Dice el Rey al final de su discurso institucional en la apertura solemne de la XIV legislatura: <<España no puede ser de unos contra otros; España debe ser de todos y para todos. Así lo ha querido la sociedad española desde hace más de 40 años. Así lo sigue queriendo y, sobre todo, así lo merece>>.
Son palabras muy duras, alarmantes y premonitorias. Más bien actuales, que describen y resumen lo que pasa. Son reales y Reales.
Si lo dice el Rey es que se percibe que España es, ahora, hoy, unos contra otros, que no es de todos y para todos.
De lo que dudo algo, muy poco, pero dudar es necesario e importante, es que no nos lo merezcamos. Porque si el Rey ha visto necesario decirlo y avisar: ¡Cuidado!, ¡que España no puede ser de unos contra otros!, es que nos lo merecemos porque algo hemos hecho, estamos haciendo mal, aunque aún a tiempo de corregir.
Dice el Rey al comenzar su discurso institucional en la apertura solemne de la XIV legislatura:<<Un acto solemne que supone el encuentro en las Cortes Generales, depositarias de la soberanía nacional en nuestra Monarquía Parlamentaria, entre los representantes del pueblo español y el Jefe del Estado, que, de acuerdo con nuestra Constitución, es símbolo de su unidad y permanencia>>.
Creo que todo está dicho y consumado. España debe ser -¿no lo es?- de todos y para todos. No de unos contra otros ¿lo es? ¿Qué quiere la sociedad española?
Monarquía Parlamentaria. El Jefe del Estado, de acuerdo con nuestra Constitución, es símbolo de su unidad y permanencia.
Nada más que decir; meridiana claridad en la exposición y líneas a seguir en el futuro que se presenta de largo e incierto recorrido.
Símbolo de nuestra unidad y permanencia: El Rey.
Ya lo saben. También lo saben esos que se quedaron fuera porque no admiten España, no admiten su unidad, no admiten que sea de todos y para todos. Por eso no tienen Rey, no reconocen al Rey, no acatan la Constitución, no admiten la Ley, y representan al enfrentamiento y el dolor del pasado. Son ellos los que niegan una España de todos y para todos.
Bien están donde estaban hoy: fuera del Parlamento. Sería su lugar.
El caso es que ponen y quitan rey. Se creen con ese derecho y lo ejercen; ahora está en sus manos el reinado de la Moncloa.
Claro que él se deja.
¡Viva España! ¡Viva el Rey!
General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez
4 febrero 2020
PALABRAS DE SU MAJESTAD EL REY EN LA APERTURA SOLEMNE DE LA XIV LEGISLATURA