«El compromiso con España permanece vivo en mi corazón, con la satisfacción del deber cumplido».
Homenaje de las Reales Academias a SM. El Rey Don Juan Carlos con motivo de su 80 cumpleaños. Con él, la Reina Doña Sofía que recibía ese afecto que le guarda España. Un acto sencillo, muy cariñoso, cargado de simbolismo y sensibilidad. No ha querido el Rey ser el protagonista y ha devuelto el homenaje a quien él siente como protagonista de su reinado: el pueblo español.
La historia se construye desde el desagradecimiento. También las frustradas ambiciones, cuando son innobles, dejan rencores escritos en almas débiles que buscan la traición en cuanto se les presenta la más mínima oportunidad. Larga lista de desagradecidos… Mejor pasar página.
El reconocimiento a la labor del Rey en el periodo más largo de paz y progreso de la historia de España empezó este año, el de su 80 cumpleaños, en la Pascua Militar, con sus soldados. Ha seguido en la Real Academia de la Historia, junto a todas las Reales Academias: “El reinado de Juan Carlos I fue un gran momento de la historia española”.
El Rey permanece intacto en su reinado por y para España. En las páginas de la historia está reluciente y diáfano.
Este lunes pasado el Rey Don Juan Carlos recibía el homenaje a su esfuerzo dedicación y buen hacer. Mucho hay que agradecer. Se le notaba alegre al Rey. Era el Rey que yo conozco, con su gesto de siempre, el del Rey que día a día he visto afanarse buscando lo mejor, lo justo, equitativo y saludable. Incansable, animoso, alegre, dispuesto y acertado. Enormemente justo y cariñoso, sin empalagos, sin afecciones, con fuerza, coraje y siempre en su lugar. El de Rey de España que fue.
El protagonista ha sido el pueblo español
El Rey inteligente y sensible ha sabido darle la vuelta a su merecido homenaje: “Fueron muchos los que contribuyeron al cambio histórico, pero el verdadero protagonista ha sido, en realidad, el pueblo español”. En sus palabras señala donde está la razón de su reinado, su labor y el porqué de su merecido homenaje. No hay otro que el pueblo español, su España querida; más allá de su labor, de su esfuerzo y de su cumpleaños. El pueblo español ha sido con quien ha reinado y quien le ha seguido en su reinado. Y digan lo que digan, escriban lo que escriban, desagradecidos y frustrados de aviesas intenciones…, el pueblo español quiere a su Rey y a su Reina, Don Juan Carlos y Doña Sofía.
Servir al honor de la Nación es el lema de las Reales Academias. El del Rey ha sido siempre único, un compromiso cumplido: España. Subordinar la honrada ambición a la íntima satisfacción del deber cumplido es su mayor recompensa, la de soldado y la de Rey.
Los Reyes presidieron este martes el concierto en homenaje a las Víctimas del terrorismo y el viernes el Rey viajará a Chile en representación de España en la investidura del presidente chileno, Sebastián Piñera, que tendrá lugar el próximo día 11 en la sede del Congreso en Santiago de Chile.
En buena forma y sirviendo a España. Como siempre.
¡Gracias Majestad!
Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)
8 marzo 2018
Blog generaldavila.com
«La historia se construye desde el desagradecimiento.
También las frustradas ambiciones, cuando son innobles, dejan rencores escritos en almas débiles que buscan la traición en cuanto en cuanto se les presenta la más mínima oportunidad. Larga lista de desagradecidos…. Mejor pasar página»
Magníficas y certeras palabras mi general… que debería acuñar la Fundación Nacional Francisco Franco.
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Si se explica usted…
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A las órdenes de V.E., mi General.
Gran tema el de este articulo. Y expuesto con toda la lealtad y honestidad que Su Majestad merece. Fueron difíciles, y hasta dramáticas, las circunstancias en que tuvo que hacer el relevo. La enfermedad ya irreversible y la muerte del Caudillo, el acoso imparable y despiadado de una izquierda revanchista y sedienta de desquite que exigía ruptura a toda costa y ponía condiciones muy atrevidas para colaborar o al menos no impedir unas reformas que era imprescindible hacer en paz. No tengo la menor duda de que el propósito del Rey era el de dar a todos la oportunidad de participar en el gran trabajo que ya se venía haciendo desde muchos años antes para el mayor engrandecimiento y gloria de España. Y sí, pareció que en en un principio se conseguía una intente cordiale. Pero los enemigos de España, una vez conseguido el primer objetivo de hacerse con las instituciones del estado, con el concurso impagable de algún que otro traidor, fueron imponiendo a marchas forzadas una ruptura de facto y el comienzo de una campaña, primero subliminal y después descarada, de desprestigio y destrucción de lo anterior. Nadie era capaz de resolver o controlar el problema del terrorismo, y las cosas se estaban yendo de las manos. Hasta que llegó el año ochenta y uno, y todos sabemos lo que ocurrió, eso de que en última instancia siempre hay un pelotón de soldados que dan la vida y la carrera para salvar a toda la nación cuando los poderes establecidos se muestran incapaces e impotentes. Y es que nadie parecía darse por enterado de que muerto a muerto, España se estaba desangrando, y hasta al mismo Rey se le preparaban atentados.
Por si no era suficientemente compleja la situación interior, Un oportunista y falso amigo nos hacía la vida imposible desde la vecindad hasta arrancarnos sencillamente robado, un territorio y unos legítimos intereses, tensando la cuerda hasta ponernos al borde de una guerra. Recuerdo aquel vuelo al corazón mismo del conflicto exclusivamente para hablar a los militares que guarnecían aquel territorio y llevarles esperanza y calor humano.
Sí, sobre todo en lo político, que no en lo militar, el Rey Juan Carlos I ha sido objeto de mucho desagradecimiento por parte de quienes más le debían. Pero así son las cosas y siempre ocurre igual.
¡¡¡VIVA ESPAÑA!!!,
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Un saludo cordial y gracias
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Gracias doña Josefa
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Juan Carlos I, Rey.
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