LA GUERRA SIGUE Y SEGUIRÁ. General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

 

Áyax, confundido, acaba con su vida. Confundió a los combatientes con borregos.

Algo está pendiente. En la guerra siempre existe la incertidumbre de mañana. El ataque de Ucrania en la retaguardia rusa no es importante por sus efectos materiales. Ni mucho menos. Rusia se recuperará de los efectos materiales adversos con rapidez y disciplina. El efecto moral es lo importante, pero no se crean que es bueno para Ucrania haber logrado ese impacto porque la moral de las tropas rusas no es suya sino, como todo, de su presidente. En este caso creemos que Ucrania ha logrado lo contrario a sus intereses. No será fácil logar una pérdida de moral entre los combatientes rusos. Todo lo contrario. El Ejército ruso no es amigo de grandes reacciones ofensivas ni de exhibiciones bélicas muy articuladas alrededor de la propaganda. Más bien es silencioso, eficaz y rompe con dureza y decisión. Lo que significa que por mi parte no espero un respuesta rusa muy violenta al ataque perpetrado por Ucrania. La habrá, pero a su manera. Recuerden la reacción al Nord Stream II o a la rebeldía de Prigozhin. Todo continua con su lento avance y definitivo final. Son lentos, poco dados al asalto final, pero acaban venciendo. Hasta ahora así ha sido. Habrá que esperar con el permiso de Europa.

A todo esto los silencios extraños de Trump algo están diciendo. Oriente Próximo no se relaja, Irán espera el ataque de Israel, Gaza ¡siempre Gaza!, la silenciosa China, y no les extrañe que algo estalle antes de lo que se piensa. Allí donde nadie lo espera. África podría reventar con grave repercusión para España a la que le han robado el control en el Estrecho. Por el sur estamos indefensos. Como por el norte, aunque por allí no hay enemigo.

Introduzco este paréntesis de España porque han terminado unas importantes maniobras en el norte de África con la participación de España que ha huido de Marruecos y de Israel, pero sospechosamente nos han silenciado los ejercicios militares (African Lion). Desde el punto de vista de la democracia nuestras Fuerzas Armadas viven una dictadura absoluta. Nadie se mueve ni nadie responde a las preguntas de quién es nuestro enemigo, que armas no tenemos, como vamos a reponer las que hemos tirado por la borda por nuestra inquina hacia Israel, en definitiva nadie responde a la pregunta de riesgos, amenazas y postura a adoptar. Deberíamos hacer menos juegos florales y exhibiciones gratuitas, que de nada sirven, y pensar más en Perejil, ahora que se acerca el mes de julio. Por allí todo es casus belli y ahora allí se posiciona  nuestro amigo Trump. También Israel; no lo olviden.

Podría ser que en la Cumbre de la OTAN en La Haya alguien tenga el valor de preguntar ¿y de España qué?, incluso podría acercarse Puigdemont a desarrollar su tesis sobre la defensa de Cataluña, la Constitución española y su encaje en la Cataluña independiente. El Ejército español que se olvide del artículo 8.

Hecho el paréntesis obligado para la guerra en España, sigamos con la mundial.

O esto se acerca rápido al acuerdo, del tipo que sea, o de aquí al verano que viene (2026) Rusia ocupará Ucrania desde Kiev hasta Odessa con el Dniéper como frontera. El mapa de Europa habrá cambiado, de hecho ya lo está haciendo. ¿Cuál es el peligro? No hay que ser muy listo para entender que habrá un final inesperado como lo fue el de la II Guerra Mundial. Estamos viviendo la Tercera, con la invasión (blanda) de Europa incluida y así lo conocerán las generaciones futuras. Que nos lo reprocharán por no haber sabido defender lo que era nuestro.

Trump cada día que pasa se desentiende más de Europa. Podría anunciarlo en la Cumbre de La Haya. Adiós.

Esa es la razón y no otra por la que Europa está tan nerviosa y exigente en materia de Defensa. No le falta razón, pero lo que es dudoso es que tenga uso de razón para saber enfrentarse a los hechos. Trump lo ha intentado y se ha encontrado con la histórica soberbia europea.

Volvemos a años imborrables de la literatura bélica, pero que  parecen desaparecidos de nuestras vidas reales. El rearme que anuncia Alemania debería ser revisado, analizado y ver si es suyo o compartido. En los temas de la necesaria energía ella negociaba con Rusia y nunca contó con nadie; eso fue uno de los motivos de la guerra actual: las cañerías del gas  se convirtieron en fango.

