La muerte está siempre presente en la vocación del soldado, el Legionario la hizo su novia y en su Credo manifiesta que “morir no es tan horrible como parece, lo más horrible es vivir como un cobarde”. Para el Paracaidista, como dice su Ideario “La muerte es el mayor premio para el valiente y el mayor castigo para el cobarde”.
Esta predisposición a entregar la vida por valores superiores y por la Fe es virtud de grandes y generosas almas. La vocación del soldado lleva consigo el que “su mayor recompensa es la satisfacción del deber cumplido”, la Fe de los mártires les permite entregar sus vidas para Gloria de Dios. Pero esa entrega ¿Puede ser la razón del olvido o del mero y rutinario recuerdo por parte del resto?
Hace unos días el general Dávila nos relataba la Beatificación de los 115 mártires de Almería, asesinados hace 83 años después de sufrir martirio por no renunciar a su Fe. Lo hicieron humanos envilecidos por el odio, que pocos años antes comenzaron por profanar templos e imágenes sagradas, como por desgracia contemplamos en nuestros días por los mismos que acusan de delito de odio a quienes disienten y denuncian a los que pretenden imponer ideologías y costumbres contra natura.
Pues bien, el reconocimiento a aquellos mártires no pasó de una celebración litúrgica de carácter local y mínima repercusión mediática. Al parecer, aquellos españoles ejemplares no merecían, para la mayoría de sus compatriotas más homenaje que la soledad o el olvido
Día del recuerdo a los asesinados por el terrorismo
Igual ha pasado con los caídos en el más sangriento atentado terrorista de Europa el 11 de Marzo de hace solo 13 años. Tan grave que Europa declaró dicha jornada como día del recuerdo a los asesinados por el terrorismo. Sin embargo, nuestra querida Patria, sus políticos, por razones inconfesables, no solo no lo compartieron, sino que año tras año el Homenaje a aquellos españoles ha ido perdiendo solemnidad, desde ser un acto de Estado, presidido por los Reyes, a ser una rutina partidista, al tiempo que los monumentos a las víctimas se van derruyendo sin cuidado. Tal ocurre con el horroroso cilindro de Atocha, cayéndose a pedazos, o los árboles del Bosque del Recuerdo, pintados de verde por su deterioro. Todo ello como signo de la soledad en que quedan aquellos que murieron por ser españoles-
Poco hay que comentar de la soledad en que hemos dejado a los casi mil caídos por la vileza etarra, extendida hoy por el País Vasco y Navarra empeñada en destrozar España desde las Instituciones, eso sí, después de ser derrotada por nuestra democracia (?).
Es posible que solo los soldados caídos en cumplimiento de su deber, no sientan esa soledad porque cada día, al caer el sol, el toque de Oración les hace llegar el recuerdo de sus compañeros allí donde estén.
Emilio Pérez Alamán Teniente General (R.)
Blog: generaldavila.com
2 abril 2017

Mi general Alamán, una vez más mi reconocimiento y felicitación.
Es verdad que la actual forma de vivir ha laminado los principios y valores tradicionales. Se han ido imponiendo otros modos de ver la vida y, creo que desde la educación primaria se va canalizando la formación del espíritu hacia el materialismo y la indiferencia.
Y en ese trágico recorrido todo lo que afecta a la Patria está mal visto. El relativismo ha triunfado.
Y así, recordar a quienes dieron su vida por España, tanto en el frente de combate como en la acera de una calle o en unos vagones de trenes, constituye, como dijo nuestro actual presidente de gobierno respecto del Desfile militar, «un coñazo». Hay miedo o, lo que es peor, se siente vergüenza de ser señalado por continuar actuando de acuerdo con los principios y valores de antaño. Es el camino que se ha elegido.
Quienes dieron la vida en el frente de combate tienen, al menos, el homenaje diario de sus compañeros.
Sin embargo, a quienes fueron vilvemente asesinados no les queda nada, salvo el sentimiento interior de sus familiares y amigos.
Cuanto dices del 11M es de vergüenza ajena, no solo a casi nadie le importa la verdad, sino que ni nuestros políticos se molestaron en sumarse al movimiento de toda Europa.
