¿DISPONE WAGNER DE ARMAMENTO NUCLEAR? Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

El poder de Wagner era mucho; el poder de Wagner ahora es un misterio muy preocupante, porque su nombre sigue en la guerra y sus posibilidades ignoradas por Occidente. ¿Sabe Putin algo que el mundo desconoce? Su interés en Wagner así parece confirmarlo. En su reciente reunión con Lukashenko, presidente de Bielorrusia, han sido muchas las horas dedicadas a hablar de Wagner, que allí despliega y allí parece que plantea su futuro.

Unas tropas forjadas en la batalla, bien adiestradas y con alta moral, al margen del dinero que perciben, no pueden ser olvidadas ni descuidadas. Hay algo además, desconocido, que las convierte en fuertes y peligrosas hasta para Putin.

Son tropas que cuestan mucho dinero y que un solo hombre no puede manejar.  Algo hay detrás del grupo Wagner que le hace ser poderoso y dominante, capaz de trasladarse de un lugar a otro y transformar su riqueza en dólares o yuanes para pagar sus altas nóminas sin retraso ni siquiera de días. Si no fuese así Wagner habría desparecido tras su intentona de rebelión militar en plena guerra. Detrás de Wagner hay todo un poder, no es Prighozin, sino algo mucho más complejo y peligroso. Alguien creó una fuerza ahora difícil de controlar. ¿Quién está detrás de este poderoso animal guerrero dispuesto a todo, a morir por su organización? ¿Putin? ¿Alguna de las poderosas familias del Kremlin? ¿Es un caballo de Troya?

La historia de fenómenos como Wagner no es nueva y nos llevaría mucho tiempo analizar el pasado de los grupos de poder armados financiados desde la distancia y manejados por naciones ajenas al conflicto. Aparentemente, porque la guerra también es transversal.

¿Qué y quién es Wagner? ¿Dónde reside su poder? Nadie lo sabe.

El arma más poderosa en las guerras modernas se llama disuasión. Entendámoslo bien: «Inducir o mover a alguien a cambiar de opinión o a desistir de un propósito». Fíjense lo que eso significa ante la posibilidad de dirimir las diferencias con una guerra. Si eres capaz de disuadir puedes ganar; si no jamás serás nadie en términos de enfrentamiento.

Wagner, si el Gobierno de Putin hubiese querido, está claro que después del intento rebelde hubiese desaparecido.

¿Por qué ha sido capaz de disuadir a Putin de no someterlos a juicio con su consiguiente desaparición? ¿De qué arma disuasoria dispone? ¿Por qué su despliegue en Bielorrusia?

No hay datos, no hay razones, no hay hipótesis, no hay nada.

Pues algo debe haber y podría ser que lo supiésemos antes de lo esperado.

Armas: ese es el secreto. ¿Está el grupo Wagner en esa dinámica?: armas y secreto. Disuasión.

Bielorrusia es una amenaza desde el comienzo de la invasión de Ucrania. En las hipótesis de aquel momento inicial de la guerra una de las peligrosas era la intervención de Bielorrusia por el norte.

Hasta el acto de rebeldía de Wagner había silencio sobre su actitud y Lukashenko era un personaje casi olvidado. De repente se habló del despliegue de armas nucleares tácticas en su territorio.

Nada hemos vuelto a saber de ese despliegue.

Nada raro sería, a nadie sorprendería, si de repente nos enteramos que esas armas, alguna al menos, llevan tiempo en Bielorrusia y están en poder de Wagner. Eso es disuasión.

Ahora, si así fuese, viene la gran duda: ¿Quién las controla y quién controla al controlador?

Sin duda tienen mucho de lo que hablar Putin y Lukashenko.

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

28 julio 2023

 

 

 

GUERRA EN UCRANIA. PUNTO DE SITUACIÓN General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

«No hay actividad humana alguna que esté en tan constante y general contacto con el azar como la guerra. Con el azar tiene un importante puesto en la guerra lo contingente y con ello la fortuna» (Clausewitz).

Nada de lo que digamos tiene mayor valor. La guerra es imprevisible, aunque la táctica convencional sigue unos métodos y procedimientos ajustados a la misión y situación: terreno, medios, enemigo y ambiente.

Este último factor, clave, del que tan poco se habla, lo definía la Doctrina militar como: «El conjunto de circunstancias de carácter físico y humano, distintas del terreno y de los medios, que influyen en el desarrollo de las operaciones». Es decir casi todo: el azar.

EL PLAN MILITAR DEL EJÉRCITO RUSO EN UCRANIA

En estos momentos Rusia, cuyos fines político-estratégicos serían motivo de otro análisis, ha puesto en marcha un Plan Militar con su propio objetivo estratégico y táctico.

La acción táctica ofensiva sobre el enemigo la desarrolla para afectar a su capacidad de combate e imponer la voluntad propia; todas y cada una, conjuntadas, constituyen acciones decisivas para lograr la victoria.

Muchos analistas se empeñan en decir que Rusia está perdiendo esta guerra y no hay duda que así lo es en el plano del relato, de la ilegal acción emprendida, pero eso nada tiene que ver con el resultado táctico. Podrá en un futuro perder y tener que retroceder, nadie lo sabe, pero desde el punto de vista militar la guerra se desarrolla tal y como parecen haberla planteado sus generales, que nos son tan inútiles como nos quieren enseñar. Mejor es conocer al enemigo y conocerse a uno mismo que manejar mensajes inútiles que socavan la credibilidad y dan falsas expectativas. Conviene saber a qué nos enfrentamos.

