Un gobierno de fraudes, basado en las mentiras de un embustero compulsivo; en unas tramposas promesas de su campaña electoral que luego, una a una, ha ido incumpliendo y desmontando: un gobierno de España formado por los que la quieren rota y humillada.
Para defenderse del capitalismo, los democráticos comunistas dividieron Berlín con campos de minas, fosos, muros y alambre de espino: ¡lástima que en aquellas alambradas sólo veíamos morir a berlineses que querían huir, hartos de gozar de su paraíso!
Hoy, este gobierno social- comunista- separatista no tendrá necesidad de blindar a España para defenderla de sus enemigos exteriores para impedir su desaparición. Será como la rana en el agua caliente, poco a poco. Con la cierta amenaza -¡disparad sobre nosotros, tenemos al enemigo dentro!- en el interior; con un poder legislativo que, visto se ha, cuyas leyes irán en su contra, con un judicial, visto se ha, en manos del ejecutivo, y con un ejecutivo, visto se ha, que tan a gusto se encuentra entre federalismos y asimetrías cuando no entre separatistas y terroristas no será difícil adivinar el futuro de la Nación más antigua de Europa, “patria común e indivisible de todos los españoles”, en la ya, por unos y por otros, olvidada y tantas veces denostada frase constitucional.
La gritaban los temidos almogávares, catalanes, antes de entrar en combate haciendo chocar violenta y acompasadamente sus armas contra la defensa central metálica de su escudo, el “umbo” en el romano, para intimidar al enemigo. Y uno que ha portado emblemas que lucían, y lucen, la imperativa consigna, obligado se ve a traerla hoy, siquiera sea como frase retórica o licencia poética en el estrambote, ese “conjunto de versos que por gracejo o bizarría suele añadirse al fin de una composición poética, especialmente del soneto”; definición que recojo del texto en cuyo lomo leo Diccionario de la Lengua Española, Real Academia Española, vigésimo segunda edición, 2001.
Y veo en la televisión como lloran Iglesias y Echenique: ellos ya lo han hecho; a partir de ahora nos tocará a nosotros.
De la prensa de enero de 2019
Sánchez investido con los apoyos de comunistas, separatista y bilduetarras.
NADIE
(Soneto con estrambote)
¡¡¡ Gobierno de ultraizquierda!!!: Socialistas
que dárnoslas pretenden, ¡ay! con queso,
los que ofrecen, les urge, grande el peso
a sus socios del alma, comunistas.
Con apoyos, ¡qué asco!, terroristas,
y al golpismo rendido y genuflexo;
gobierno al que ellos llaman de progreso:
¿Qué, cosas nos hará, ver nunca vistas?
Pues al punto, pasota y macerada
con mantras del “correcto” pensamiento,
sumisa, llevarán al sumidero
por donde, a los Poderes entregada,
la harán, rota, pasar ante el contento
de un hortera traidor, ruin y embustero.
España aceptará su propio entierro
-el momento llegó, ¡fuera caretas!-
en repúblicas mil, republiquetas…
Y nadie gritará, ¡desperta ferro!
Don Eufemio, ene. 20
(Continuará, D. m.)
General Dávila 
Cierto, por desgracia para España, todo lo que dices en prosa y en verso. Pero es así y hay que hacerle frente..Que el 2.020 nos dé alguna alegría.🇪🇸🇪🇸🇪🇸
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¿Que le puedo decir, D. Eufemio, que usted no sepa ya?
Fui a Madrid casi exclusivamente para participar en una manifestación en contra de éste gobierno, que no ha tenido casi ni una simple reseña en los «medios», así que es inútil gritar sea lo que sea.
Y no se si será verdad -me ha llegado la noticia en mensaje de teléfono-, pero si fuera cierto, la televisión ¿española?, el canal 2 y el canal 24 horas se queda en manos de podemos, que es lo que siempre quiso y siempre hacen las dictaduras como primera medida, controlar la propaganda, incluído Franco que de tonto no tenía un pelo y sabía que es por ahí por dónde hay que empezar.
