AL REY DE ESPAÑA NO LO HA ELEGIDO NADIE (PABLO IGLESIAS). GUERRA DECLARADA A ESPAÑA Y A LA MONARQUÍA Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

<<Al Rey de España no lo ha elegido nadie. La extrema derecha últimamente sabe mucho de protocolos. Menos patriotismo de protocolo y más patriotismo de las cosas de comer. Ese patriotismo se llama república>>. <<Menos protocolo y que los fachas nos dejen gobernar>> (Pablo Iglesias Turrión. Secretario general de Podemos).

Sorpresivo es que los que no cumplen la Constitución, y nunca la cumplirán, es decir no aceptan la legalidad democrática votada por los españoles, se atrevan a reivindicar una República que sin duda sería unilateral y dictatorial, con sus normas y leyes, las suyas, y al margen de las urnas como ya estamos comprobando. Si no es así no se entiende la guerra declarada a la monarquía. A no ser, y creo no andar errado, que les moleste que sea la monarquía la máxima defensora de la Ley, su mayor enemigo, junto al pueblo, algo que a ellos les chirría cuando no es su Ley. Además miente(n), Pablo Iglesias porque quien ha elegido al Rey, mayoría más que absoluta, son los mismos que le han elegido a él en absoluta minoría. Son los mismos que han aprobado la Ley, por mayoría más que absoluta, que a él le permite decir lo que dice y que, gracias a él y por culpa de él, lo que nos tememos es que no podamos volver a las urnas, con las que se sienten muy incómodos.

De tú a tú…

Ese es un temor que tenemos. Pero no el único. El temor que también debería invadir nuestra escasa cultura política no solo debe tener origen  en las campañas de interesados personajes que, pagados internacionalmente, solo buscan destruir a España desde dentro y más allá que por dentro. No es solo temor a los que han alcanzado su máxima aspiración: poder influir en las grandes decisiones, hacer que se cumpla su deseo destructor y lavarse como Pilatos las manos, no ganar sino que ganen otros y gracias a los otros poder manejar(los) metiendo (les) la mano (por detrás).

El temor no es la existencia de personajes de dudosa catadura moral e intelectual.

Lo que nos debería preocupar, lo que deberíamos temer es la falta de personajes de talla intelectual, guías intelectuales, que sean capaces de explicar en román paladino lo que ha sido la monarquía y lo que somos; gracias a ella. El gracejo, la fina ironía, el chascarrillo, o la sabiduría comercial de ciertos escritores y columnistas, que defienden la unidad de España desde la monarquía, incluso la república, empieza a demostrarse inútil. Esta es una tarea de largo recorrido que se abandonó antes de iniciarse. Escribía hace unos meses que se echaba en falta una pedagogía de la monarquía. ¿Es que no hay nadie que sepa explicar y contarnos lo que es la monarquía, para qué ha servido y para qué puede servir ante la incertidumbre en la que España se encuentra? ¿Dónde están los escritores, catedráticos, profesores universitarios, doctores, editores, periodistas, historiadores, militares, embajadores…? Hablen de República todo lo que quieran (nunca le faltan guías intelectuales), pero con la verdad, y hablen de Monarquía de igual manera: con la verdad. ¿Es que solo vamos a escuchar rebuznos?

Dejémonos de butades. Ellos están unidos. Los que no quieren a España. Nosotros no.

Ellos han montado un negocio. Nosotros se lo pagamos.

Hay que dar la cara antes de que nos la partan.

¿Alguien está dispuesto a defenderlas?

El que no será el último paso ha sido: El acuerdo. El suscrito entre el Gobierno y Podemos comprometiéndose a modificar los artículos del Código Penal que hacen alusión a los delitos de ofensa a los sentimientos religiosos e injurias a la Corona.

<<Pero sus amigos, que, corrompidos por la riqueza y el boato, querían vivir en adelante entregados a la molicie y la ociosidad, soportaban con disgusto las correrías errantes y las expediciones militares y llegaron así poco a poco a criticarle y a hablar mal de él. Él al principio adoptaba ante esto una actitud sumamente moderada y decía  que la carga de un Rey es hacer bien y oír hablar mal de sí>> (Vidas paralelas. Plutarco: Alejandro-César). ¿Será eso?

Entre todos la mataron y ella sola se murió.

La guerra está declarada. En estos momentos el enemigo a batir es la monarquía y detrás va España. ¿Esta alguien dispuesto a defenderlas?

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

16 octubre 2018