Desde que nuestro Gobierno persiste en su afán de meter en la Unión Europea (UE)/ Schengen a la colonia militar británica de Gibraltar, aunque sea por la puerta de atrás, nos repite una y otra vez que la solución satisfactoria de las negociaciones traerá consigo el derribo de la verja que parte en dos –ilegalmente- el istmo que ha sido, es y será español ya que no fue cedido en Utrecht ni en momento posterior alguno.
Aunque, desde el pasado 11 de junio, nuestros gobernantes pregonan que se ha llegado a un acuerdo político satisfactorio para seguir negociando en unas negociaciones que lleven a un tratado (pendiente de negociar pero ya calificado de «histórico»), lo cierto es que la verja no podrán derribarla –ni siquiera los británicos- por las implicaciones de seguridad que tiene para el aeródromo de RAF Gibraltar y para el resto de las instalaciones militares construidas ilegalmente en el istmo, que es –en su totalidad- de soberanía y propiedad de España. Además, no parece que la sustitución de una verja física por una valla virtual o metafísica sea algo más que el fruto de una mente imaginativa y ciertamente hiperventilada.
El origen de la verja
Como llevan haciendo 321 años desde la usurpación del Peñón hasta hoy día, saben aprovechar los momentos de debilidad española para facilitar la expansión de la ciudad cuya propiedad se cedió en Utrecht.
La verja la levantaron los británicos en 1909 en el límite norte de la mitad sur del istmo ocupando sin título legal unos 850m del mismo, territorio sobre el que los británicos nunca han sido capaces de presentar documento alguno con validez jurídica internacional que justifique su ocupación.
La apertura y el cierre de la puerta sita en la verja y controlada por los británicos, determinaban el paso de los miles de españoles que acudían a diario a trabajar en el Peñón, facilitando su economía y por ello, la supervivencia de la base militar incluso en momentos tan complicados como la Segunda Guerra Mundial (SGM).
En 1967 los británicos se declararon soberanos sobre la mitad sur del istmo que sigue siendo de soberanía española; y lo saben.
El aeródromo
Inicialmente, los británicos establecieron un hipódromo en la mitad sur del istmo. En 1938, aprovecharon la Guerra Civil española para construir un aeródromo militar. Durante la SGM ampliaron la longitud de la pista entrando, mediante rellenos, en las aguas de la bahía de Algeciras en una nueva usurpación de espacios de soberanía española que puede calificarse de «incursión permanente».
Responsabilidad del Ministerio de Defensa británico, «el aeropuerto de Gibraltar es un aeródromo militar, disponible para vuelos civiles». De hecho, actualmente, el número de vuelos al mes es de unos cuatro o cinco militares y unos 150 civiles.
Mide 1.778m. Unos 850m están en el istmo; el resto forma parte de la prolongación de la pista de aterrizaje que se adentra en la bahía de Algeciras. De hecho, años tras año, se encuentra entre los diez aeropuertos más peligrosos del mundo[i].
La marcha de Gibraltar hacia la independencia
En 1945 los británicos incluyeron a Gibraltar en la lista que entregaron a Naciones Unidas de territorios no autónomos, (pendientes de descolonización). El objetivo británico no era otro que dar la independencia a Gibraltar soslayando el tratado de Utrecht contando con el aval de la ONU, organización en la que España no era admitida. El Gibraltar independiente les cedería la base militar, que es lo que les importa.
En 1954, el entonces Gobernador Militar del Campo de Gibraltar, el general Cuesta Monereo, ordenó construir una cancela adosada a la verja inglesa que separa Gibraltar del resto de España. Con esta decisión, el Reino Unido (RU) perdió el control exclusivo de la apertura y cierre de la verja.
España entró en la ONU en 1955. A partir de 1963, el «Comité de los 24» (Descolonización) empezó a tratar la cuestión de Gibraltar. Diversas resoluciones y decisiones de la Asamblea General (AGNU) establecieron que dicha cuestión –de naturaleza colonial- debe resolverse mediante negociaciones bilaterales entre España y RU.
