va a resultar que lo están haciendo bien!.
    El mal ya está hecho, pero la serie continuará emitiendose. ¡Seguro!
    Y perdonad mi «cabreo».

    Mis queridos, apreciados y respetados Generales, creo que como muestra vale lo expuesto.
    Un fuerte abrazo Legionario.
    Pedro Motas

    Me gusta

  2. La duda que se me plantea, mi general, es que en la maniobra retardadora, además de la línea de máximo retroceso se contemplaban en profundidad y a vanguardia de ella una amalgama de posiciones en el terreno, no solo para alargar y desgastar que también para canalizar al enemigo lesionando en lo posible su cohesión y dirigirlo a zonas más convenientes para detenerlo por el fuego y destruirlo por el contraataque. En definitiva era un juego complejo de líneas a vanguardia de ella que aun cediendo en determinados lugares, en otros, se mantenían, bien por tiempo o bien con oscilaciones previstas favoreciendo esa conducción dispersante y de desgaste. Sin eso, la línea de máximo retroceso podría convertirse en simple quimera.
    Son ya muchos años (espacio) en que se va cediendo sin resistencia aparente y el contrario no solo parece progresar sino que acumula medios y concentra sus esfuerzos con absoluta libertad de acción, de tal manera que esa línea de máximo retroceso no parece que realmente pueda por si misma cumplir su cometido y la duda afecta al viejo principio de voluntad de vencer. Tras el fracaso viene la retirada en la que si quiebra la coordinación necesaria para evitar la huida en desorden, llega indefectiblemente el final de la batalla, pues permite y facilita la definitiva explotación del éxito del contrario anulando cualquier posibilidad de recuperación.
    Mi duda se encuadra en la dificultad de contestarme la cuestión: “¿En qué momento estamos?”

    Me gusta

  3. Amigo Alonso,ya veo que no eres lego en táctica, yo tampoco, pero aclaro que la pretensión del artículo es presentar un símil de una situación en la que el reparto de competencias entre dos estamentos, uno avanza absorbiendo las del otro, mientras éste cede las que deben serle propias y en algún momento es necesario parar esta situación para que cada uno asuma la responsabilidad que le corresponde para bien de todos.
    En ningún momento he pretendido aplicar una solución táctica a un problema de pura administración de funciones con el deseo de la mejor marcha de los asuntos puramente castrenses. Por tanto no es una lección de como se desarrolla este tipo de Maniobra lo que contiene el artículo, si no dar un aviso de que se están cediendo competencias propias de los Ejércitos con el consiguiente desgaste de la acción de Mando de sus Jefes, y por tanto dificultando el mejor funcionamiento del conjunto militar.
    Gracias por tu participación que permite evitar otra interpretación distinta a la pretendida

    Me gusta

  4. Aquí dejo el escrito que acabo de ver en Facebook por parte del asesor de «Los nuestros»… lo ha puesto a través de otra persona, hace una hora, en el grupo Los Veteranos Boinas Verdes de España y todavía no ha habido respuesta alguna:

