Es el mismo mensaje que otros años. Mientras no sea definitivo hay esperanza. Pero consolarse esperando, a ningún lugar seguro conduce. Mejor es actuar que pensar que alguien vendrá y lo solucionara. Una voluntad junto a otra acaba siendo la voluntad, la del pueblo español que debe confiar menos y actuar más en defensa de España, la unidad y la Ley.
Una ventaja tenemos: sabemos quién sí y quién no. Quien fundamenta sus decisiones en la indisoluble unidad de la nación española y quien quiere disolverla.
CONSTITUCIÓN
El poder sin límite no es poder sino Dictadura. Regula ese límite el acuerdo legal que los pueblos se dan al que llamamos Constitución. Ocurre que esa Ley es para todos y no es suficiente con respetar la letra, sino que hay algo mucho más importante: respetar el compromiso moral que encierra su articulado y que no es otro que la base de la Constitución, en lo que se fundamenta: la indisoluble unidad de la Nación española, patria común e indivisible de todos los españoles, y reconoce y garantiza el derecho a la autonomía de las nacionalidades y regiones que la integran y la solidaridad entre todas ellas. Es decir que no se basa, ni se compone ni se redacta de manera ajena a la unidad, o dicho de otra manera sin unidad no hay Constitución en España que dicho por segunda vez de otra manera es decir que no hay España, o por tercera vez: no hay nación española. Ni españoles, ni historia de España, ni cultura española, ni idioma español; no hay fronteras ni regiones, no hay nada más que traiciones y traidores, algo que no recoge texto legal que no sea el de los piratas.
Ante las diferentes interpretaciones que pueda tener una Constitución se marca un mal llamado Tribunal Constitucional que como hay mucha piratería todos quieren subirlo a su barco y que enarbole su insignia partidista y nosotros nos creamos su independencia y virtud, su compromiso con la Ley y la justicia.
Pues creo que debe ser lo contrario. Obras son amores. No me quieras tanto y quiéreme mejor.
En política todo debe estar basado en la desconfianza porque aquí es imposible fiarse de nadie. Nadie quiere a nadie y ni entre ellos se quieren. Cada cual interpreta y decide según su interés y beneficio. Es mejor sospechar y acusar que verse envuelto en el engaño.
Ser juez y parte forma parte del truco y no fiarse ni del compañero de pareja norma muy saludable para la libertad y por tanto para la democracia.
Constitución albada y muy manipulada en su interpretación. Razón por la que el asalto al Constitucional forma parte de la actividad más frenética de los partidos para asegurarse el poder omnímodo por encima de la Constitución.
LA UNIDAD DE ESPAÑA
Hay una historia común más antigua que La Constitución. Es la que nos ha llevado a construir esta bella y gran Nación llamada España. En su seno están nuestros tiempos, los orígenes, cada paso y sentimiento. No podemos despreciarla, inventarla o abandonarla. Significaría desaparecer del tiempo y el espacio. Es de todos y gracias a todos. Por eso es la ley que conforma nuestra convivencia y solidaridad: la indisoluble unidad de la nación española. Por eso su significado: Patria común e indivisible de todos los españoles. Es así y así debe seguir. Cueste lo que cueste, pese a quien pese.
Ahora ¡después de tantos años!, unos pocos, muy pocos, nos incitan al enfrentamiento que, aunque no se produzca, dejará abiertas heridas, casi incurables por ser entre hermanos, entre histórica y genéticamente iguales.
Está en grave riesgo la unidad de España. Crisis oculta bajo los pliegues de una rugosa y oscura forma de hacer política de mínimos y mantener el poder a toda costa y a costa de la debilidad de los españoles que, incomprensiblemente, aguantan todo, incluso lo jamás visto: que les hablen alto y con mentira. Que se les mienta. Que destruyan su unidad.
Llevamos años avisando. Cada paso hacia la ruptura lo hemos denunciado dando a la vez soluciones amparadas en la Constitución. Con respeto, pero con firmeza. Recordando nuestra misión, la de españoles, y el juramento ante nuestra Bandera. No por ser militares, que también, sino por ser españoles, como tantos, millones, que se han sumado a nuestra indignación y propuesta: Defender la unidad de España. Muchos hemos sentido la soledad y el vacío sin saber cómo actuar, donde hablar, gritar, manifestar, sentir el amparo y la esperanza de que esto no sucederá. Pero las heridas ya están abiertas ante la escandalosa pasividad de nuestras instituciones que han cedido la iniciativa a los independentistas y antisistemas. Ellos nunca han ocultado sus intenciones que han aireado con provocación y flagrante permisividad.
