El artículo publicado ayer en este blog por el Capitán de Navío Ángel Liberal Gibraltar, un pueblo dentro de una base militar, alerta sobre la verdadera razón del interés del Reino Unido por Gibraltar y disecciona el problema para dejar a la vista sus escondidas entrañas y avisarnos de la gravedad de lo que nos esconden. El Gobierno de España, con el ministerio de Asuntos Exteriores a la cabeza, debe ser consciente de su impotencia, aunque pretenda dar la imagen de un éxito en su negociación. La situación y postura del Gobierno español es de extrema gravedad, a todos nos afecta, y debemos conocer y proclamar empezando por el ministerio de Defensa español y nuestras autoridades militares, ¿les importa algo Gibraltar?
Dice el CN Ángel Liberal: «Sabemos que las negociaciones han tenido muchas dificultades. Es posible que todas ellas se deban a la única razón que explica la presencia británica en Gibraltar y es que el Peñón entero es una base militar, con un pueblo de unos 33.000 habitantes en su interior. La militar es la única razón de la presencia británica en el Estrecho, la fundamental, la que prevalece desde 1704».
Llevamos años oyendo decir a los estrategas de salón y ególatras globalistas que Gibraltar no tiene interés estratégico alguno y que deberíamos olvidarnos de la colonia y negociar con los británicos (lo que desean es una entrega incondicional de lo robado).
El caso es que Gibraltar es una base militar —hablando claro: exclusivamente militar — escondida detrás de un pueblo como muy bien nos argumenta Liberal—. ¿Cómo se entiende que esto ocurra entre aliados en lo militar y concepto estratégico de la defensa? Solo hay una respuesta: no se fían de nosotros. ¿El Reino Unido? No solo. El problema es que los que no se fían son ellos y el gigante estadounidense, ese que mira ahora también hacia Marruecos para instalar sus bases y completar el dominio de ese Estrecho sin importancia según los espléndidos analistas. Base logística. Muelles para atraque de submarinos nucleares. Espionaje. Control del Mediterráneo. Cosas de una situación geográfica privilegiada.
Mientras salta la pregunta retórica: ¿Para qué querrán ese trozo de roca?
Ese es el problema en su profundidad. Un problema político y militar (subrayemos esto último) en el que hay exclusividad y Europa no juega, ¿España? ¿Pero existe España? Significado: España política y militarmente queda a los pies de los caballos. Políticamente no es de extrañar, no somos ejemplo de nada ni para nadie, sino todo lo contrario. Débiles y erráticos. En lo militar me duele en lo hondo porque además somos mucho mejores soldados que británicos y estadounidenses. Mucho mejores.
La política: un Gobierno, el nuestro, sin firmeza, sin política exterior, y sin nivel de respuesta que permite que se rían de él y de sus Fuerzas Armadas. Lo militar: nuestros ejércitos por lo que se ve no sirven para defender el sur de Europa, pero sí para desplegarse en la frontera con Rusia o desplegar nuestros misiles en Turquía.
Esto de las alianzas militares ha terminado en Europa. La OTAN ¿Cuántas divisiones tiene la OTAN? Preguntaba el ruso.
Años de engaño británico. Se diluirán estos primeros coletazos, el control está por ver (¿control del puerto y aeropuerto?). En nada volverá el contrabando, los submarinos nucleares seguirán entrando y las antenas al viento seguirán practicando el espionaje.
La imagen exclusiva que nos ofrece el Capitán de Navío Liberal, debería hacer temblar a propios y extraños. ¿Qué es Gibraltar?: un polvorín a los pies de España, un mundo a nuestras espaldas repleto de aviones militares que van y vienen, submarinos, depósitos de armamento y munición, espionaje llamado Inteligencia. ¿Para quién (es)?
Nuestros ejércitos seguirán paseándose por el mundo mientras otros apoyan el robo de un trozo de España en un clamoroso (vergonzante) silencio. Digno de escándalo. ¿Cuál será la siguiente entrega?
¡Qué vienen los rusos! ¡Pero si ya hemos entregado las armas! Vendrán los otros. Por el sur. En pacífica marcha, verde, azul o amarilla.
¡Ay el Brexit! ¡Cuánto tiene que aprender esta Europa en la que España se sitúa en su frontera sur (la del ajo); allí donde Gibraltar.
De vez en cuando conviene mirar el mapa porque la política cambia, no la geografía.
Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)
Blog: generaldavila.com
4 enero 2021