Blog generaldavila.com
4 junio 2018
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Un hecho de armas más por el que sentirnos orgullosos de ser españoles.
Doblemente orgullosos. Por la victoria, lograda con valor y constancia. Y también por la caballerosidad con el vencido.
Cuando los generales alemanes, vencidos en la GM II, fueron ahorcados por los aliados en Nurhember, el diario ABC ilustró su portada con una doble foto, en la que sin texto, aparecía bajo una reproducción del «cuadro de las lanzas», una foto del inicuo ahorcamientos de los vencidos.
Que tenían lugar, es preciso recordarlo, -divulgarlo, sea dicho con mayor propiedad- el día del «Purim»….. ¿casualidad?
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A las órdenes de V.E., mi General.
Bonito y oportuno recuerdo en los tiempos que corren. De los tres países del Benelux, el único que conserva y mantiene como un tesoro muy preciado los vestigios de España es el Gran Ducado de Luxemburgo.
Hechas por los españoles, son una obra asombrosa de ingeniería militar las famosas «casamatas», un laberinto de túneles, pasadizos y estancias perforadas en la roca como si se tratara de un pequeño Gibraltar. Algunas calles con nombres de militares españoles de la época, y sobre todo, la Calle de Felipe II, en la que está la Embajada de España.
El contraste es sorprendente, pues mientras aquí nos empeñamos en cambiar nombres de calles y demoler cruces y monumentos a falta de imaginación para hacer algo mínimamente útil, allí están orgullosos de sus orígenes y de su historia. Ciertamente no es lo mismo en Bélgica y Holanda, donde también el odio heredado puede con la razón y la cultura.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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General Coloma: el artículo que escribí ayer incide, aunque no con tanta claridad, en lo mismo: es necesaria la unidad. Cómo dejo a entender que habría una segunda parte, dada la gran extensión del artículo, en ella incidiré en cuáles son, a mi entender, los primeros pasos para lograr una necesaria base social lo suficientemente flexible para que todos los que coincidimos en lo básico actuemos conjuntamente.
Afectuosamente, Carlos Manuel.
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Asi debe ser, querido Lorenzo la ética del soldado: grandeza en el vencer y ser vencido. lo que nos relatas es todo lo contrario.
Un abrazo
Adolfo
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Magnífico aporte, don Rafael, a esta efeméride.
atentamente
Adolfo Coloma
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Don Carlos: Espero con verdadero interés sus ideas y aportaciones para conseguir ilusionar, cohesionar, aumentar y movilizar a esa mayoría de españoles que se sienten defraudados pero tampoco encuentran los apoyos o los resortes para hacer presentes sus voces y su determinación
atentamente
Adolfo Coloma
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Magnífica efeméride, General Coloma.
A los que nos gusta la Historia nos proporciona la satisfacción de leerla y un buen motivo para ampliar lecturas al respecto.
Muchas gracias.
Saludos cordiales.
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Graciuas, don José Manuel
Adolfo Coloma
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Mi General. SIN Duda alguna, los españoles de entonces eran hechos de otra pasta, o quizás debería decir que eran más sacrificados y serviciales a los demás. Yo sólo siento admiración hacía ellos y desprecio a los que ahora presumen de tener poderes para avergonzarnos ante las naciones que aún quieren seguir siendo indivisibles. Pero, claro, YO SOY UN FACHA PARA ESTAS RATAS DE CLOACAS ARRABALERAS.
A las órdenes de Vuecencia mi General: Ramón Lencero Nieto
Español de nacimiento, por herencia y condición
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Español de nacimiento,
Por herencia y condición;
Español que da la vida
Si es motivo de la razón
Por la que se hacen las cosas
Que salen del corazón.
Atendiendo al juramento
Que con fidelidad se ofrendó
La vida que se consagra
Al servicio de la Nación,
De este España detractada
Por la indigna disposición.
De los que en ella pelechan
Sin sentido del honor
Y atendiendo al egoísmo
Que bendice la corrupción
De todos los depravados
Hechos en la imprecación.
Auspiciada por los malditos
Que ofenden la mención
De los héroes que deshonran
Motivados por el rencor
Y la indecencia que blanden
Contradiciendo el valor.
De los que con él predican
Sin alardes, ni la ficción
De los que en ella se hacen
Saboreando la corrupción
Tan de moda y atractiva
En este ahora tan felón.
Patriotero y destemplado
Como traicionero y ramplón,
Tan mariquita y degradante
Que aplaude la confusión
Hasta el mismo avasallado
Que a su amo se inclinó.
En España yo he nacido,
Y su cielo me alumbró
Sobre la faz de la tierra
Que con sangre se regó
Por las guerras fratricidas
Que quebrantan la razón.
Germinando las semillas
Empapadas de incomprensión
En las parcelas que abonan
Los sentimientos del rencor
Que lo exhiben como bandera
Los que auspician la traición.
Falsificando la identidad,
La grandeza de esta Nación
Que ante el mundo se hizo ver
Por el respeto que se ganó
Con el filo de la espada
Que al cobarde doblegó.
El mismo que hoy se subleva
Rebuznando y dando coz
Desde el altar que la cobardía
Que enarbolan el desvalor
Tan prostituto y desvergonzado
Como degenerado y maricón.
¡¡¡Por eso tengo una pena,
La zozobra que siento YO
Es propiedad del adentro
Que arañándome el corazón
Se me revuelven las tripas
Como al cualquier ESPEÑOL!!!.
Ramón Lencero Nieto
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Muchas gracias y un abrazo
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Gracias, doña Josefa. Todos aprendemos de todos
Atentamente
Adolfo Coloma
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Gracias, Ramón, querido Goana.
a mi también «se me revuelven las tripas, como cualquier español»
Un abrazo legionario
Adolfo Coloma
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