Ya no hay lugar para el diálogo. Inútil propuesta. Mentira. Una más. Para ellos no hay más recorrido que el que les lleve a la ruptura, a la suicida independencia.
Ante esta situación ¿qué hacer? ¿Confiar en las instituciones? Nadie se fía. La culpa es de ellos. Nadie nos convoca, nadie nos reclama, nadie nos conforta. Corta se queda la palabra cuando los hechos nos adelantan. Se va cumpliendo lo que ayer decíamos, pero peor es que se va a cumplir lo que decimos hoy. Cada vez el futuro está más cerca. Y no hay movimiento que nos tranquilice. Ni líder en quien confiar. España se rompe.
Día de la Constitución española junto al mensaje que recibo de un veterano; y lo transcribo
Soy soldado y juré ante la Bandera a mi patria defender hasta morir si necesario fuera.
Soy soldado y conozco la Ley y su mandato. Tradición junto al fervor patrio.
Soy soldado y como tal, joven o viejo, mantengo mi palabra donde incluso no pueda.
Soy soldado y cumplo con hechos el beso que de mis labios saliera.
«¡Desgraciado país aquel que hace odiosa la carrera de las armas, aquel que alquila los ejércitos en los días de peligro, aquel que los degrada nutriendo sus filas de hombres sin virtudes ni patriotismo, aquel que con su menosprecio mata el honor militar y ahoga las nobles ambiciones! Repasad la caída de todos los grandes Imperios y veréis que el primer síntoma de ella ha sido la desorganización moral de las tropas, el rompimiento del lazo que debe unir al ejército y al país, el desprecio o el odio del ciudadano al soldado» (Comandante Villamartín).
Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)
Blog: generaldavila.com
6 diciembre 2023
General Dávila 
Atentamente y con el debido respeto
ARRIBA ESPAÑA Y MUERAN LOS MALOS GOBIERNOS
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LLEVADO POR LOS DESVELOS
PRODUCIDOS POR LA IDIOSINCRASIA
QUE INTERPRETA LA DEMOCRACIA
A LA AMBICIÓN DE LOS PERROS
DEL SANCHISMO Y OTRAS FALACIAS.
SE LLEGA A LA CONCLUSIÓN
QUE HAY QUE HACERLO POR NOSOTROS:
SIN ESPERAR QUE LOS OTROS
PROSTITUYAN LA CONSTITUCIÓN
NI SE MAMEN LOS CALOSTROS.
DE LAS VACAS QUE ENSEMINARON
Y A PUNTO ESTÁN DE NACER
LOS ENGENDROS DE ESTE DESDÉN
DE LOS QUE A ÉL SE PRESTARON
DESDE EL MISMISIMO PODER.
EMPEZANDO POR EL LEGISLATIVO,
EL EJECUTIVO Y EL JUDICIAL
QUE EN MANOS DE LO CRIMINAL
SE MUESTRAN TAN DESPECTIVOS
CONTRA ESPAÑA Y SU UNIDAD.
HAY QUE DARSE MUCHA PRISA
Y SIN ANDARSE CON ROREOS
HAY QUE ARRANCARLES EL CACHONDEO,
LAS SÁRCASTICAS E HIPÓCRITAS SONRISAS
QUE ESGRIMENLOS FARISEOS.
ESPAÑA DÍA 6 DE DICIEMBRE DE 2.023
Ramón Lencero Nieto.
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Mi respetado y muy querido GENERAL,
EXCELENTE EXPOSICIÓN EN EL DIA SEÑALADO. VILLAMARTIN ES LA GUINDAPATRIA QUE CORONA LA MAGNITUD DE TAN BELLO ARTÍCULO.
Por imitar al GRAN GRACIÁN: «QUALES IN REPUBLICAPRINCPES ESSENT, TALES RELIQUOS SOLERE ESSE CIVES» (Tal como son los Jefes en el Estado, así son los demás ciudadanos) / Epistulae ad familiares, 1,19,/CICERÓN)
ENHORABUENA Y GRACIAS, MI GENERAL.
