Escribo aún bajo la emoción que recientemente me causó la primera ministra británica, Theresa May, cuando públicamente declaró, con motivo de su accidentado Brexit y en su relación con Gibraltar, que estaba dispuesta a defender con gran determinación y amor maternal, como era su obligación, a su “british family”. Ante lo que los españoles podríamos preguntar: “and, what about the “spanish family” (SF), señora May.? ¿No merece ninguna consideración ni respeto alguno?
La “BF” es muy grande. Y está mundialmente dispersa y formada, curiosamente, no solo por personas sino principalmente por territorios. Desde Gibraltar hasta Chipre, en el Mediterráneo, o desde Gibraltar hasta las Georgias del Sur, en el lejano y frío Atlántico Sur, pasando por las islas Malvinas, los habitantes de estos territorios no son británicos, o al menos genuinamente británicos, como sí lo son, en cambio, los territorios que habitan. Este destacado, y no desinteresado, amor británico en el cuidado de su “BF” hubo de sufrir un doloroso quebranto cuando los habitantes de Hong Kong, ¡pobrecitos ellos!, fueron abandonados a su suerte en manos de las autoridades comunistas chinas para evitar muy probablemente daños irreparables a la “BF” metropolitana. ¡Hasta ese punto podríamos llegar! Más vale prevenir, cuando el amor maternal no puede ser incondicional y, sobre todo, cuando los territorios son más importantes que las personas que los habitan aunque muchas veces se declare lo contrario, con notable hipocresía.
La “BF” que la señora Theresa May tanto ama, se ha ido creando por sedimentación de las posesiones que los británicos han ido afanando a lo largo de la Historia con un indisimulado interés por lo ajeno. La Constitución británica, no escrita, se basa en los usos y costumbres de la sociedad británica. Y he aquí que debe de ser esta circunstancia la que cauteriza su espíritu hasta no darse cuenta de que, al menos hoy , en el siglo XXI, no pueden quedarse con lo que no es suyo, como el Reino Unido hizo en tiempos pasados, por mucho que sean hoy, o hayan sido ayer, sus usos y costumbres. Pero es un hecho cierto que la Constitución británica, al menos en todo lo que se refiere a las relaciones internacionales, parece bendecir o justificar lo que no debe. Que el famoso pirata Drake haya sido sublimado y reconocido hoy como Sir Francis puede ser un significativo indicio de la realidad que trato de describir.
Muestra del Friso del Partenón en el Museo Británico
Alguien preguntó a una destacada personalidad británica por qué no devolvían a sus legítimos propietarios la parte (casi el 50%) del friso del Partenón que tan bonito luce en el Museo Británico de Londres. La respuesta fue muy sencilla: no podían hacerlo porque esa bella parte de la joya arquitectónica griega, por otro lado patrimonio de la Humanidad, estaba calificada como botín de guerra. Justificación hoy completamente anacrónica e inaceptable. Dicen que fue un emperador otomano, que entonces dominaba Grecia, el que vendió o, quizá mejor, saldó sus deudas con los ingleses, o compró sus favores, entregándoles el friso y otras importantes obras de arte sin ser su legítimo propietario.
Esta interpretación es particularmente dolorosa para nosotros los españoles, porque el hecho colonial británico en Gibraltar no fue el resultado de ninguna batalla perdida sino el simple arreglo de cuentas entre un rey Luis francés y una reina Isabel inglesa que, cansados de guerrear y gastar su dinero en ello, decidieron parar la contienda y que fuesen otros los que pagasen los platos rotos. Emulando la prodigalidad del emperador otomano el rey francés pagó a los ingleses con lo que no era suyo. España se vio así obligada a hacer frente a los costes de un caro almuerzo con el que se gratificaron dos exquisitos comensales (olvidándonos de Holanda) sin que nadie le diese siquiera una oportunidad de participar en la elección del menú.
Surgió así el Tratado de Utrecht de 1713. Este Tratado es el único documento que justifica la presencia británica en tierra española y está todavía en vigor , y a él debemos de atenernos, a pesar de los inconfesables deseos del insoportable y lenguaraz ministro principal de Gibraltar, señor Picardo, que, por otro lado , merece nuestros respeto por haber sabido mostrarse durante las negociaciones del Brexit mucho más activo, inteligente y sagaz, en la defensa de sus intereses, que nuestros ministros de exteriores en la defensa de los suyos.
