No sé nada del CNI. Si lo supiese no sería el CNI. Algunos tiemblan porque un tal Iglesias, ahora vicepresidente de un Gobierno tan extraño como desgobierno, tras forzar la ley, pase a formar parte de la Comisión Delegada del Gobierno para Asuntos de Inteligencia, es decir, el órgano que controla todos y cada uno de los llamados secretos de Estado.
Me pregunto y me preguntan que cómo se puede cometer esa barbaridad. Contesto: peor es que sea vicepresidente y que forme parte del Gobierno. ¡Ah! Ustedes lo han querido así que a digerirlo.
En mi humilde opinión, y sin saber nada, que no sea lo que supongo, el vicepresidente que <<España no se merece como vicepresidente controlando el CNI>> en palabras del que ahora le aúpa -el miedo es libre-, no se va a enterar de nada. El CNI es muy suyo, muy ce-ene-i, y allí no se trata nada sobre los <<Derechos Sociales y Agenda 2030>> que es el mote de esa vicepresidencia. Lo que allí se trata, en ocasiones, no lo sabe ni el que lo trata. Por eso es Inteligencia. La información sin digerir, procesar y convertir, no es nada más que cotilleo.
Uno suele saber de sí mismo menos de lo que los demás creen saber de uno. No somos lo que somos sino lo que dicen que somos. Te sorprende lo que otros saben. El vicepresidente lo primero que querrá saber es lo que de él se sabe. No busca inteligencia sino información sensible y personal, de grupo, de casta, y protegerse. Pero de eso no hay nada en el CNI.
-A ver, entréguenme mi ficha.
Una cosa es la Inteligencia y otra el cotilleo. Lo malo es que, de la vulgaridad depende, hace más daño lo segundo, cuando convertimos la política en un tema de grupo, de casta y no de Estado.
Hay que tener cuidado y la preocupación es grande. Porque habrá algo más que cotilleo. Y aquí es donde entra el verdadero peligro. Este vice no es un vice cualquiera. Sus conexiones se conocen, quizá poco, sus antecedentes van a poner en alerta a otros servicios de inteligencia que cortarán el flujo antes de que los papeles, que proporcionan asiduamente, se conviertan en cromos para el intercambio, o en algo peor. ¿Quién se fía?
Con lo que concluimos que << España no se merece a Iglesias como vicepresidente controlando el CNI>> era antes y ya no es, así que el problema es que no se puede uno fiar ni de vicepresidente ni de presidente.
Conclusión definitiva: ¿El vicepresidente para los Derechos Sociales y Agenda 2030 controlando el CNI? No veo nada que sea peor que ostentar la vicepresidencia, siamesa con la Presidencia. Tanto monta, monta tanto.
Confío en el CNI. Pero sus agentes van a tener difícil su labor a partir de ahora.
Solo como recordatorio cito la Ley Orgánica 5/2005, de 17 de noviembre, de la Defensa Nacional.
CAPÍTULO III
Centro Nacional de Inteligencia
Artículo 26. Centro Nacional de Inteligencia. El Centro Nacional de Inteligencia contribuirá a la obtención, evaluación e interpretación de la información necesaria para prevenir y evitar riesgos o amenazas que afecten a la independencia e integridad de España, a los intereses nacionales y a la estabilidad del Estado de Derecho y sus instituciones.
Ayer infame mesa de negociación con los golpistas. Todo controlado. Tan controlado y claro que se entiende todo. No más explicaciones.
General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez
Blog: generaldavila.com
1 marzo 2020