Europa es la de siempre pero hay actores nuevos que se escoran un tanto hacia Oriente Próximo. La geografía arrastra todo:  la diplomacia, la economía y al final a los ejércitos. Saber geografía es saber de todo. ¿Cómo se sitúa Turquía? No olviden Chipre,

Ahora prima la economía de guerra y la diplomacia se somete a la industria militar, como los ejércitos. No es que nos guste la guerra, sino que la inteligencia artificial  y las redes sociales ya no son suficientes para alimentar a tantos y no hay más remedio que acudir a otras fuentes de financiación y ninguna como la guerra. Es inevitable. Es geografía. Es un tema de recursos. Cada vez es más necesaria la energía que alimente las cabezas vacías del personal aborregado. Todo es geografía, que es demografía.

Quedémonos con ello: demografía: «Cuando el mundo se encuentra sobrecargado de habitantes, el único remedio es la guerra, que provee a cada hombre, ya sea con la victoria o con la muerte» (Leviatan. Hobbes).

Está por ver esa cita decisiva de la OTAN en La Haya y la reacción de Trump. Hay una opacidad absoluta en todo. En la era de la información el mundo está a otra cosa. Todo se lo cree y se me antoja que se ha perdido el control.

¿Quién mató a plena luz del día, en la puerta del colegio de sus hijas, a Andriy Portnov? Así es todo. La lista es interminable. Unos de un lado otros del contrario. De eso se trata. Putinistas, trumpistas, zelenskinistas, izquierdistas, derechistas: borregos desinformados a sueldo. Poco sueldo. Todos opinan. En eso consiste la libertad que nos venden. Saber nada, opinar de todo y aceptar la miseria diaria o mensual. Otros se llenan de guerra y sus muertes solo sirven para mayor diversión de otros, y sobre todo para mantener  el circo entretenidos con la discusión. ¿Quiénes hacen caja?

Étienne de La Boétie escribe, mediados del siglo XVI, Discurso de la servidumbre voluntaria o el contra uno: «Lo único que los hombres no desean es la libertad, y no por otra razón que ésta: porque, si la deseasen, la obtendrían».

No queda duda. La estupidez humana es la guerra, que nos divierte mientras no nos llegue. Pero llega y pronto. No hay generación que de ella se libre.

Empezábamos con el intento de saber que va a pasar con este mundo en guerra. Quien les diga algo profético miente. No hay oráculo posible. Solo algo cierto, muy incierto, que la tercera guerra mundial la tenemos encima y que no hay generación que se libre de la mayor estupidez humana: la guerra. Pero parece ser necesaria. Es pura geografía que se mezcla con la demografía.

Termino con Hobbes: «el día que yo nací, mi madre parió dos gemelos: yo y mi miedo».

¡Mientras quede miedo!, ya ni eso.

Sigan libres y tan siervos. Es la guerra.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

9 junio 2025

 

 

 

 

 

LAS GUERRAS RÁPIDAS Y BARATAS General de División (R.) Vicente Díaz de Villegas y Herrería

La guerra de Afganistán ha quedado refrigerada y sin solución. Recientemente El Mando de las fuerzas OTAN y USA ha sido encomendado a un General Estadounidense.

En el mes de Julio el Presidente Trump decía en Bruselas que estaba abierto a nuevas opciones de intervención pues a pesar de que se van produciendo algunos progresos la guerra está durando mucho, 17 años.

La guerra de Afganistán, experimentó un retroceso en su solución cuando el Presidente Obama cambió el plan de refuerzos y anunció un calendario de retirada que dejaba “vendidos” a los afganos que combaten a los talibanes y ahora también a los del Estado Islámico. Resultado fué la dimisión del General Mac Chrystal. Cabe recordar también  que la política de retirada de las fuerzas USA de Irak dió lugar a la ocupación del gobierno por los chiitas con influencia Iraní y a la desafección de los generales sunitas y al nacimiento y éxito inicial del DAESH o Estado Islámico.

Está claro que los trabajos no pueden dejarse a medias. Las guerras sin empleo de todas las capacidades hasta la derrota total, como la II Guerra Mundial en la que los aliados después de arrasar Alemania la dejaron dividida y ocupada durante 44 años, se alargan y se reproducen.

Una de las opciones que se barajan por parte de EEUU para Afganistán, no es nueva, se trata de un mix de mercenarios y tropas regulares como ya se produjo en Irak con la agencia Blackwater.

El entonces director CEO (Chief Executive Officer-Consejero Delegado),  Eric Prince, un antiguo SEAL es ahora director de la agencia que ha mutado su nombre a Academi y pertenece a un grupo de inversores privados.

Desde su puesto el año pasado ya habría presentado una propuesta para sustituir fuerzas nacionales por personal contratado, mentors.

La oferta de una compañía privada al gobierno de Trump en 2017, a pesar de abaratar costes, no fué aceptada por su equipo de seguridad nacional el Ministro de Defensa General Mattis, el de Asuntos Exteriores Rex Tillerson y el asesor Nacional de Seguridad McMaster.

