SUBVERTIR DESDE LA LEGALIDAD. Rafael Dávila Álvarez

Un partido político no es la Patria, nada que ver con el concepto histórico de la nación, nada que represente a España en su totalidad. España está representada por sus símbolos y los demás hacemos lo que podemos para estar lo más acorde posible con lo que la Nación nos exige como españoles. Para defender el modelo más cercano a nuestras ideas de conjunto (políticas, económicas, históricas, sociales…) nos reunimos en partidos políticos y sin necesidad de formar parte de ellos los votamos, o no votamos. Sobre todo cuando no hay otra solución. Este es un concepto que hay que aclarar. Tan democrático es votar como no hacerlo, pero hay circunstancias como las actuales en que casi podríamos concluir que es obligado hacerlo porque hay partidos políticos que se presentan para acabar con España, con su unidad, su integridad territorial y su soberanía. Resulta que eso, ahora, está permitido y además muy cerca de hacerse realidad. El primer síntoma se hizo evidente cuando unos cuantos, que hoy se agrupan alrededor de un partido político, mataban para conseguir sus fines: atemorizar, ser dueños de vidas y hacienda bajo la dictadura de la pistola y las bombas (aún hoy muchos de esos asesinos andan libres sin haber sido juzgados e incluso forman parte de la dirección de un partido político).

Más tarde, en 2017, se vivió un proceso independentista que tuvo que ser intervenido con la aplicación de medidas constitucionales graves y que puso en serio peligro el orden constitucional y el orden público en parte de España. El siguiente paso, aún de mayor gravedad, fue que el partido ganador de las elecciones, el PSOE de Pedro Sánchez, les indultó, les permitió salir de la cárcel y cambió la ley para que vuelvan a hacerlo.

Pues esa es la situación porque de los tres partidos que he hablado los tres se presentan a las elecciones.

Hay cosas que no te puedes permitir por muchas elecciones que ganes y mayorías que obtengas.

Todo es admisible en política menos subvertir la Ley que es el equivalente a romper España legalmente. El oxímoron político. En España a día de hoy no es tal.  ¿Se puede hacer? En España todo es posible. Mentir y engañar es el modo de hacer política en muchos grupos que dicen hacer política cuando lo que hacen es poner en marcha el mecanismo que conduce a la destrucción de la unidad e integridad territorial de España. Lo dicen con descaro y provocación: «La sedición y los indultos a los condenados por el procès son herramientas que nos sirven para volver a intentar conseguir la independencia». Lo harán y además desde las instituciones que les amparan; solo un paso más y será legal declararse independiente sin que nada ni nadie pueda hacer ni decir. La Constitución saltará por los aires con el dictamen a favor del Constitucional.

Vivimos en el colmo de la subversión: subvertir es legal. Solo hay que tener mayoría y engañar con eso del progresismo y la democracia: ambos conceptos convertidos e interpretados como códigos morales subvertidos.

En definitiva hay partidos políticos que utilizan sus votos para subvertir el orden, otros que proceden de la mismísima subversión violenta que costó cerca de mil asesinatos en España y hay partidos políticos que gobiernan con esos apoyos y son su apoyo.

Que nadie ose suplantar el concepto nación porque todos, sin diferencias, somos españoles de España, pensemos lo que pensemos. Pensar distinto no te hace ser más o menos español. Se puede amar a España sin necesidad de creerte ser el que más la ama y que el que no comparte tus ideas la ama menos que tu. España no necesita un ranking de amor sino simplemente amor, trabajar por ella, por su grandeza.

Lo que no se puede admitir, ni votar, es acabar con la unidad de España, su integridad territorial, soberanía y el respeto a su Constitución.

¿Qué nos exige la nación? Únicamente que respetemos la Ley que nos hemos dado y que no utilicemos las falsas mayorías para acabar con la nación y luego decir que no, que fueron otros. La Ley se cumple y no solo se juzga al incumplidor cuando lo hace con violencia, sino siempre que la incumple; ni es admisible cambiar la Ley o interpretarla a gusto de las falsas mayorías.

Nadie representa a la nación, ningún partido político. Los símbolos del Estado español son: la Bandera, el Escudo, el Himno Nacional. Y es La Corona el símbolo histórico de unidad y la encarnación de un pueblo. No podemos permitir que nuestra Ley se convierta en un elemento permanente de discusión y lucha entre partidos y que en ellos se deposite la semilla para la destrucción de la nación: España.