¿Miedo, vergüenza, odio?
Una anécdota breve, hace meses coincidí en la Plaza de Colón en el momento en que se izaba nuestra bandera, entre la indiferencia general. Terminado el acto y al comenzar el breve desfile, nadie prestó atención. Irritado, aplaudí como un loco a la Guardia Civil, a quien le correspondió ese día ese honor.
Solo seguí aplaudiendo hasta que conseguí que unas tres personas se uniesen en ese aplauso. La pena fue que quienes me acompañaron eran procedentes de América del Sur.
Lo que vivimos es un síntoma de una sociedad enferma que va hacia su derrota total.
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Allá en la tarde, cuando el sol se pone,
cuando escuches el toque de Oración,
cuadrado, firme, mira al frente
caballero, que estas en la Legión.
Piensa quizás en tantas cosas,
acaso en ninguna a lo mejor,
pero debo decirte, Legionario,
que pienses esto que te digo, por favor.
Mientras van desgranándose las notas
del toque sagrado de oración,
recuerda los que yacen su deber cumplido
sin distinción de clases ni nación.
No todos fueron españoles
los que forman esa aguerrida Legión,
que dieron alma y vida por la gloria
logrando esas corbatas que lleva tu guión.
Cuando mires de frente tu bandera
lleva en ella tu mirada con unción,
ella lleva la sangre de mil héroes,
los mejores que tuvo la Legión.
Piensa siempre que tendrás que superarte,
si quieres si quiera a ellos parecer:
ese cuerpo fue ya hecho en aquel tiempo
con la sola misión de morir o vencer.
La larga fila de los nombres te harán
de ver los caídos del Tercio por doquier,
pero piensa que siempre existe un hombre,
que ocupe el puesto de un caído, para él caer.
Así será mientras exista el Tercio.
Millán lo quiso y siempre habrá de ser:
sé tú uno más en la lista interminable,
de aquellos héroes anónimos que ves.
Allá en la tarde cuando el sol se pone,
cuando escuches el toque de oración,
rezad en silencio un plegaria en mi nombre,
te lo pide quien estuvo en la Legión.
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Marinero,marinero,digasme hora esa canción.
Yo no digo mi canción si no,a quien conmigo va.
Saludo con taconazo a Vuecencia mi General.
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Gracias Rafa por la ilustración y enhorabuena por el comentario del diar Un abrazo.
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Enhorabuena a ti mi general y a nuestros lectores gracias por su acogida y lectura.
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Mi General,
Agradezco de corazón su recuerdo a nuestros caídos, en un día especialmente triste tras comprobar el permiso penitenciario concedido a Txapote, probablemente uno de los miembros más sanguinarios de ETA. De una organización Terrorista, que ni se ha rendido, ni ha entregado las armas, como algunos nos quieren hacer ver.
El fatídico 11- M de 2004, perdí a un compañero y amigo en Atocha. Trabajaba en Recoletos. Pasaban las horas, llamábamos desesperados a su móvil y nunca respondió.
Gracias D. Pedro Motas, por esos acordes del toque de oración.
Feliz Domingo a todos y con más fuerza que nunca:
Viva España!!!!
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En España ya no existen valores, solamente impera la obsesión por el consumo y el dinero, lo demás queda en agua de borrajas. La sociedad española no tiene memoria, solamente vive bajo la ignorancia impuesta por unos que se hacen llamar politicos, Si mañana al nombre de España le quitan la tilde de la eñe no pasaría nada, esta es la España real. Pero mientras quedemos algunos valientes en España se seguirá escuchando.
¡¡Arriba España!!
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En nombre de los españoles de bien asesinados por tal motivo gracias por no dejarles solos. Mientras tantos miren a otro lado olvidando lo que se les debe a ellos y lo que tienen que pagar sus verdugos, estaremos en una sociedad muerta, cada vez más difícil de resucitar. No desfallezcamos.
