Victor Barrio, 29 años. Matador de toros, Maestro, Torero. Un hombre bueno entregado a su pasión: el toro.
Escribo sin contarles lo que a mi lado escuché una de estas mañanas. No necesita más explicación. Audiencia tampoco. Condena, toda. Es la náusea que provocan los cobardes; los que desean la tragedia como muro donde agazapar su cobardía. El que desea la muerte de otro está ya muerto. Siento no haber tenido cerca al del comentario antitorero, inhumano. Sea así mejor que no hay fuerza que venza a la sinrazón. Del que no sabe lo que dice pero sabe muy bien lo que hace. ¡Cobarde!
‹‹Vuelvo a los toros por ti,
yo, Rafael.
Por ti, al ruedo
¡Ay con más años que miedo¡››
Alberti, Lorca, Bergamín… cantaron a los que bailan al filo de la muerte. A los valientes. Copla o cuplé, cante y canto, el pasodoble a cuyo compás se olvida la tragedia, pero se la espera. Hay que vestirse de luz, así se visten los valientes, de luces y requiebros, al toro, como a la misma vida siempre entretejida con la muerte. Sin culpa ni reproches. La suerte, un lance, de honor, siempre el honor en el ruedo, liturgia de valientes, toreros.
Parar, templar y mandar. Es el riesgo de envolverse toro y torero, imponerse, dominar ¡suerte!, y después del lance la gloria, tan honda que llega a ser eterna. Como la muerte. A la espera, al acecho, al encuentro. Solo con el engaño. Un trozo de tela, un paño encarnado para burlarla. Hay que ser valiente para torear a la muerte.
¡Torero! ¡Ay de España los toreros!
Decía Ignacio Sánchez Mejías que el mundo entero es una enorme plaza de toros donde el que no torea, embiste. Esto es todo.
Honor, valor, dolor… mucho dolor en el ruedo donde hoy vuelvo, por ti Victor Barrio, Matador de toros, Maestro, ¡torero!
Quisiera sentirme torero, sentir lo que tú has sentido, vivir lo que tú has vivido. Merece la pena, aunque se te haya ido en ello la vida. Cuando lo das todo y llega el lance eterno no hay quite que lo evite.
Victor Barrio ¡Ay mi torero! Vuelvo a los toros por ti. ¡Ay!, con más años que miedo.
Son clarines de la aurora…
General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez


Como siempre Mi General, su pluma es una espada afilada contra los cobardes, y las ratas que desconocen esa palabra mágica, de valor, hombría de bien, entereza y bravura.
Yo también vuelvo a los toros.¡¡¡AY MI TORERO!!!!
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Y yo. A dónde vaya mi General….
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España profunda, de la ignorancia y el desconocimiento, del odio y la revancha, de la maldad y el daño, de la falta de solidaridad y el egoísmo, de la carencia de valores.
Qué pena!!
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Un fuerte abrazo Ramón. General Dávila
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Gracias Juan y un fuerte abrazo.
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Estos individuos, solo merecen una palabra, ¡COBARDES!.
Si en esta Nación hubiera justicia, alguien que soltara estas barbaridades debería estar encerrado de por vida.
Yo también hoy vuelvo a los toros con Vuecencia, Mi General.
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MI GENERAL,
Siempre distinguí entre el ejército y el Tercio. Siempre distinguí entre algunos que cuentan los trienios y la poesía de aquellos que abrazan la muerte como grado máximo de unión del alma humana a lo sagrado durante la existencia terrenal.
Con la Ley 17/89 de la función militar se puso fin a la Escala Legionaria, pero aún siento como la tauromaquia continua de algún modo aquella Escala.
Siento la muerte del Caballero D. Víctor Barrio como la de un hermano, que nunca pensó en su salvación por interés, que se entregó por entero hasta el sacrificio, y que sólo su espíritu ahora le engrandece.
A LA ORDEN DE VUECENCIA,
Francisco De Javier
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Mi General. Un placer y un honor, haber servido a sus ordenes.
Comparto su opinión y su afición taurina.
D.E.P. Victor Barrios.
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Reblogueó esto en El Heraldo Montañés.
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Mi general. Alguno de estos » valientes «, que emplean su valor para insultar desde lejos, ya se ha «rajado» ( como era de esperar) en cuanto le ha visto las orejas al lobo. Ahora, cuando ha visto lo que se le ha venido encima dice, que él no han escrito esos comentarios, que se los han «jaqueado». Era de esperar.
A la orden de Vuecencia, mi general.
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Mi general. Alguno de estos «valientes» que emplean su valor en insultar desde lejos, ya se ha «rajado» ( como era de esperar ). Ahora dice que él no ha escrito esos comentarios, que han sido los hakers que han entrado en su web.Era de esperar.
A la orden de Vuecencia, mi general.
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