A pesar de las negociaciones diplomáticas bilaterales en curso, los británicos siguieron avanzando en sus pasos para dar la independencia a Gibraltar provocando el fracaso de esas negociaciones. En consecuencia, no dejaron al Gobierno español más opción que cerrar la verja el 09.06.1969, en estricto cumplimiento del tratado de Utrecht. Esta decisión frustró los planes británicos y fue factible gracias a la construcción de la cancela en 1954.
La seguridad de los aeropuertos
La seguridad se contempla en el Anexo 17 al Convenio sobre Aviación Civil Internacional (OACI).
En su capítulo 4, punto 4.2.1 establece: «Cada Estado contratante asegurará que el acceso a las zonas de la parte aeronáutica de los aeropuertos que prestan servicio a la aviación civil está controlado para evitar el ingreso de personas no autorizadas.»
En el punto 4.2.2 establece: «Cada Estado contratante asegurará que, en cada aeropuerto que preste servicios a la aviación civil, se establezcan zonas de seguridad restringidas, designadas por el Estado basándose en la evaluación de riesgos de seguridad que realicen las autoridades nacionales competentes.»
El punto 9.10.2 del mismo documento establece: «Se proveerá una valla u otra barrera adecuada en un aeródromo para evitar el acceso inadvertido o premeditado de personas no autorizadas en una zona del aeródromo vedada al público».
La verja y el aeródromo de Gibraltar
La verja –línea roja en la imagen- no discurre paralela a la pista de aterrizaje. Su extremo de levante está a unos 120m de la pista; tiene unos 634m orientados al 292º hasta llegar a la altura de la terminal civil en donde hay un punto de inflexión; desde aquí, la verja sigue al 270º unos 570m hasta la orilla; en el extremo de poniente la distancia a la pista es de unos 350m.
El paño metálico no es homogéneo en toda su longitud. En algunos tramos es diáfano pero en otros tiene un par de capas e incluso, entre estas capas, un conjunto caótico de alambres. La verja suele estar coronada por concertinas o alambres de espino. Su estructura no impide que en algunos puntos –especialmente en levante- tenga los boquetes necesarios para permitir el paso de cajas de tabaco que exporta Gibraltar; su transporte lo hacen los trabajadores de esa industria, unas veces pasando ellos mismos con las cajas por los boquetes y otras lanzándolas por el boquete o por encima de la verja –también por poniente- que tiene poco más de un par de metros de altura.
Como puede verse en la imagen, entre la verja y la pista de aterrizaje hay un conjunto de instalaciones significativas, la mayor parte de ellas militares.
A poniente existe un solar del Ministerio de Defensa con viviendas militares. Tiene su propia valla de seguridad, doblando la verja de 1909. Podemos asegurar que este solar seguirá con su valla.
A continuación está la Av. Winston Churchill que termina en el acceso/salida actual a Gibraltar para vehículos y peatones. Justo al pasar al norte de la verja está el puesto de control de la policía española. Esta carretera es la que atraviesa la pista de aterrizaje.
En el extremo de levante de la pista, pasando por debajo de ella a pocos metros de la orilla del mar, está el túnel Kingsway para vehículos. Forma parte de la avenida del mismo nombre –de cuatro carriles- que arranca cerca de la base del Peñón y va bordeando las instalaciones aeroportuarias dando salida al tráfico local; tiene sus propias vallas de seguridad como ocurre con las autopistas. Entre su lado norte y la verja hay otra carretera estrecha que facilita el acceso a las instalaciones de levante.
Al pasar a levante de la Av. Winston Churchill y como instalaciones más significativas tenemos la torre de control del aeródromo con su rótulo de «RAF Gibraltar». En sus proximidades hay una rotonda en la que confluye la Av. Winston Churchill con la Av. Kingsway, canalizando el tráfico entre la Línea y Gibraltar. Después está la terminal civil del denominado «Gibraltar International Airport».