    «Juan Ginés García y Pérez
    Teniente Coronel de Infantería (reserva)
    Asesor militar de Los Nuestros
    Queridos compañeros y amigos:
    Ya había leído bastantes críticas sobre la serie Los Nuestros y ahora algunos de vosotros me habéis hecho llegar cartas particulares, escritas por militares, que corren por las redes del Ejercito. No tengo intención de contestar a ninguna, pero como más de uno de vosotros se habrá sentido defraudado, me gustaría tener la oportunidad de aportaros otro punto de vista.
    Contaba con ese tipo de críticas, no os quepa duda. La sensación que me queda es agridulce, de alegría por el éxito inicial de la serie y de desazón por el rechazo provocado en parte de mis compañeros. Y entiendo su enfado, porque hay muchas cosas que a mí tampoco me gustan nada, pero hay que tener en cuenta que estamos ante una serie de entretenimiento, no ante un documental; que los guionistas introducen elementos que a nosotros nos parecen chorradas, pero que amplían notablemente la audiencia, y que en nuestro cine casi siempre hemos percibido intención de denostar al militar, mientras que aquí es todo lo contrario.
    Cuando me llegó el guión del primer capítulo me quedé de piedra; lo primero que pensé fue: yo no puedo participar en esto…salvo que exista posibilidad de cambiar muchas cosas. La historia estaba plagada de estereotipos, pero detecté claramente la intención de dejar a nuestros soldados en buen lugar, lo cual era alentador. Mi primera reunión con el equipo de producción confirmó esta impresión positiva y pronto pude comprobar que no estaba equivocado.
    Para que os hagáis una idea el capitán –Hugo Silva- no sólo había tenido un romance con la tiradora de precisión sino que, además, era un alcohólico rehabilitado y un verraco que se había tirado a la mujer del coronel, lo que daba lugar posteriormente a alguna escena desagradable. En la secuencia en la que se veía por primera vez a los boinas verdes, nuestros chicos se inflaban de repartir leches a los guiris en un bar. Al entrar en el comedor de la base en Mali, se colaban delante de los que esperaban pacientemente en fila, porque eran más chulos que nadie…Pues bien, todo esto y unas cuantas cosillas más, desaparecieron tras la primera revisión del guión. No era mal comienzo.
    Alguien puede pensar que los guionistas andaban muy despistados, pero resulta que el cine bélico norteamericano está repleto no sólo de héroes, sino también de cornudos, de borrachos, de machistas, de porreros, de camorristas,…y no pasa nada. Sin embargo aquí, Los Nuestros está provocando más polémica que cualquier película española anterior sobre tema militar ¿Por qué? Pues probablemente porque había despertado grandes expectativas y a muchos les ha decepcionado. La serie tiene bastantes fallos, por supuesto -¿hay alguna que no los tenga?- pero también innovaciones y detalles buenos. Me han admitido un montón de propuestas que han llegado a cambiar partes del guión, a introducir personajes que antes no existían, a crear nuevos decorados, …y todo eso cuesta mucho dinero y trabajo. Sin embargo otras, sencillas y sin coste alguno, han quedado como estaban. Pero eso es lo normal, mi misión era asesorar, hasta resultar coñazo a veces, pero la decisión final correspondía a otras personas que conocen muy bien su profesión. Y los fallos no siempre son tales, sino recursos artísticos o licencias literarias para aumentar audiencia o hacer más inteligible determinadas cosas.
    Comprendo las críticas recibidas, sobre todo porque suelen partir de personas que aman nuestra Institución y escriben con ánimo de defenderla. Algunas, incluso, las comparto. Pero señores, hay que entender que una película plagada de detalles estrictamente militares, sin concesiones que nos parecen absurdas, puede emocionarme hasta el punto de pintarme la cara mientras la veo sentado en el sofá, pero mi entusiasmo será compartido por…¿cien mil espectadores, quizás alguno más? Y seremos los de siempre: gente del gremio y unos cuantos partidarios.
    ¿Alguien piensa que me gusta la cresta macarrónica del teniente, el magreo chabacano en el camión o la coña de pegarle un tiro a una cabra inocente? Pues no, no me gusta nada. Pero da la casualidad de que estas cosas, combinadas con las típicamente nuestras y otras más, pueden llegar a sentar una numerosa audiencia frente al televisor.
    Guste o no, los comentarios a favor de Los Nuestros son abrumadoramente más numerosos que las criticas. Por una vez, las redes sociales se han llenado de comentarios a favor del Ejército, sorprendidos de ver en la tele a nuestros soldados pegando tiros en vez de repartiendo bocadillos. Trending Topic, ni más ni menos. Si para ello he de tragar con la cresta, el magreo, la puta cabra y otras cosas, lo hago encantado. Porque, por una vez, una serie española se pone de nuestro lado, sin complejos. Porque, por una vez, una serie española está dedicada a nuestros caídos en zonas de operaciones. Porque, por una vez, una serie española tiene cojones de decir que, aunque nuestra herramienta sea un arma, aunque tengamos que matar, somos los buenos. Con sus fallos y sus aciertos, Los Nuestros ha conseguido que POR PRIMERA VEZ, nuestros soldados sean los héroes de casi cuatro millones de espectadores.
    Así que estoy orgulloso de haber participado en ello, ¿sabéis por qué? Porque, al igual que mis detractores, también amo al Ejército y creo sinceramente que el resultado va a ser muy positivo para nuestra Institución. ¿Que me he ganado el desprecio o la ojeriza de unos cuantos miles de militares? Pues lo siento de verdad, pero espero que entiendan que a ellos no hace falta ganarlos para la causa y a los que hay que captar es a los de fuera, a los que no nos conocen.
    Me gustaría que, del mismo modo que las críticas han corrido por la red, se difundiera también mi mensaje en sentido inverso. Parece justo, ¿no? A fin de cuentas, sólo es otro punto de vista.
    otro punto de vista sobre la serie.»