Desde aquella fecha todo parece indicar que, en el concepto británico, siempre habrá de corresponderle a España poner la mesa, servir los cafés, a ser posible de rodillas, y pagar la cuenta. Y sin rechistar, como algunos preclaros analistas le aconsejan a España desde un conocido real instituto domiciliado en nuestra capital que los alberga, por ser ello lo mejor para nuestros intereses, dicen los malvados. ¿A quién se le habrá podido ocurrir tamaño dislate? Mercancía podrida. Recompensa oculta.
Fragata Nuestra Señora de las Mercedes. La Habana 1786
Pero volvamos a la historia. Los reyes españoles nunca vieron con buenos ojos el trabajo de los corsarios y menos nuestra Reina Isabel, la grande, la católica. Por eso apenas la practicaron. Hay algo de perverso en este tipo de guerra donde el corsario puede llegar a confundir sus propios intereses con la defensa de los del país que le concede la patente, y que también recibe su parte del botín. Hay una muy tenue separación entre piratas y corsarios.
Pues bien. En 1804 la fragata Nuestra Señora de las Mercedes fue atacada a su regreso de tierras americanas por un almirante inglés, no sabemos si mas pirata o mas corsario, pero que debía de conocer muy bien los tesoros, públicos y privados, que en ella se transportaban. También viajaban en la fragata muchas familias que perdieron su vida con la de la tripulación cuando fue hundida muy cerca de su destino. En total 249 personas muertas nos puedan dar una idea de la gravedad de la acción pirata. El almirante inglés, esclavo de su codicia, se olvidó no solo de las personas inocentes que navegaban en la Mercedes sino también de que la Gran Bretaña, en el momento del ataque, no estaba en guerra con España. Lamento escribirlo con tanta crudeza pero creo que los ingleses no distinguen el bien del mal cuando de apropiarse del patrimonio de los demás se trata. Tal cosa hicieron cuando usurparon la zona del istmo en nuestro Gibraltar, con la disculpa de un epidemia, o cuando, en fechas mucho más recientes declararon como propio un mar territorial que de ningún modo puede pertenecerles, según el Tratado de Utrecht, y que abarca la mitad de la Bahía de Algeciras, ante la inconcebible pasividad del gobierno socialista de Rodriguez Zapatero.
Es cierto que los acontecimientos del pasado no deben de ser juzgados ni interpretados según los criterios del presente. Pero es que nuestro drama consiste precisamente en eso: el Reino Unido de la Gran Bretaña muestra en Gibraltar los mismos afanes depredadores de los que hizo gala en el pasado. O sea, la historia se repite ante nuestros ojos y es esto lo que hace más insoportable e inaceptable para los españoles el hecho colonial inglés.
Yo recomendaría a la señora May mucha prudencia y contención en la defensa de su “BF”, porque una “SF” herida injustamente puede reaccionar muy en contra de los intereses que, en Gibraltar, trata de proteger. Porque para España, sea cual sea el resultado del Brexit, podría ser suficiente con cerrar la verja que separa ambos territorios españoles. O concederle al señor Putin, que no es tan malo con nosotros como muchos piensan, una base naval en Ceuta o en alguna montaña más cercana. O sea, señora May, si quiere defender a su “BF” como se merece devuélvanos Gibraltar a los españoles y podrá verse recompensada con su generosa ayuda en la defensa de sus legitimos intereses estratégicos en el Estrecho.
Aurelio Fernández Diz. CN (R.) Foro de Pensamiento Naval
Blog: generaldavila.com
18 enero 2019
General Dávila 
A las órdenes de V.I., mi Coronel.
Así es y ha sido desde la noche de los tiempos el modo de hacer del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Ya en esta pomposa y altisonante denominación se resume todo.
