Pocos acontecimientos, pocas fechas concitan tanto fervor popular y tanta unanimidad como el levantamiento popular en la capital del reino, el día 2 de mayo de 1808. Una explosión de ira contenida y desesperada ante el intento gabacho de secuestrar nuestra independencia y soberanía nacional. En el año 1983, esta significativa fecha fue elegida como Día de la Comunidad de Madrid.
Sin embargo, este año no ha habido tal consenso en las celebraciones en Madrid. El partido morado y sus comparsas, se han desentendido de los actos institucionales organizados por la Comunidad de Madrid y lo han organizado por su cuenta. Pero entre unos y otros, ajenos a todo ruido ha habido otra celebración de la que los lectores habituales de este blog no tendrán conocimiento. Por eso la reseñamos como “noticia del día”
Me refiero a la que ha organizado la Asociación de Reservistas Voluntarios de España (ARES). También el Dos de Mayo, constituye el Día del Reservista desde que el año 2015 fue declarado por el Ministerio de Defensa, poniendo así de manifiesto a los reservistas voluntarios como un nexo de unión entre las Fuerzas Armadas y la sociedad de la que se nutren y a quien sirven.
Con unas fuerzas armadas profesionales, de tamaño más que modesto para la situación estratégica de España, su población y nuestras aspiraciones como nación, tras la suspensión del servicio militar obligatorio, una reserva voluntaria, bien organizada, instruida y articulada, bien pudiera ser un elemento potenciador de nuestras capacidades militares a un coste más que razonable. Una Reserva Voluntaria que represente mucho más que el anhelo de muchos españoles de ejercer su derecho y deber participar más activamente en las tareas de la defensa de España, como recoge la Constitución, sino la aportación de unos efectivos suplementarios, instruidos y motivados para completar las capacidades de las FAS.
Se comprende de esta manera la vinculación de los Reservistas voluntarios y de la asociación mayoritaria que los representa, con los hechos y personas que protagonizaron el levantamiento del 2 de mayo de 1808 y su deseo de rendirles homenaje como acto central en el Cementerio de la Florida, en el madrileño Parque del Oeste, justo donde en la madrugada del día siguiente, fueron masacrados sin juicio previo 43 patriotas, cuyos cuerpos se sepultaron en una fosa común. Años después se construyó un modesto cementerio que hoy en día se mantiene fundamentalmente gracias a las aportaciones de la Sociedad Filantrópica de Milicianos Nacionales Veteranos, donde se conservan dignamente sus restos.
Hoy he tenido el privilegio de acompañar a los reservistas voluntarios agrupados en torno a ARES, para rendir homenaje a aquellos “mártires de la lealtad” haciendo míos los versos de Bernardo López García:
“…en la tumba descansad
que el valiente pueblo Ibero
jura con rostro altanero
que hasta que España sucumba
no pisará vuestra tumba
la planta de un extranjero.”
Gracias, reservistas voluntarios por vuestro ejemplo de compromiso, generosidad y disponibilidad.
Adolfo Coloma
GB (R.) del ET
Blog: generaldavila.com
3 mayo 2017