    Me gusta

  5. Conviene no olvidar lo que uno es y menos cuando se es soldado que se es «para siempre» al margen de la situación en que te encuentres. Nuestra misión no es convencer ni ganarse para la causa a nadie. Nuestra misión es vencer y amar a España y así es como «convences».
    Aquí no hay desprecio ni ojeriza sino defensa de unos valores y verdades que se han ocultado para resaltar extraños comportamientos que en casi 50 años de servicio nunca he visto.
    Decimos aquí que las quejas al Maestro Armero.

    Me gusta

  6. Gracias mi general por tu amable apostilla que viene a dejar claro a terceros tu intención. Permíteme que apunte que la mía tampoco sea esa ni mucho menos. Tan solo pretendía hacer la foto que me sale del símil de aquel procedimiento ya viejo.
    Débiles y aisladas posiciones a vanguardia de la línea mencionada, rebasadas y envueltas con la amenaza de ser barridas por escalones más atrasados del contrario, que tal parece mantiene su libertad de acción y su capacidad de ejecución intacta ante esa línea de máximo retroceso que mencionas. A retaguardia de ella solo fuegos artificiales las más de las veces provocados por quienes no están ya operativos ni en la zona de combate, algunos incluso en hospitales de campaña y muchos en la zona del interior.
    Es una simple foto sin más intención y valor que el que pueda tener una caricatura, sí, escrita en calve que quizás no entiendan los profanos y haya hecho precisa la aclaración. Admito mi torpeza.
    Quedo a tus órdenes.

    Me gusta

  7. Otro mensaje puesto por un militar íntegro, que conozco, y que sí es un gran especialista en Operaciones especiales:
    La serie es una » merde» total. No me entró ni cabreo siquiera, es más: me reí un rato largo y me preguntaba yo a mí mismo si seria cierto que estuve 15 años mandando OE, s
    Intento comprender que el MINISDEF quiera hacer propaganda, poner en conocimiento, hacer notar, etc, etc y que, también, la TV en cuestión quiera «hacer Share» pero si SÉ PERFECTAMENTE que nuestro MANDO tiene que ESTAR OBLIGADO a dar una imagen real de los componentes de nuestro Ejército, de mis…!!GUERRILLEROS!!., de los que tanto aprendí, los que tanto entregan, de los que siempre me he sentido orgulloso, a los que siempre respete y me respetaron y en los que siempre me reconoceré, siempre!
    Y no me puedo reconocer en ése «colegueo» lamentable de Mandos y Tropa, en esa falta de seriedad de palabras, órdenes y acciones, en ése Teniente mohicano tatuado que. ..»de paso que voy a rescatar a unos niños, me cepillo a la Cabo del Tercio! Me es imposible!
    Es tamaña la gilipollez que han montado, con el beneplácito de algún » capullo sesudo» de Castellana que no me extrañó cuando ésta mañana, tomando una caña, un conocido me preguntó riéndose: Juanito!: cuántas Cabos te has tirado en las COE,s…?
    Ufff!, ésos no son ni los míos ni los NUESTROS son..¡¡¡ LOS SUYOS!!!
    Juan Zato Paadin Coronel de Infantería( R ) COE 41, COE 61, COE 52, COE 82.