Ya desde antes de Morgan y Drake, otros súbditos de sus distintas y varias «graciosas majestades» se encargaron de dedicarse a la rapiña, y así se fue formando un imperio territorial, siempre con los nativos y aborígenes drásticamente exterminados y substituidos por poblaciones artificiales trasplantadas desde otros lugares, a las que, además, siempre ha clasificado como «ciudadanos de segunda y tercera». Por cierto, a los habitantes de Gibraltar no sé cómo los llamará ahora, pero durante al menos dos siglos y medio los distinguía con el nada ilustre apelativo de «escorpiones de roca».
En fin, que habría que seguir el consejo de nuestro insigne Almirante Blas de Lezo, y orientarse siempre hacia Inglaterra para determinada necesidad.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
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Adelante por España!
Que si en Rusia ya triunfó mi Division,
No es bastante nuestra hazaña,
si es inglesa la bandera del Peñon!!
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Magistral alegato sobre Gibraltar mi Coronel.
Se puede decir más alto pero no más claro.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!
José Manuel del Pozo González
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Sin indignación…? ni afán de revancha, es lastimosa la actuación inglesa en general y de la Sra. May en particular. Conozco la triste historia de la piratería inglesa, que sin previa declaración de guerra ni aviso alguno de ataque cañoneó por sorpresa y con abrumadora superioridad de medios a los barcos españoles. Los que, junto con el Nª Sª de las Mercedes, mandaba mi antepasado directo Bustamante. Apellido de marinos ilustres generación tras generación. Querido amigo y compañero. Gracias. Y a mi General por publicar en su blog tu extraordinario artículo. Abrazos entrañables
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Totalmente de acuerdo con el artículo de Don Aurelio. Los británicos nos robaron Gibraltar a traición, aprovechando una guerra civil en España y desde entonces nos han seguido robando. Nos robaron la zona neutral, donde construyeron una base aérea, aprovechando otra guerra civil en España. Nos robaron unas aguas territoriales que nunca se les cedieron por el Tratado de Utrech. Y nos siguen robando a día de hoy, porque siguen ganando terrenos al mar. Y los políticos españoles mirando para otro lado.
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Muchas gracias a todos por vuestro demostrado interés en la cuestión de la todavía no lograda devolución de la tierra que nos pertenece. Pero lo conseguiremos cuando logremos políticos a la altura del problema a resolver. Un abrazo
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Me ha gustado mucho este tratado de historia y le doy mis más sinceras gracias.
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Muchas gracia Josefa. Le felicito por su entusiasmo con todos los artículos que se publican en este magnifico blog ,artículos que se escriben, todos ellos, con el corazón en la mano. Yo soy gallego y ahora mismo me encuentro en la tierra que tanto quiero, pero España es la tierra que llena mi alma y por la que sufro , como tantos españoles ,cuando no es respetada como se merece. Un abrazo muy fuerte.
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Magnífico artículo querido amigo y compañero
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Estimado Don Aurelio, le felicito por su articulo y por decir muchas verdades contrarias a la gran mentira de lo politicamente correcto. El tema de Gibraltar sigue siendo doloroso, para los que amamos España y dariamos la vida por ella. Entro en el tema. A quien interesa que Gibraltar siga formando parte de la » BF» usando sus siglas. Hay demasiadas dudas, aunque la contundencia con que fue fulminado Garcia Margallo como MAE por hacer declaraciones publicas que era el momento de aprovechar el Brexit para recuperar Gibraltar, lo clarifica todo. Miedo, cobardia, intereses ocultos de una elite española. Cuales serian esos intereses, vamos a tratar de analizarlo. Felipe Gonzalez abre la verja. Con esa medida automaticamente en que se convierte Gibraltar, en un paraiso fiscal en casa. Recordemos que como paraiso fiscal , esta binculado al centro financiero de la City de Londres. Que es lo que ha salido por Gibraltar , cientos o miles de millones primero de pesetas y luego de euros puestos a buen recaudo esos fondos en la City de Londres, tanto de la Junta de Andalucia como de cualquiero otra parte del territorio nacional. Segundo , cuantas miles de empresas hay inscritas en el peñon que operan en España y tributan en Gibraltar. Tercero quienes manejan y es facil saberlo, los empresarios que proveeen a Gibraltar de todos los servicios, agua, electricidad, gas, telefonia, basura etc. Esto anualmente debe de suponer unos enormes beneficios para la empresas implicadas, que ademas para mas