Rusia ha lanzado su ofensiva desde su privilegiada posición geográfica, de gran valor y en la que se apoya su planeamiento  táctico. Cualquier Cadete de primer curso de Academia Militar ve cuales son y la importancia de sus ciudades-objetivo junto a  la clara línea del histórico río Dniéper como lugares de decisión a alcanzar. Eso junto a la orilla norte del mar de Azov y mar Negro. Y no retroceder ni un palmo.

Su acción terrestre se desarrolla en varias direcciones de progresión o Ejes de ataque. De norte a sur una es Kiev, ciudad clave para lograr su objetivo estratégico y obtener una posición de dominio a la hora de las negociaciones. Militarmente asediará hasta ver que es lo que más le conviene antes de someterse a una lucha de población, casa a casa, incierta y de enorme desgate moral y físico. Otra dirección está dirigida por el centro, cuyo eje lo marca Járkov, que intenta enlazar con el llamado Eje Azov desde la línea del mar, de sur a norte.  El Eje sobre Donbás apoyará al de Azov y Járkov y, por fin, el Eje de Odesa donde se podría producir un desembarco marítimo.

El Plan hasta ahora se está cumpliendo metódicamente y solo la reorganización, el apoyo logístico y la llegada de las reservas puede retrasar su avance.

EL SUEÑO RUSO: EL MEDITERRÁNEO

Su objetivo es ganar toda la costa del mar Negro (en su búsqueda rotunda: ¡Yallah!) y el este de Ucrania. La ocupación de Kiev será la carta de negociación, donde podría ceder ya que es consciente de la situación que crearía a sus tropas el avispero del oeste de Ucrania, a lo que no estaría dispuesto a enfrentarse, una lucha de guerrillas o permanentes ataques de la insurgencia.

Dominará el mar Mediterráneo, y no habrá Troya que se le resista ni por el norte (el Báltico) ni por el sur (salida al Mediterráneo). Europa atenazada. Es muy sencillo. Del primer curso de Cabo. El Cabo está al mando. Como antaño.

Rusia tiene en contra el flujo logístico necesario para alimentar a sus tropas hasta la estabilización de la ofensiva y consolidación de sus objetivos. Por ello intentará también involucrar sin cortapisas a Bielorrusia. No debemos olvidar así mismo, que en Moldavia mantiene de manera permanente desde hace tiempo un Regimiento paracaidista de tres batallones.

El punto final que se prevé es que Rusia, una vez conquistados sus objetivos terrestres y consolidado su avance, detenga su ofensiva y acepte una negociación en la que impondrá una rigurosa neutralidad de la Ucrania que quede sin ocupar y que Finlandia y Suecia sigan neutrales. Todo ello es muy difícil de conceder, pero peores cosas se han visto a lo largo de la historia.  Eso es todo. Rusia no irá más allá, siempre y cuando le dejen una salida digna para ellos.

Habrá que negociar después; sin olvidar algo tan importante como el Nord Stream 2, declarado en quiebra estos días.

¿PUTIN DERROTADO?

No se monta una acción como la que ha emprendido Putin para ser derrotado y dar marcha atrás. No lo consentirá. Está dispuesto a todo. Es por ello que habrá que darle una salida, una tabla de salvación. «No fuerces a un enemigo que se encuentre en una situación apurada», que podría encontrársela Rusia. Esa es una de sus vulnerabilidades. La tristeza de la batalla ganada.

El relato internacional en su contra, las medidas económicas (son la base de toda la victoria), la pobreza en el interior de Rusia con posibles protestas internas y un Ejército ruso, cansado y con su voluntad de vencer en duda dada la firme oposición internacional y la situación interna de su país, que les afectará, será el enemigo invisible del Putin en guerra. Habrá que dejar una salida al enemigo cercado.

Rusia tendrá que permitir en un primer acuerdo la llegada de ayuda humanitaria, a la reconstrucción y dar garantías de bienestar de los ciudadanos, algo que va a ser muy difícil de conseguir sin someterse a una lucha total por parte de Ucrania.

Sería un precedente muy peligroso permitir que Putin se salga con la suya y no se retire de los territorios ocupados. Nunca lo hará por propia voluntad. ¿Hasta dónde estarán dispuestos a llegar unos y otros? Esa es la cuestión ahora.

Si esto no se detiene a tiempo el coste puede ser tan terrible que mejor no se lo cuento.

El ambiente del que les hablaba es muy tenso y cualquier cosa puede ocurrir.

Desde el punto de vista militar la guerra le va muy bien a Putin. Ucrania sufre las consecuencias de un mundo occidental que habla demasiado, hoy dice una cosa, mañana la contraria. Pero no hace nada.

El instrumento militar no puede estar solo. Falta la acción decidida y fuerte del instrumento social, diplomático, informativo y sobre todo el económico. Son armas que pueden hacer tanto o más que los misiles.

La situación es de enorme gravedad. No debemos permitir que el azar intervenga.

LA AMENAZA DE PUTIN

Amenaza con poner a las fuerzas de disuasión nuclear rusas en «régimen especial de servicio». No debe echarse en saco roto.  Nadie emprende una guerra para ser derrotado.

«La victoria es el principal objetivo de la guerra. Si tarda demasiado en llegar, las armas se embotan y la moral decae. Cuando las tropas ataquen a las ciudades estarán en el límite de sus fuerzas» (Sunzi. El Arte de la Guerra).

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

3 marzo 2022