Subvertir no es un verbo democrático. Votar sí.

No está de más reflexionar.

Somos muchos, pero separados parecemos pocos y mal avenidos mientras otros, que son menos, aprietan sus filas para siendo minoría aguantar más. Y ganar.

Rafael Dávila Álvarez  

Blog: generaldavila.com

17 julio 2023

NUEVO JEFE DE ESTADO MAYOR DE LA DEFENSA General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Tenemos nuevo Jefe de Estado Mayor de la Defensa: General del Aire Miguel Ángel Villarroya. Significa esperanza y continuidad en la labor profunda y eficaz de su antecesor el general de Ejército Fernando Alejandre.

El equipo está ahí y la preparación tanto suya como de sus colaboradores es excelente.

No existe el menor atisbo de duda en el cumplimiento de su misión en el seno de las Fuerzas Armadas. No hay palabras hueras entre los soldados sino hechos contrastados desde hace muchos años. Ninguna Institución ha sabido interpretar, asumir y cumplir la Constitución como los ejércitos de España.

Dicho esto, que es incuestionable, conviene leer con detenimiento -y conocer el paño- para interpretar las palabras del JEMAD saliente, general Alejandre y del entrante general Villarroya por las coincidencias en asuntos de gravedad y sumo interés.

El general Alejandre en sus palabras de despedida a sus compañeros envía el siguiente mensaje: <<Dejadme que con mi abrazo final os pida que apoyéis a quien tome mi relevo con la misma ilusión y lealtad y que os exhorte a seguir defendiendo a su Majestad el Rey y a nuestra Patria>>.

El general Villarroya ha recordado la misión de las Fuerzas Armadas de garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional, tal y como establece el artículo 8 de la Constitución, además de referirse a la <<inquebrantable lealtad al Rey y a la Institución a la que representa>>.

Coincidencia necesaria por el momento que vivimos sin duda: Rey, Monarquía, Constitución. Unidad de España. No están exentas de incierto futuro.

El JEMAD saliente y el entrante señalan la dirección correcta, la de la Seguridad necesaria para España y su integridad territorial, el cumplimiento del ordenamiento constitucional.

Llama la atención, lo que corrobora mi planteamiento, que hasta la ministra de Defensa, Margarita Robles, ha seguido la misma línea: <<tenemos un futuro lleno de esperanza y de retos que tenemos que afrontar bajo el mando de nuestro jefe del Estado, el Rey, a quién admiramos profundamente y respetamos>>.

Hasta ha llegado a decir que <<la Constitución está más fuerte que nunca>>. La ministra ha apuntado que continuarán con su labor de trabajar por España y en defensa de la Constitución, aunque ha señalado que la Constitución <<no necesita ninguna defensa especial. Está más fuerte que nunca, 40 años son la edad ideal y puede cumplir otros 140 más>>.

Pues nos queda la duda señora ministra de Defensa.

Lo expresado por JEMAD entrante y saliente  es la preocupación de millones de españoles por algo tan concreto como la unidad de España, su integridad territorial y la Monarquía. Esa preocupación la genera su Gobierno, socialista-comunista, que de entrada coquetea con los separatistas y que gracias a ellos usted es ministra de Defensa. ¡¿Dice que la Constitución está más fuerte que nunca!?

Nada me ha dado a conocer estos misterios de la palabra. Solo veo y compruebo los hechos que son los que hablan.

Mi general, te deseo muchos éxitos y firmeza; como magnífico aviador que eres ya sabes: <<Vista, suerte y al toro>>.

Es necesario modernizar el IFF.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

20 enero 2020

 

‹‹EL EJÉRCITO TIENE LA MISIÓN DE GARANTIZAR LA SOBERANÍA DE ESPAÑA Y SU INTEGRIDAD TERRITORIAL›› Rafael Dávila Álvarez General de División (R.)

La ministra de Defensa recuerda la misión de las Fuerzas Armadas

-¡Aleluya! Pensé que recordar la Constitución era un grave pecado.

-¿Cómo interpreta usted lo que ha dicho la ministra y por qué lo ha dicho?