Aprovechando la salida de McMaster y Tillerson y el desgaste del General Mattis y que parece que el nuevo asesor de seguridad Bolton está abierto a nuevas ideas se va a volver a la carga.

El coste de la respuesta de EEUU al ataque del 11S se calcula en 750.000 millones de dólares, 125.000 millones en reconstrucción y 100.000millones de las operaciones de 2018 y 2019. Total alrededor de un Billón de $. Mil millones a la semana lo que se pude decir que es un triunfo para Bin Laden, al que le habría costado su ataque alrededor de 500.000 dólares.

En resumen las ventajas de la oferta es reducir costes, devolver tropas a casa y eliminar la influencia del vecino Pakistán en la política regional USA.

La misión consistiría en incrustar (embedded) asesores como estructura de apoyo a los mandos de las fuerzas afganas.

La reducción de Fuerzas haría que de 23.000 mas 27.000 “contractors” del Ministerio de Defensa para apoyo se pasara a 6.000 “contractors/mentors” (exmiembros de OEs -60% USA  y 40% OTAN) y 2.000 miembros de Operaciones Especiales nacionales en activo.

Otra ventaja sería evitar las rotaciones de fuerzas con plazos de vuelta grandes y cambios de lugar por rotaciones de 3 meses con 1 mes fuera y vuelta a la misma zona, como con los “expats de las compañías, y así con una duración de 3 años. Cuando las tropas vuelven, tardan años meses o años en volver y cuando lo hacen, algunas veces a diferente lugar, tienen que restablecer las relaciones con el personal afgano y conocer de nuevo itinerarios y amenazas con sus ultimas TTP.

Los costes se reduciría hasta pasar a 5.000 $ millones al año.

Academi dispondría de una flota de Helicópteros y medios aéreos para para MEDEVAC y CAS y ademas de 2 hospitales  de campaña que también tratarían bajas afganas.

Dados los antecedentes de mala reputación de la Compañía en Irak esta manifiesta el propósito en lo referente a responsabilidad que se dirimiría de acuerdo con el Código de Justicia Militar USA y la legislación afgana con un tribunal en Afganistán con jurisdicción sobre los “contarctors/mentors”y las condenas se cumplirían en cada país o en EEUU si así se acepta.

Se dotaría a cada “contractor/mentor”, como se hace con la policía, de una cámara para poder juzgar a posteriori lo apropiado o no de una acción de fuego de acuerdo con las ROEs y el MINDEF USA.

Sobre esta oferta el experimentado General Mattis, ministro de Defensa, consideró que poner la credibilidad de una nación en las manos de una compañía de negocios privada no es una idea brillante. Cientos de miles de tropas durante 17 años dejarían paso a un grupo de negocios.

Es difícil creer que con una tal disminución de fuerzas y sin cambio de Reglas de Enfrentamiento, y sin el apoyo de las capacidades tecnológicas en cantidad, potencia  y calidad de los diferentes servicios nacionales, principalmente USA se consiguieran los mismos efectos.

A esta opinión se suma Seth Jones, antiguo oficial de planes y asesor del mando de OEs en Afganistán y ahora asesor del Centro para la Seguridad Estratégica e Internacional, a quien le preocupa que sea una fuente de corrupción y de disminución en derechos humanos.

En historia de la guerra de guerrillas y  contrainsurgencia desde la II GM los grupos de paramilitares contratados no han contribuido al triunfo de una forma valorable.

La creación de ejércitos particulares nos retrotrae a la época de los guardias suizos o de los laskenetes alemanes que se alquilaban y podían combatirse entre si al estar en bandos diferentes.

El uso de medios aéreos privados apoyo CAS o de RECCE/ISTAR aun en apoyo del gobierno afgano y con ROEs para hacer fuego solo por parte de afganos añade riesgos futuros a la seguridad y no garantiza que no termine como Viet-nam.

Los Soldados, los militares profesionales encuadrados por sus mandos tienen una formación que no va muy de acuerdo con la propuesta de hacer de la guerra un negocio.

Algunos posibles “mentors”se sienten frustrados por sus años de servicio y sus estrechas pagas y retiros, otros quieren seguir por amor al riesgo y aprecio al compañero y otros, aun se sienten útiles y son voluntarios.

Este paso, uno mas allá de la supresión del servicio militar y la constitución de militares profesionales, pretende desentender a los políticos y a la sociedad de los problemas de la guerra, una vez mas en aras del negocio. Se equivocan serán responsables de lo que ocurra, también de las bajas de los “mentors” y de las derivadas de la existencia de ejércitos de alquiler. Recuerden Katanga y los mercenarios en Congo RDC.

Vicente Diaz de Villegas y Herrería

Soldado de España

9/9/18

Blog: generaldavila.com