A la orden de V.E.
VIVA EL REY
VIVAN LOS EJERCITOS Y LA ARMADA ESPAÑOLA
VIVA Y ARRIBA ESPAÑA
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Buenos días, mi General y todos. Yo también sigo sintiendome obligado por mi juramento a la Bandera.
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¡¡Viva la Constitución Española y el espíritu de concordia con el que nació…!!
(De 45 años de edad, tan joven, ya lleva 5 años sufriendo empujones y golpes, atrapada entre las sucias uñas de pérfidos enemigos, cuya evidente intención es matarla de la manera más cruel y oprobiosa…¡no lo lograrán!).
¡¡Viva el Poder Judicial, Vivan las FFAA…Viva el Rey…VIVA ESPAÑA!!!
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Quien fuera embajador en Canadá y en la Urss, José Cuenca, nos da la clave para vencer, en su libro «Cataluña y Quebec:las mentiras del separatismo» ed. Renacimiento, 2022.
La clave en Canadá fue la actitud batalladora de su Gobierno federal en defensa de la unidad nacional. Justo lo contrario de que ocurre en España.
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A las órdenes de V. E., mi General.
Un servidor desorientado buscando «algo» en la Ley, que sirva y se pueda utilizar como como medio legal para proteger la unidad de la Patria y el orden constitucional, con todos los medios necesarios, incluido el de la fuerza manu militari, y resulta que ese mecanismo está expresado en el mismo fundamento de la Constitución.
¿Pero si ésta está siendo sistemática y descaradamente vulnerada y agredida desde los poderes ejecutivo y legislativo, qué otro poder del Estado tiene la responsabilidad de iniciar y conducir el proceso para que sea cumplida y deshabilitar y castigar a los culpables de no cumplirla ni hacerla cumplir?. ¿Qué otra Autoridad tendría la potestad para ordenar la puesta en marcha del mecanismo corrector antes de que no haya vuelta atrás y caigamos en manos de un aprendiz de dictador?.
¿El Poder Judicial?. Se supone que debería ser absolutamente independiente y apolítico, pero por desgracia está casi secuestrado y dominado por los otros dos, principalmente por el Ejecutivo, y así se atreve a desafiar a toda la nación, el pueblo soberano, con imposiciones anticonstitucionales e ilegales impunemente, y proceder por la vía de hechos consumados. Porque el Ejecutivo ha neutralizado al legislativo y pretende secuestrar a todo el Judicial.
Si esto no se resuelve antes de que sigan adelante con sus proyectos de romper España, ya sólo nos quedaría aplicar, a falta de otro poder o autoridad, por aclamación del pueblo soberano, el artículo de la Constitución que especifica quien garantiza la unidad indivisible y el orden constitucional de España.
¡¡¡Viva España!!!
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Está claro que cuando se escribió la actual Constitución no se consideraban como riesgos algunos de los problemas que hoy nos amenazan gravemente. Los separatismos eran cosas de minorías aldeanas acaudilladas por algún iluminado y no suponían un riesgo efectivo para la unidad de España. Hasta que se les privilegió con ventajas que no disfrutaban otras regiones y creyeron que separándose de la pobretona España iban a vivir tan bien como habían conseguido esquilmando a los demás españoles.
Hasta que llego la cutreizquierda de Zapatero y empezaron a montar su cortijo, creando de la nada un reino inexistente, manipulando la Historia y nacionalizando como catalanes a personajes de relevancia, como Colón, o poniendo trabas a todo lo español.
Después llegó Sánchez el Dictador, comprando el sillón de presidente del Gobierno y dando a los enemigos declarados de España cuanto exijan a cambio de unos pocos votos. Y lo que es peor, toreando la Constitución, aquella que no previó el problema
En resumen, la Constitución requiere modificaciones urgentes a la vista de todo lo que se puede retorcer para hacerla ineficaz, empezando por el tema separatista. Son muchos los países que tienen disposiciones en sus constituciones que prohíben los partidos independentistas.
Por ejemplo Alemania: La constitución alemana prohíbe los partidos que buscan socavar la existencia de la República Federal de Alemania. Esto incluiría a los partidos independentistas que buscan la secesión de una región.