-Que la ministra de Defensa diga lo que ha dicho en unos momentos especialmente delicados para la unidad de España no es una cuestión baladí. El momento es tan grave que el líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha salido de su audiencia en Zarzuela diciendo haber visto al Rey preocupado por la situación de Cataluña. No es para menos. Hoy daban un paso más los independentistas en su enfrentamiento que de seguir así y no cortarse a tiempo -en esa situación estamos- nos costará ni más ni menos que eso: romper con la soberanía nacional y su integridad territorial. Explíqueme como damos luego marcha atrás o qué hacemos el día que el Parlamento Catalán lea el Acta de declaración de independencia. La situación es muy grave y las palabras de la ministra están meditadas y graduadas.

-¿Es según deduzco de sus palabras una amenaza?

-No. Eso es imposible. La ministra se ha limitado a leer la Ley. Entre soldados no hay amenazas y menos cuando no hay enemigo.

-¿Qué quiere usted decir? ¿A qué viene recordar que el Ejército tiene la misión de garantizar la soberanía de España y su integridad territorial cuando es algo que todos sabemos?

-Pregúntele a la ministra, pero mire, a mi me suena a que está muy ligado a la propuesta independentista. Además no lo he dicho yo. Ha sido la ministra. Nosotros los soldados leemos y cumplimos, pero no hablamos. Decir lo que la ministra ha dicho le ha costado a más de uno un grave disgusto.

-Pues lo dicho por la ministra a mí me suena a amenaza.

-Supongo que la ministra de Defensa ya conoce a los soldados y algo habrá aprendido de su lenguaje. Los militares no amenazan nunca. Si acaso utilizan la disuasión antes de llegar al enfrentamiento.

– O sea que las palabras de la ministra son un acto disuasorio.

Exministros de Defensa hoy en el ministerio

-Pues mire no lo sé. Ni el Constitucional logra disuadirles así que no sé qué decirle. Lo que sí le digo es que a mí me han gustado. Ha estado mejor que muchos de los exministros que, alguno con descaro, se han dejado ver hoy por el ministerio de Defensa.

-¿Las palabras de la ministra serán cosa suya o le habrán hecho el encarguito?

-Pues tampoco lo sé. El caso es que muy de acuerdo todo el Gobierno no debe estar porque entre los que estrenan el cargo de exministros ponen a caldo a los que fueron sus compañeros de Consejo de Ministros. Entre ellos debe haber pareceres distintos… Incluso enfrentados.

-¿Entonces ustedes los militares cuando leen la Constitución se saltan el Preámbulo para evitar que les pillen leyendo el artículo 2 o sobre todo el 8?

-Mire hablemos en serio. Se dice muchas tonterías en este siglo XXI sobre los militares como si se hablase de espadones trasnochados. Aquí la única asonada que hoy se percibe cercana ya sabe dónde está y quienes la protagonizan.

Juramento a la Bandera

No se confunda. Leemos, sabemos, y estamos, como cualquier otro ciudadano, muy preocupados. Nuestra ministra es la que ha dicho lo que ha dicho y por algo será. Si a algo es sensible un militar es a la unidad de España, su misión fundamental. Forma parte de la Ley y de su juramento ante la Bandera. Conocemos las leyes y las cumplimos sin interpretaciones que otros pretenden interpretar por nosotros. ¡No! Un soldado es rigurosamente cumplidor y sabe que al Presidente del Gobierno le corresponde la dirección de la política de defensa y la determinación de sus objetivos, la gestión de las situaciones de crisis que afecten a la defensa y la dirección estratégica de las operaciones militares en caso de uso de la fuerza y que la ministra dirige la actuación de las Fuerzas Armadas bajo la autoridad del Presidente del Gobierno y determina y ejecuta la política militar.

Este es un Ejército leal, fiel y cumplidor. No todos pueden decir lo mismo. Quizá a eso se refería la ministra de Defensa.

-Pues me deja usted más tranquilo.

-Pues no entiendo por qué me dice usted eso. Yo sigo muy preocupado. Como el Rey. Y es que no es para menos.

Por Tierra, Mar y Aire. El Ejército tiene la misión de garantizar la soberanía de España y su integridad territorial

Rafael Dávila Álvarez General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

5 julio 2017