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Como siempre mi general estoy de acuerdo con vuecencia pues,hay veces que me avergüenza lo que puedan decir de ESPAÑA por ahí fuera ya que se homenajea a los niños mártires de guerra en Siria, niños que han muerto quizás porque sus padres jóvenes han preferido marchar a otro país en vez de empuñar las armas para defender su Patria del azote terrorista. Sinembargo aquí en este País antes llamado ESPAÑA no se acuerdan de los niños asesinados por la ETA o por los que hayan podido caer en otros atentados. No se puede permitir tal injuria a las víctimas del terrorismo sea del color que sea y venga de donde venga.
¿porque no se homenajea a los caídos de la División Azul que dejaron en lo más alto de la segunda guerra mundial el pabellón de ESPAÑA? no estos son Españoles de pro que fueron a combatir el comunismo allí donde estuviera y por lo tanto hay que olvidarlos y hasta quitar el rótulo de la calle que lleva su nombre. ¿No es esto para un ESPAÑOL, si con mayúsculas, motivo de vergüenza?. Pero así son las cosas hoy.
Siempre a sus ordenes mi general con el afectuoso saludo de Miguel Soler de Arespacochaga
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En los diferentes actos a los que he asistido como veterano, rara vez he podido evitar una lagrima al escuchar el Toque de Oración. Los legionarios también lloran cuando caen sus camaradas. ¡Arriba España!. Julio de Felipe
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Para el rojerío la muerte es una injusticia del dios de los fascistas. Como les cabrea mucho eso de morir, aseguran que detrás no hay nada. No quieren recordar ni la palabra. Ahora, sobre todo, entre la prensa «progre», casi nadie se muere como en los tiempos de Franco, ahora se fallece, que es algo así como más dulce. Se llega al extremo de que en las estadísticas de los accidentes de circulación, ya no dan listas de muertos en carretera, ahora son fallecidos y tal como lo cuentan, parece que lo hacen en brazos del eficiente Director General de Tráfico.
La creencia, instinto o fuerte deseo desde los principios de la humanidad, como nos enseña la moderna Etnología, es que hay otra vida después de la muerte. Eso ocurría mucho antes de las religiones del Libro. La inmortalidad del alma es un conocimiento innato por Ley Natural en todos los hombres. De la misma forma que lo es la distinción entre el bien y el mal. La ley natural sólo la niegan las gentes con la mente muy retorcida.
Por si fuera poco, curiosamente, la Escolástica utiliza como prueba de la inmortalidad del alma un argumento original del pagano Cicerón: » Consensio ómnium gentium lex naturae putanda est», al que definían como Argumento Histórico y que si superamos Latín, como Tierno Galvan, le llamaríamos argumento democrático: «El consentimiento de todas las gentes es Ley Natural proclamada». Espero que quienes se consideren «ante-todo-demócratas» vayan rápidamente a confesarse, por si acaso.
Sin saber nada de filosofía, ni de Etnología,, solamente con España en el corazón nosotros, los soldados, a la puesta del Sol, en todos los cuarteles y buques de la Armada, después de rendir los honores a la bandera mientras se arría, damos media vuelta y mirando al campo o al horizonte mientras la trompeta con un toque, que suena como un lamento , reza con nosotros por los compañeros perdidos.
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Es a los mandos de un avion en llamas o en la trinchera cavada con sus manos donde el soldado muestra su grandeza. Por quien muere el soldado? Por la tumba de sus abuelos, la cuna de sus hermanos y la dignidad de sus padres y su patria. Seamos dignos de tal sacrificio agradeciendoselo. No unos caines mal nacidos y avarientos…
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A mi padre.
MARIANO GAMO SERRANO
que en el Paraiso estas
donde angeles en vela
guardando la puerta van
con sus espadas de fuego
con su impasible ademan
para que los escogidos
solo alla puedan entrar
rojos de sangre y de odio
te pusieron a ti alla
y en la lista de los muertos
que por la Patria lo estan
pero no importa Mariano
tu vida completa esta
que tus hijos te recuerdan
y en ellos presente estas
esas balas asesinas
no podran contigo ya
que marchas en las legiones
que por los luceros van.
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