CATALUÑA: ESCENARIO DE GUERRA General de División Rafael Dávila Álvarez (R.)

Lo dice un documento aparecido en el despacho del secretario autonómico de Hacienda de la Generalidad. Se encontraba en un sobre donde figuraba como remitente el director de Patrimonio. El documento habla de la situación de Cataluña: ‹‹escenario de guerra››; contempla esta posibilidad tanto como la de un ‹‹escenario de guerrilla››. La carta o mensaje trata sobre cómo resolver la situación económica en esas situaciones. El documento está en manos de la justicia, pero no por eso deja de preocuparnos.

Estamos casi seguros de que nuestros servicios de inteligencia conocen al detalle cualquier preparativo y el alcance de estas previsiones de la Generalidad. Nos falta el casi. Eso crea un escenario preocupante. Todo en Cataluña lo es en estos momentos. Aquí no hay quien se fíe de nadie.

Empecemos por dejar clara la terminología. Lo que estos siniestros personajes que se envían cartitas guerreras llaman ‹‹guerra›› o ‹‹guerra de guerrillas›› no es ni lo uno ni lo otro. Sería simplemente terrorismo: ‹‹Actuación criminal de bandas organizadas, que, reiteradamente y por lo común de modo indiscriminado, pretende crear alarma social con fines políticos››. Sobre el tema su asiduo visitante Otegui puede asesorarles con mucho detalle.

El panorama se complica cada día más y la información nos deja muy preocupados. Ocupados estarán los que deben vigilar estas cosas. No estaría de más algo de información. Un poquito para que todos lo entendamos.

¿Esto es el juego democrático o una tomadura de pelo? Como yo, somos muchos los desinformados o incultos democráticos.

Entendemos cómo y por qué andan por los juzgados el señor Trapero y compañía. Lo entendemos y nos deja tranquilos.

No entendemos como este señor sigue al mando de los mozos de escuadra estando acusado de presunta sedición. Inaudito.

Entendemos que la jueza haya mandado a prisión a los agitadores de la calle del movimiento independentista.

No entendemos cómo no siguen sus pasos desde Puigdemont hacia abajo. ¿Nos lo podrían explicar jueces y fiscales? ¿O el ministro de justicia?

No es cosa de inteligencia entenderlo o no. La inteligencia está para lo que debe estar. Esto es más bien una tomadura de pelo.

Lo de Cataluña se ha convertido en un diálogo de besugos.

Pongan ustedes el nombre a los besugos. No es necesaria la inteligencia. ¿O sí?

La situación empieza a ser algo más que delicada. Peligrosa. Todos se marchan de Cataluña. El dinero huye. Indicios de que la situación puede aún deteriorarse más.

Hemos visto como el Gobierno, hasta ahora, ha dejado el grave tema de la independencia en manos de la justicia. Otro síntoma muy malo. Ha perdido el control y la autoridad para resolver un tema que es de mando y gobierno

Solo palabras. Todos hablan y hablan. Incluso el Abad de Monserrat que no sabemos muy bien que pinta en este asunto. Quizá no recuerde que la época de Franco ya pasó.

Demasiados hablando, ninguno resolviendo.

Habrá que recordar aquello de ¿Por qué no te callas? Y añadir ¿y haces algo?

A los aficionados a la guerra conviene recordarles que la mayoría de las plazas mal defendidas lo han sido menos por el escaso valor de los gobernantes que por no haber entendido estos su defensa.

Estos aficionados están llevando al Estado español y por tanto a Cataluña a la desolación.

General de División Rafael Dávila Álvarez (R.)

Blog: generaldavila.com

17 octubre 2017