No se si en la época esa medida estaría justificada, en mi opinión manipular al pueblo a través de los medios de comunicación siempre me ha parecido deleznable, pero ahora me parece todavía más grave porque vivimos en la era de la comunicación y si no tenemos opción a una información veraz estamos abocados a no saber nunca nada, ni lo malo ni lo bueno. Sólo lo que interese a unos pocos que ya sabemos por qué intereses se mueven, no precisamente por el interés de los ciudadanos españoles.
Pero repito, no voy a llorar. Como dice Ussía en su comentario de hoy, no podremos evitar que se nos cuele una lágrima en ciertas ocasiones, pero sollozar y en público es no sólo vergonzoso, es que además es cursi y ridículo, como los elementos que se han permitido hacerlo nada menos que en el Congreso de los diputados y ante las cámaras de todas las televisiones, incluidas las que no controlan que ni siquiera se si queda alguna.
Saludos
Margarita Alvarez-Ossorio
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Bufones casi graciosos serían, si no salieran tan caros. En Grecia los conocen, pero de Grecia ya no nos acordamos. .
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Bueno, mi Coronel, nadie absolutamente, no, si me permite. Porque V.I. acaba de gritar. Y un servidor, y seguro que rodo el que le lea, suscribirá y repetirá el grito.
¡¡¡Viva España!!!
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Me gustaria ver, Sra Alvarez-Ossorio, cómo gobernaría una Nación recien salida de una guerra civil, con la experiencia anterior de los partidos políticos y con una España dividida en dos. No puede comparar la «dictadura» que pretende el Sr Iglesias y la que llama Vd. «dictadura» de Franco, y mucho menos en sus comienzos. Espero y deseo que no lo tenga que comprobar Vd misma con este gobierno que va a dirigir España.
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La derecha en este país no sabe perder. Siempre poniendo zancadillas cuando no gobiernan. Mal pese, se debe aceptar el resultado. Ponerse la venda antes de la herida no favorece en nada. Debería dar vergüenza la actitud de la bancada de la derecha al insultar a quién no piensa cómo ellos.
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Tiene usted razón. Los «otros» son de una educación exquisita siempre razonando y recordando que nunca atentaron contra nada ni nadie. Un cordial saludo. ¡Qué cosas!
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Con la autorización y benevolencia de V.E., mi General.
Y pidiendo perdón por adelantado por intervenir de nuevo en este mismo debate, quisiera puntualizar sobre lo que expresa en su comentario más arriba el Señor J. Miguel, que en España «no sabe perder» nadie. Un servidor diría que mucho menos, pues archidesmostrado está, y el ejemplo más reciente lo tenemos en lo del 11M de 2.004, la mal llamada izquierda. Y digo mal llamada, por no utilizar otro adjetivo más apropiado, por no imitarlos o copiarles alguno del repertorio de ellos para referirse a quienes no son de su cuerda.
Un servidor siente muy parecida o igual «simpatía» por derechas o izquierdas. Un servidor es apolítico por herencia genética y por formación y convicción. Su única pasión es España, y la Patria como concepto que engloba y reúne, sin excepción a todos los centímetros cuadrados del territorio, y a todos los españoles como hermanos.
Por otra parte, de aquí para atrás, la izquierda utilizaba un discurso en el que todas sus afirmaciones y propaganda constituían todo un tratado sobre el arte, o la desvergüenza, de mentir, insultar y manipular. Pero a estos de ahora, Pedro y Pablo, y sus muchachos, si algo hay que reconocerles es que, su desvergüenza y cinismo (¿o quizás su seguridad de habernos hipnotizado, o más lamentablemente, por conocer y haber constatado el índice general medio de cobardía?), nos están hablando muy claro sin el menor pudor, desde el principio de su aparición en escena.