En España todos sabemos, si la Constitución lo permitiera, cuales partidos no deberían haberse legalizado porque se fundamentan en raíces independentistas o comunistas, una ideología también prohibida e ilegal en la mayor parte de Europa.
La Constitución española establece en su artículo 6 que la «indisoluble unidad de la nación española» es uno de los principios fundamentales del ordenamiento jurídico. Esto ha sido interpretado como una prohibición implícita de los partidos independentistas pero no es eficaz y se requiere de mayor contundencia y blindaje.
Y lo lamento, pero no puede obviarse una mención a los responsables de garantizar esa integridad nacional. Hay que buscar la fórmula para que las FF.AA. puedan cumplir su mandato sin tener que esperar hechos consumados. Es como si un ejército responsable de la integridad de una ciudad no pudiera intervenir hasta que fuera bombardeada, en lugar de hacerlo para impedir que se carguen los cañones.
Una incongruencia total que ha de tener solución dentro de los límites legales y sin que ello signifique el Ejército se implique en política, sino como una “fuerza de interposición” que vigile el cumplimiento de cuanto le ha sido asignado e impida daños cuya evitación es su responsabilidad.
Vuelta la burra al trigo. Ya lo sé. Pido disculpas. Hay más, pero ya me extendido bastante.- Saludos.
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Está ustde muy equivocado y no será por la de veces que lo hemos explicado. Saludos
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Con el debido respeto tengo que volver sobra la cuestión porque parezco el tonto de la reunión. Ni tantas veces ni se afronta el nudo de la cuestión a que me refiero, que no es otro que las disposiciones y herramientas legales que deberían tener las FFAA para cumplir su misión ANTES de que se produzca el daño, sin esperar a los HECHOS CONSUMADOS.
En un par de ocasiones lo que se ha explicado es que las FFAA están subordinadas al poder civil y que así es la democracia. Además, se aclara que la única opción es la que permite no obedecer órdenes contra la Ley como puede ser la aceptación de la ruptura de la Unidad Nacional y más. Y ya está.
Se me dice que no trate de politizar a las FFAA y nada más lejos de mi intención porque una de las premisas es que son las FFAA de todos los españoles y por ello han de ser neutrales y no entrar en bandos políticos.
Sin embargo, en realidad la política contamina a las FF.AA. y en ellas manda la política:
• No mueven un dedo si no es por decisión de los políticos.
• Están subordinadas al poder político, incluyendo su jefe supremo, el Rey.
• Sus actuaciones obedecen a los intereses del Gobierno
• El ministro/a/e de turno es un político que imprime su carácter al colectivo
• La cúpula militar no está exenta de influencias políticas. El Gral Mena y su represalia política y en el otro extremo el Gral José Julio Rodriguez, el podemita. Entremedias, diversos personajes uniformados arrimados al poder.
Pero mi sermón en el desierto, sobre el que parece que estoy tan equivocado, no se refiere a lo que tanto se aclara sino a lo que no se aclara. A las atribuciones que debería tener el Ejército para impedir que se formalizase un golpe de Estado sin tener que esperar a una declaración de independencia y hechos consumados. Por supuesto me refiero a medios legales y lícitos, nada de algaradas armadas ni que sea el Ejército quien saque las castañas del fuego a los civiles, sino que pueda cumplir con su obligación y sean dotados de medios para ello.
Se me dice también que no sé lo que digo cuando hablo del Ejército llamando al orden, pero es que quizás me dejé llevar por cierto manifiesto de militares retirados donde se reclama al Ejército que destituya al presidente del Gobierno y convoque nuevas elecciones.
No volveré a hablar del tema, pero no dejaré de abogar por una reforma de la Constitución que impida el proceso independentista que estamos viendo y para eso lo único que necesitan las FFAA son atribuciones que lo hagan posible antes de que sea tarde. No tiene otro sentido cuanto llevo escrito sobre el particular.
Ahora cada uno que lo entienda como quiera. Y, por cierto, creo que somos millones de españoles los que estamos así de equivocados.
Con mi mayor consideración. Saludos.
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¿Es posible que la pretensión de esta actual gobierno es la de que España pase de ser un Estado cuya forma política actual es la de una monarquía parlamentaria, a una República federal?
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