    Me gusta

  8. Después de leer estos comentarios y otros muchos de auténticos profesionales, que han vivido sin límites ni reservas, siendo y sintiendo, no solo estando, Unidades de élite como son las de Operaciones Especiales, es posible que los Organos de Comunicación que alaban la imagen que transmite lo exhibido, tal como manifiesta el Sr. asesor, insistan en el axioma de que » En cuestiones de criterio la razón del Ministerio». El mío sin embargo contempla la realidad de que somos humanos y cualquiera se puede equivocar, incluso con buena voluntad. Entonces lo adecuado es reconocerlo, disculparse y no «mantenella y no enmendalla» ¡ANIMO!

    Me gusta

  9. Excepticismo; Esa palabra da origen a una expresión que dice más o menos que los excepticos somos aquellos que dudamos de verdad la o eficacia de una cosa….No soy gran poeta, ni filológo, cierto es .. solo puedo atesorar 33 años de servicio a mi Patria en su Ejército, el mío al que tanto debo y quiero…casi todos han sido en los paracaidistas, a los que a veces perdiendo un poco de mi humildad, he llegado a idolatrar.. Siempre fui un excéptico de todo aquello que trataba de adornar, endulzar, falsear etc un oficio, a la vez religión cuyos fines básicos son además de la defensa de esa Patria nuestra, el velar por el Ejército como Institución. y que su razón principal es prepararnos para la guerra con el deseo de nunca llegar a tener que poner en práctica, esa instrucción adquirida…Para los que nos denostan del para que instruirnos sino deseamos usarla , les remito a mi ejemplo preferido.. ¿Acaso un médico de urgencias no desea tener conocimientos y no tener que usarlos..?.. Pues bien a mi manera personal de entender, debemos dedicarnos a lo nuestro, de forma callada, trabajando y sudando día a día , siempre de forma voluntaria, sin desear salir en la tele, sin deseos de figurar, sino cumpliendo con nuestro oficio de soldados y no de actores.(para rodar ya habrá otros) que noe s poco ….Yo quizás sea un purista de aquellos que dicen «árbitro bueno es el que no le enfoca la cámara» o aquel otro de «Seamos dogmáticos..se torea con muleta, capote o a caballo pero nunca con un pañuelo rojo ni borrachos, más que nada para no deslucir el oficio de torear que es sagrado..» me gustó está expresión última, que deja bien alto el arte de Cúchares y trasladando el simil a lo mío no puedo estar más en acuerdo con ella.. » A veces cuando se cree que el pañuelo rojo , sustituye a la muleta y aunque el pañuelero esté delante del toro, se muere el arte y la fiesta pierde tronío, por falsificación del engaño » Creo que eso ha pasado..por querer salir en apoyo de los tentadores y de la cámara, se ha hecho más daño que favor al oficio. en este caso una religión: La Milicia. y por ende a una unidad militar abnegada y sacrificada: Los Boinas Verdes, Nuestros Guerrileros. Brigada Moisés Díaz Cobo.Brigada Paracaidista.