¿Zancadillas…?. Por Dios. ¿Hemos olvidado lo del Prestige y el chapapote, lo de Irak y tantas otras maniobras?. Por favor, que Zapatero y Rubalcaba, mientras gobernaba el PP, se pasaron todos esos años en «campaña electoral» organizando y encabezando algaradas por toda España; y cuando las municipales aquellas de Mayo del 2.003, que sabían perdidas, apareció, ¡qué casualidad!, en escena, como por generación espontánea, el también mal llamado «movimiento» del 15M, o acampada en la Puerta del Sol de lo que hoy ya no sé si se llama Unidos o Unidas Podemos.
¿Aceptar qué resultado, el conseguido a cambio de comerciar con los peores enemigos de la Patria su reparto por parcelas, con asesinos convictos y confesos de ETA, haciendo escarnio y desprecio a la sangre de tantas víctimas, unas mil, la unidad sagrada de España, su soberanía y el orden constitucional vigente y aprobado por mayoría más que absoluta en referéndum?.
Un servidor apuntaría otra «gran virtud» de los españoles: Nuestra proverbial ingenuidad, credibilidad y buena fe. Y así, cuando llega el primer charlatán de tres al cuarto, que no engañaría ni a un grupo de párvulos con su verborrea barata basada en la mentira repetida mil veces, a todos los adultos, es un decir, nos encandila y le seguimos, como primero los niños y después las ratas, del cuento del Flautista de Hamelin.
Perdón por la extensión. Mi capacidad de síntesis ha sufrido deterioro con la edad.
¡¡¡Viva España!!!
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Abundando en lo escrito por el coordinador, resulta cuanto menos chocante, D. J. Miquel que hable usted de zancadillas hoy, cuando disfrutamos de un presidente del Gobierno que con los mismos y muy recomendables apoyos conocidos y usando una tal -zancadilla- se alzó por primera vez a la presidencia para «salvar a España de la corrupción» (¿¿¿???) recurriendo a una sentencia que, según tengo escrito en este blog, y cierto es, «no decía lo que él decía que decía».
Y de vendas no me hable: ¿Cuántas de las miles víctimas de ETA, uno de sus socios anuentes, las tuvieron que usar?: Todas: a cerca de mil les valió de poco; simplemente, murieron.
¿Vergüenza? ¿A quién le falta?
¿Insultos? Dígame una expresión que no refleje la triste realidad.
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D. Félix Torres, nunca se me pasaría por la cabeza ponerme al lado de los terroristas y cómplices. Los insultos que hago referencia, es cuando se banaliza la palabra nazi para referirse a los catalanes. A veces alguien se debería preguntar, la causa efecto del auge del separatismo en Cataluña. ¿Quién ha hecho más para este auge, el separatista o el separador? Intoxicar todo el día diciendo que en las escuelas se adoctrina, que se persigue el castellano, entre otras lindezas. Pues mire, orgulloso estoy que mi segundo apellido sea Martínez, que mis antepasados vinieran de Murcia y Almería, y jamás, se me ocurriría escupir y hablar mal de la tierra de mis antepasados.
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No sabe lo que me alegra leer su última frase, D. J. Miquel. No es de buenas personas renegar de la propia cuna, y en usted ya veo que lo es, buena persona, al decir que «jamás, se me ocurriría escupir y hablar mal de la tierra de mis antepasados», eso le honra.
Uno,que es de un pueblecito, el último de la Sierra de Córdoba no deja un día de cantar sus excelencias; buena muestra la tiene en la foto de más arriba y en tantas referencias que si es fiel al blog, lo que desearía, ya irá contrastando.
Pero, !ay, amigo!; «hasta aquí puedo leer», que decía Dª Mayra.
Deduzco por lo que cuenta que procede de familia emigrante: conozco perfectamente el fenómeno; la mitad de mi pueblo está en Vitoria y la otra mitad en Hospitalet. Para Agosto nos reunimos todos en la Fiesta del Emigrante y honramos a las reliquias de Santa Eufemia, nombre de nuestra Patrona y de nuestro pueblo: de ahí viene el seudónimo con el que escribo.
Pero igual que le digo esto añadiría que me preocupa la otra parte de su argumentación, porque como le digo conozco tales circunstancias.
