Desde su atalaya cordobesa: LAS COSAS DE DON EUFEMIO
Que le pregunten a mi buen amigo JBS, o a Alfonso el editor, la de veces que han tenido que repasar una pequeña obra, escrita y ya repasada por éste que lo es, antes de entrar “en máquinas”.
A la vista incontestable de las pruebas, con L. Herrero digo, caña y pincho de tortilla a que, no ya repasado, sino que ni se ha leído el famoso libro ni su propia tesis doctoral.¡Vamos!, ni él, ni nadie.
Sánchez plagió dos veces en la misma página de su libro una respuesta parlamentaria del Gobierno
El presidente del Gobierno copió y pegó, sin cita alguna ni comillas, una respuesta del Gobierno de Zapatero a una pregunta de una diputada del PP publicada en el Boletín Oficial del Congreso del 14 de octubre de 2010. Lo hizo por duplicado y en la misma página de su libro.
EL LIBRO
(Soneto)
Si en hablar de la tesis ya hay motivos,
del libro mil más hay, que en comandita
sacó de la chistera la erudita
pareja que, al final, un par de vivos.
De ambos ya, se sabe, que masivos
fueron los “copieteos”, infinita
quedó su caradura, ni una cita:
¿Comillas, para qué?, ¡jo!, los creativos.
Porque Sánchez, Don Pedro, y su colega,
fusilan sin rubor lo “fusilable”
en amaño tramposo y descarado;
y la capacidad de asombro llega
aquí a sobrepasar lo imaginable,
pues copian, por copiar, ¡por duplicado!
Don Eufemio, 25 sep. 18
(Continuará, Dm.)
Blog: generaldavila.com

Es que, en la confianza de que las tesis doctorales, proyectos de fin de carrera y demás trabajos de relleno no los lee ni el que los tiene que calificar, y se conforma, si acaso, con un abrir y cerrar el tocho, pues se cometen estas estafas. Y si para colmo, como es el caso de los políticos, que jamás van a ejercer una profesión, se hacen para cubrir el expediente, pues para qué decir.
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A este «doctorando presidente», que padecemos, ya me lo imagino cuando vaya a dar explicaciones al Congreso, si es que va, que todo está por ver.
Hará algo parecido a lo que le contestó a D. Mariano, nuestro profesor de Física y Química en el instituto, mi compañero y amigo Francisco Boza, que al pillarlo durante un exámen, con el libro abierto en las piernas debajo del pupitre, lo trincó de la oreja para echarlo de la clase, y en el trayecto, no paraba de gripar, entre quejio y quejio: ¡D. Mariano, yo no estaba copiando, solo estaba repasando la lección!.
Paréceme a mi, que nuestro «doctor», no solo no repasó, es que ni tan siquiera al exámen se presentó.
Un saludo D. Eufemio
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Llamándose Eufemio es normal que surjan palabras brillantes que construyen magníficos sonetos.Enhorabuena
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