inri, seguro que estan inscritas en el peñon. Yo me imagino y conociendo a los british, cuando Gonzalez abrio la verja, seguro que estos a cambio le abrieron los ojos contandole las bondades de tener un paraiso fiscal en casa. Por ultimo aqui esta la clave. Que hizo la parte española como contraprestacion a la apertura de la verja, simplemente tenian que mantener el campo de Gibraltar subdesarrolado, para que el peñon atrajera mano de obra barata de la zona y que en algun momento estos trabajadores fueran el escudo que impidiese aislar o cerrar la verja de nuevo. Como hemos oido alguna declaracion reciente de » como vamos a dejar 20.000 personas sin trabajo…». Nos quejamos que los ingleses nos humillen cuando lo necesitan, hasta el infeliz de Picardo lo hace y saben que ningun politico en España va a decir nada, por la cuenta que les trae. Por consiguiente, alguien cree que vamos a recuperar Gibraltar , cuando a quienes mas le interesa que no lo sea, estan aqui en nuestra patria. Señores, estamos vendidos desde hace mucho tiempo y el resto lo esta haciendo la ingenieria social. Yo les pregunto como luchar contra esto, hoy ya no se usa el enfrentamiento militar, saber quien es el enemigo, solo se puede luchar con las mismas armas que ellos usan para devolver la ilusion a una sociedad excesivamente, maltratada y controlada por una minoria, esa ingenieria social se llama ilusion, como esta haciendo un cierto partido politico, hay que estar con ellos. Un abrazo a todos y Viva España.
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Estimado C.N. Fernández Diz:
Muchas gracias por su artículo.
En mi opinión son básicamente dos culturas distintas. La española, sin ser perfectos ni pretenderlo, que ha sido capaz de las mayores gestas de la humanidad, evangelizando y alfabetizando el mundo conocido, mezclándose con los nativos y otra la de los albiones que como colonizadores han llevado la misería y el expolio allí donde estuvieron, sin mezclarse con nadie. Muchos paises hoy en conflicto, fueron antes colonias albionas.
Como ejemplo de esta diferencia cultural, a comienzos de nuestro nefasto S.XIX, en 1803 parte de La Coruña la Real Filántrópica Expedición de la vacuna, contra la viruela, iniciativa del Rey Carlos IV y con cargo al erario público, para vacunar a los españoles de los territorios de ultramar. Ahí es nada, la primera expedición médica internacional!
El oprobio de Gibraltar también es debido a muchas traiciones, no sólo de los albiones.
Lo triste es que las batallas que nuestros valientes ganaron en la mar y en tierra, las ganaron los albiones escribiendo su historia, con nuestro consentimiento por acción u omisión.
Un cordial saludo y Viva Gibraltar español!
Benigno Castro
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Le has acertado en plena línea de flotación, mi Comandante.
Don Eufemio, un infante.
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Estimados Anfitriones, amigo Rafael, Llevo más de treinta años viviendo y trabajando entre y con ustedes. Hay una expresión en inglés para describir lo que nos pasa a los hijos de la Gran Bretaña como yo y es: «To go native». Es el hecho de dejar de ser buen británico y, a ojos de nuestros compatriotas, convertirse en lo más parecido a los habitantes del país en cuestión, en este caso España. Como pueden suponer, de vez en cuando, el tema de Gibraltar ha surgido en conversación. Es cierto que al principio no sabía muy bien qué, ni cómo, contestar, por lo que me callaba y escuchaba lo que tenían que decir mis interlocutores. Para mí la solución está en vuestros manos. Habéis permitido a los judíos sefardíes, descendientes de los expulsados hace medio siglo en una operación digno de la mismísima pérfida albión, ostentar la nacionalidad española además de la suya propia. Propongo que hagáis lo mismo para los británicos que habéis acogido en vuestro territorio. A los llanitos que dispongan de pasaporte español no habría que preocuparse con estrictos controles de seguridad en la verja. A los que prefieran la exclusividad de un sólo documento pues, eso, exclusividad selectiva. En una generación, y por la cuenta que les trae a los habitantes de Gibraltar, creo que la soberanía compartida será una realidad, «la pela es la pela» como se suele decir en Cataluña, otra bella región de este país. Cerrar la verja no es la solución, no funciona, si no se hubiera hecho antes a lo mejor otro gallo nos cantaría. No hay que obviar ni lo bueno ni lo malo el pasado, pero nuestro rumbo hacía el futuro debería estar consensuado. Pido disculpas por no expresarme de manera más agradable y elocuente pero, os aseguro, estoy en ello. Atentamente, un fuerte abrazo legionario a todos, Andy Mortimer
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Un fuerte abrazo querido Andy y bienvenido a esta tu casa como lo es esta querida España a la que tanto amas, como el que más, y que tanto sientes. Un fuerte abrazo.