Entre la verja y la Av. Kingsway, a levante de la terminal civil, está el recinto aduanero que también tiene sus vallas de seguridad. A continuación, hay una superficie de aparcamiento para los vehículos de la Toyota Gibraltar Stockholdings; esta superficie tendrá que seguir con la correspondiente valla de seguridad.
Unos metros a levante se encuentra el centro de operaciones del túnel que, como es lógico, continuará con su cercado.
En el extremo oriental, entre la verja y la Av. Kingsway, hay varios depósitos de combustible de aviación que también exigen su propia verja de seguridad.
El vallado de seguridad en el lado sur de la Av. Kingsway la aísla del resto de instalaciones aeroportuarias como son los aparcamientos de vehículos y aeronaves, las instalaciones de adiestramiento contraincendios, almacenes de empresas mundiales de paquetería, una estación de servicio etc.
Entre la verja de 1909 y estas instalaciones aeroportuarias hay tres vallas (una de ellas con alambres de espino) y una autovía, la Av. Kingsway. Dicho sea esto sin contar el resto de las instalaciones militares o aeroportuarias que –como hemos visto- tienen sus propias vallas.
Al sur de la pista de aterrizaje hay más instalaciones militares con sus propias vallas de seguridad. No nos referimos a ellas por estar alejadas de la verja de 1909.
El enigma
Cabe preguntarse de qué verja (o valla) están hablando nuestros próceres cuando, con insistencia y cierta vehemencia, se refieren a su derribo. Por algo esta referencia solo la hacen los nuestros, tanto con competencias nacionales como comarcales. Los británicos se abstienen de mencionarlo. Al contrario, aseguran que «Las Fuerzas Británicas en Gibraltar seguirán operando sin interferencias ni interrupciones exactamente igual que hasta ahora….» es decir, su seguridad no se verá alterada.
Lo que parece más probable es que se limiten a desmontar algunos metros de verja, de los más próximos al acceso a Gibraltar es decir, el paso en donde están los puestos de control de la Policía Nacional. Serán los metros suficientes para hacerse unas fotografías «históricas» y poco más pues la seguridad del aeródromo y de las instalaciones militares va a impedirlo.
En 1810 los británicos consiguieron que destruyésemos la línea de contravalación, cuyos restos aún pueden observarse en La Línea, superando así el obstáculo que, con sus fuertes, les impedía avanzar por el istmo y por las aguas adyacentes. Ahora, en 2025, es posible que consigan el derribo de lo que levantó en 1954 el general Cuesta Monereo y que, en 1969, frustró la independencia de Gibraltar pretendida por el Reino Unido contra todo derecho (Tratado de Utrecht y resoluciones de la Asamblea General de la ONU); sería un logro británico con graves consecuencias históricas. De esta forma superarían el «punto de ruptura» actual de Gibraltar como es el paso por la verja que quedaría totalmente expedito, algo que siempre han querido para facilitar su expansión por la comarca circunvecina.
Claro que, a lo mejor resulta que los británicos no se han dado cuenta de que, desaparecida la verja, desaparece la seguridad del aeródromo militar por lo que éste quedaría inutilizado, por lo menos para prestar servicios a la aviación civil como «Gibraltar International Airport». Esto sí que sería un logro histórico.
También puede ser que nuestros próceres tengan problemas para entender que Gibraltar es una base militar y que lo que hay en el istmo es un aeródromo de la RAF que –como todos los aeródromos- además de un conjunto de instalaciones aeroportuarias a su servicio, tiene importantes servidumbres de seguridad.

Vista de la verja, tramo de levante. Foto ALF.

En esta fotografía de la verja se aprecia una vía de las utilizadas para canalizar la exportación de tabaco de Gibraltar. Foto ALF
Supongo que cuando se publique el acuerdo, hasta ahora «fantasma», se aclarará este enigma.
Ángel Liberal Fernández, Capitán de Navío (R)
[i] https://www.eleconomista.es/galerias/eleconomista/21932/Los-aeropuertos-mas-peligrosos-del-mundo-con-pistas-de-escasos-metros-acantilados-montanas-y-fuertes-vientos/1
17 octubre 2025
Blog: generaldavila.com