    Me gusta

  10. No hay organización humana en la que todos sus integrantes sean dechados de virtudes y cumplan sus normas siempre y en todo momento. Los hay sin duda, pero son excepcionales y constituyen minoría. La naturaleza humana es un complejo conjunto de debilidades y fortalezas que asimilándola a lo que los militares definimos como empleo táctico del armamento, podíamos decir que la honorabilidad consiste en minimizar las debilidades y potenciar las fortalezas. Aparece entonces la persona de honor, que no es ni más ni menos que aquel cuyas profundas convicciones le lleva a obrar siempre bien.
    La Institución Castrense de España así como las de aquellas otras naciones que conforman lo que se da en llamar civilización occidental, se rigen por unos valores que son concretos, permanentes y ciertamente universales. Constituyen organizaciones disciplinadas, sometidas al derecho y sirven a su nación. En ellas se cultiva el amor a la patria, el honor, el sentido del deber, el espíritu de entrega hasta las últimas consecuencias y el valor.
    Los hombres que se incorporan a ella, libre y voluntariamente se comprometen a someterse a esos valores como primer fundamento de la disciplina. Los Decálogos, Credos, lemas y las Reales Ordenanzas contribuyen a potenciar de manera permanente esos valores tanto en unidades como en los individuos, por eso se habla de la importancia del “espíritu militar” y del “espíritu de Unidad”. Se prevén también para su cuidado premios y castigos y a ello contribuyen las condecoraciones militares, las felicitaciones, los regímenes disciplinarios y el códigos de justicia.
    No parece pues normal que si se pretende un homenaje a los que en el cumplimiento del deber han dado su vida; ensalzar a determinada unidad del ejército; al ejército de tierra como tal; o incluso a la Institución Fuerzas Armadas, se utilice un guion y unos estereotipos que agreden permanentemente esos valores que la Institución pretende inculcar y conservar inmaculados. Y que además lo hacen permanentemente con sus actitudes y manifestaciones quebrantando la norma.
    En mi opinión, algo no cuadra y mucho menos cuando esa serie televisiva recibe los beneplácitos y se estrena en ámbitos internos de la propia Institución. Y no entro en la imagen que se ofrece a la propia sociedad de lo que realmente son las Fuerzas Armadas que son suyas y están para servirles.
    Lo que a mí me inculcaron desde que ingrese como cadete en la Academia de Zaragoza y lo que yo he vivido en más de tres décadas sirviendo en Unidades, no solo no se parece en nada a lo que nos muestran, que también me hace sentir vergüenza ajena. Creo que se está perdiendo el norte.

    Me gusta

  11. Más de cuarenta y cinco años de servicio, de ellos mas de veinte en Unidades Especiales, me autorizan para expresar una modesta opinión: El comienzo de la serie «Los nuestros», ha sido lamentable y patético, y de ella solo alcanzo a sacar una CONCLUSIÓN: Cualquier parecido con la realidad es mera coincidencia. No soy «guerri», mis pasos como aprendiz de Soldado me llevaron por la BRIPAC en donde serví en todos los empleos desde Teniente hasta Teniente Coronel Jefe de Bandera. Estos destinos, prioritariamente, me ofrecieron muchas ocasiones de trabajar no solamente con nuestros queridos y admirados compañerps de las COE,s. sino también con los de otros ejércitos (Francés, Belga, Italiano, Alemán, Americano, Portugués,…), y puedo asegurar por tanto, con conocimiento de causa, que la CONCLUSIÓN
    que expongo en las primeras líneas, es rotundamente cierta. .
    Alejandro Flores Sanmartín (Coronel, Retirado)
    PD. Lo de los empleos de Teniente a Teniente Coronel los inicio con letra mayúscula, como una diferencia mas con los teniente, capitán….., de la patética série

    Me gusta

  12. Es normal que a los profesionales de la milicia no les haya agradado la serie en cuestión, pero como señala el T.Col. Juan Ginés asesor de la misma, el cine es una ficción y como tal hay que asumirlo. Lo mismo opinan los profesionales del sector sanitario de las series de médicos, pero imagino que la única manera de enganchar «al vulgo» a la pantalla son los lios de entrepierna y similares.
    En un país en que no se hacen folletines castrenses, ya les digo que una serie como «Los Nuestros» será positiva para la imagen de las FFAA y hará que aumenten las vocaciones para ser soldado.
    Desde luego que podrían haberla hecho mejor, no obstante esta gente del cine es como es.
    Saludos cordiales.

    Me gusta

  13. Recordando las antiguas ordenanzas Militares y también aquello que reza en el Art. 5º del Cabo y que dice así: » El Cabo como jefe mas inmediato del soldado, se hará querer y respetar de él, no disimulará jamas las faltas de soburdinación, será firma en el mando, graciable en lo que pueda, castigará sin cólera y será comedido en sus palabras aún cuando reprenda». Para que se den todas estas situaciones que enumera el artículo, el que tiene mando debe de saber ejercerlo por esa razón no puedo estar de acuerdo con la serie y mucho menos con el asesor, ingrese en el Ejército a los dieciséis años, he permanecido en el mismo hasta la edad de retiro, es decir cuarenta y nueve años día a día, y puedo presumir de haber tenido a lo largo de mi vida militar mandos que han sabido hacerse acreedores al respeto y cariño de sus subordinados, era otra época.

    Me gusta

Deja un comentario