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Los ingleses, aparte de ser bastante cínicos, siempre han tenido por costumbre apropiarse de lo ajeno y yo diría que sin dar demasiadas explicaciones. Además han tenido una habilidad especial para crearnos una leyenda negra y ellos salirse de rositas con el tráfico de opio que costó tantas vidas en La India pero que naturalmente sólo conocen unos pocos y no se habla de ello…por algo será. Igual que finalmente han conseguido que la esposa del Carlos de Inglaterra tenga que ser tragada y mimada por la prensa internacional, y que el accidente de la pobre de Diana de Gales nunca se haya podido aclarar.
¿No les suena a publicidad pagada en todos los casos, incluso en el siglo XIX que ya tiene mérito haberse adelantado a los sistemas americanos de lobbys que promocionan lo que se les eche con tal de que se les pague?
Pues Gibraltar es otra cuestión que se tendría que arreglar por las buenas o por las malas, sólo que no contamos con un ejército a la altura en número y pertrechos, que para eso ellos son los amiguitos preferidos de Los Estados Unidos y encima nos liquidarían la cuestión quedándose con Sotogrande, que les gusta extraordinariamente porque es allí donde viven los que se enriquecen en el >Peñón a costa del contrabando y de la evasión de impuestos que faciiian a quienes les pagan bien..Inglaterra o El lReino Unido no es más que una mafia, siempre lo ha sido y por desgracia lo seguirá siendo porque no podemos arriesgarnos a una guerra y la política (y los que la dirigen en España tendrán sus razones) nunca ha conseguido nada ni en Naciones Unidas ni en la Unión Europea…Repito, sus razones tendrán……
Atentamente
Margarita .Alvarez-Ossorio
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El articulo brillante, pero por desgracia usted y yo sabemos que no pasara nada de eso. La familia Española tiene bastante con ir jorobandose los unos a los otros. Con los políticos actuales y anteriores, lo tenemos crudo.
Ya se demostró una vez que con el cierre les dimos donde le dolía. Pero tuvieron que bajarse los pantalones hasta los tobillos para que estos que ahora quieren marchar de europa nos dejaran entrar como socios de segunda. Y ahí nos encontramos en la segunda división europea.
Saludos y VIVA ESPAÑA
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La pérfida Albión solo entiende la razón de la fuerza y nunca atendió a la fuerza de la razón.
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Para Andy Mortimer. Estoy muy de acuerdo con su planteamiento pero creo que los que aman a España, como parece que usted lo hace, deben de amar también su integridad territorial. El cierre de la verja es algo a lo que España no puede ni debe renunciar para poder hacer frente, o limitar, tantas humillaciones y afrentas que a diario se producen por parte del RU, y su representante Picardo, como son las continuas amenazas de intervención de la Royal Navy, la continua expansión por tierra y por mar, el despliegue de bloques en aguas españolas, las continuas visitas y reparaciones de submarinos nucleares, los continuos intentos de propiciar la consolidación de un mini estado parasito de la economía española, el contrabando de tabaco , el trafico de estupefacientes etc. etc. etc. y encima de todo ello aspirar a vivir plácidamente en España. O sea, del jamón lo negrito y del calendario lo rojito. El imposible que cualquiera puede desear. Con todo mi afecto.
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Muy bueno Aurelio
Enhorabuena
Juan Lpd
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