Todo eso de separatista-separador, intoxicación, «falso adoctrinamiento», persecución del castellano, aunque usted no lo crea no necesita mayor demostración: todo es claro como el agua clara. Quítele a «esas lindezas» su «falso» adoctrinamiento, la normal, o agradecida, tendencia humana de parecerse al malo del famoso síndrome, los millones de euros invertidos
en la causa, la estigmatización del no nacionalista, esa tele que disfrutan y que, créame, veo de vez en cuando…y tal vez la cosa le sería más fácil de captar en toda su extensión.
Y no, no se banaliza la insidiosa palabra: El, aún, presidente Torra tiene escrito que el español usa el lenguaje de las bestias salvajes y que tiene una anomalía en el ADN. ¿Le suena esto a nazismo?
«El hombre andaluz no es un hombre coherente, es un hombre anárquico. Es un hombre destruido […], es generalmente un hombre poco hecho, un hombre que hace cientos de años que pasa hambre y que vive en un estado de ignorancia y de miseria cultural, mental y espiritual. Es un hombre desarraigado, incapaz de tener un sentido un poco amplio de comunidad. A menudo da pruebas de una excelente madera humana, pero de entrada constituye la muestra de menor valor social y espiritual de España. Ya lo he dicho antes: es un hombre destruido y anárquico. Si por la fuerza del número llegase a dominar, sin haber superado su propia perplejidad, destruiría Cataluña. Introduciría en ella su mentalidad anárquica y pobrísima, es decir su falta de mentalidad.»
¿Le suena esto a nazismo, sr. Miquel?: Lo escribió el sr. Pujol, paradigma de honradez y prohombre catalán.
Claro está, pues, que desde la bancada derecha no se insulta, se describe.
Y reconociendo, lo cual es de entender, que quizás me pasara, allá por 2016, y en mi trabajo «El proceso -2006-202..» sobre el desarrollo de los acontecimientos en Cataluña, compuse un soneto a tan eximio personaje; creo que después de juzgarme de la manera en que lo hizo, aún me quedé corto.
RACISMO
(Soneto)
Un enano, bribón, calvo y tripudo,
un jeta acomplejado y adiposo,
obsoleto, gagá, trincón, baboso,
tartaja, correlindes y ojerudo.
Pedigüeño, un gorrón morrocotudo,
de la doblez, un falso virtuoso,
de mil asuntos turbios sospechoso;
un, si no cabezón, sí cabezudo.
Si así calificarme se permite,
ya veis que en mis cuartetos lo describo;
y pues racista saliera el señorito,
no creyendo pasarme ni un ardite,
a fuer, le añadiría, de objetivo:
¡sólo añora un mechón y un bigotito!
Félix, jun 16.
“un andaluz desarraigado, destruído y anárquico,
en estado de ignorancia y de miseria cultural, mental y espiritual”.
En fin, D. J. Miquel, encantado de contrastar pareceres con usted; y le reitero si me permite, lea este blog. No le vendrá mal.
Y mis disculpas al coordinador por la extensión de la respuesta.
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Pues si Dña. Fuensanta Herce, lo siento mucho, pero aunque soy la primera en preguntarme si aquella dictadura fué necesaria, sigo pensando que eso es lo fue, y que el método de controlar los medios de comunicación para inculcar ideas, sea quién sea el que lo haga, es un mal método. sobre todo porque pienso que entonces no era necesario.
Y si hay algo que admiro en éste blog es que aunque todos estemos en el mismo bando, o al menos eso creo, se puede discrepar incluso de los métodos que usó el General Franco sin que nadie se ofenda, porque no están dichos con ánimos de ofender, y creía que eso era obvio.
Por lo visto no lo era.
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«El separatista o el separador»
Esa equidistancia es intolerable
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Yo no me ofendo, Dña Margarita, solo expreso mi opinión ante la suya. A estas alturas de la vida estoy muy acostumbrada a disentir, es más, creo que es muy bueno, y más en un foro tan numeroso
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