MADRID: LA ALCALDÍA DE ESPAÑA. Rafael Dávila Álvarez

 

Guste o disguste la Comunidad de Madrid viene a ser la alcaldía de España. Es por lo que el presidente del Gobierno ha irrumpido en la campaña electoral como si en ello le fuese la presidencia. Seguramente hace bien porque le va. Ser o no ser, aunque nada sea, ostenta el cargo y eso engancha.

Claro que para que esa Comunidad o alcaldía sea roja, roja, además del color y las estrellitas, sería necesaria una solvencia intelectual para cuidar de todos y de todo, incluso de la vacunación. Cuando no la hay el caso llega hasta al fútbol y cada cual hace lo que le viene en gana, que puede que te vacunen, o no, o que el Real Madrid y el Barcelona jueguen una liga entre ellos y den entrada al Atlético de Madrid y formen la unidad del fútbol mundial sin autonomías ni independencia que todo sea por dinero. Vacunas les sobran, así que son los amos.

Entonces quedamos que la solvencia no está en el palacio de la Carrera de San Jerónimo sino entre Florentino, Laporta y Cerezo. Acabáramos.

De solvencias hemos hablado y queda por hablar. La de la alcaldía de España debería evitar casos como estos que les planteo.

1.- SOLVENCIA INTELECTUAL

Contaba el Almirante Manuel Manso Quijano que siendo Jefe del Cuarto Militar de la Casa de SM. el Rey coincidía, en las cenas que el Rey ofrece a los Jefes de Estado extranjeros en su visita oficial a España, con el entonces Alcalde de Madrid, el profesor Enrique Tierno Galván. El protocolo les hacía sentarse juntos en la mesa y siempre, antes de ocupar asiento, el Alcalde se dirigía al Almirante con idéntica pregunta:

– Almirante, usted que tiene buena vista, ¿podría leer los cartelitos y decirme cual es mi lugar en la mesa?

El Almirante con esmerada educación le señalaba el lugar.

– Alcalde este es su sitio; como en otras ocasiones estamos sentados uno al lado del otro.

Una vez sentados, contaba el Almirante, el alcalde repetía cena tras cena el mismo comentario que ninguna gracia hacía al insigne marino.

– Almirante, es que de tanto leer he perdido mucha vista y me cuesta ver estos dichosos cartelitos que ponen con nuestro nombre en la mesa. Usted que ha tenido siempre su mirada puesta en el mar conserva mejor vista que yo.

De la misma edad, eran dos personas cultas, educadas y con gran formación intelectual. Pero claro, no todas las noches son iguales y no todos los días se recibe la ironía con el mismo fino sentido del humor. Sin perder ni lo uno ni lo otro, una de aquellas noches el Almirante tiró de bastón de mando y horas de navegación. Después de señalar al prócer de Madrid su lugar en la mesa no pudo mantenerse en silencio por más tiempo.

– Alcalde, mire usted, yo he navegado mucho, por muchos y distintos mares, unos en calma y otros procelosos, pero le aseguro que he navegado muchas más horas por libros y bibliotecas y si conservo buena vista es gracias a estas gafas bien graduadas y no por no haber leído y estudiado.

Nunca más volvió el alcalde a hacer gala de su nivel de lectura ni de su escasa visión y siempre quedó entre ambos gran respeto y una buena amistad.

Solvencia intelectual.

2.- ALGO MÁS QUE SOLVENCIA INTELECTUAL

Con frecuencia Franco pescaba salmones en un pueblecito del interior de Lugo. Recibido por el alcalde como única autoridad, este le acompañaba hasta la orilla del río donde esperaba el guarda fluvial. En este corto recorrido en una ocasión Franco preguntó al alcalde por las cosas del pueblo y sus necesidades.

– Alcalde ¿hay algo especialmente necesario para su pueblo?

– Pues verá Excelencia, lo que más falta nos hace es una prostituta nueva porque la que tenemos está ya muy mayor. Hasta los niños se ríen de ella.

La conversación escuchada por los escasos acompañantes produjo espanto y temor, pero Franco ni se inmutó. El listillo de turno se acercó sigilosamente al Caudillo para decirle el error que cometía el alcalde debido a su escasa «instrucción».

– Perdónele Excelencia pero el alcalde se refiere a la necesidad de una sustituta de la maestra que debería haberse jubilado ya y ahí sigue, faltando muchos días a clase por sus continuos achaques.

Cuando al año siguiente Franco volvió al lugar, se dirigió al alcalde con una amplia sonrisa.

– ¡¿Qué Alcalde!, ¿recibió pronto a la nueva prostituta?!

– Perdón Excelencia, recibimos pronto a la nueva maestra. He de confesarle que sabía muy bien lo que le decía. Lo de la prostituta en lugar de la sustituta era para que Su Excelencia no se olvidase de la petición. Le pido disculpas y haga conmigo lo que quiera.

– ¿Quiere usted ser Gobernador Civil de Lugo?

Fue la respuesta del Caudillo.

Solvencia intelectual sin necesidad de universidad.

3.- INSOLVENCIA. ALCALDADA CONSENTIDA

Aunque dediqué un amplio artículo al tema no puedo ni quiero, al hablar de alcaldes y alcaldadas, dejar de recordar al que fue alcalde de Barcelona, Javier Trias, que se negó a que su ciudad acogiese la ceremonia de entrega de la Bandera de Combate al buque insignia de la Armada española como tradicionalmente siempre se ha hecho. La madrina: SM. la Reina Doña Sofía. El buque: el Juan Carlos I”.

Insolvencia sin más y no sé como definir al que tal chulería (dicho o hecho jactancioso) permitió. ¿Quién es el alcalde para prohibir un acto de singulares características en el puerto de Barcelona?

Alcaldada consentida acompañada de dejación de funciones.

4.- EL ALCALDE QUE ADMIRA AL CHE GUEVARA

Oleiros es un municipio de La Coruña donde reside gente adinerada, dicen que el que tiene más ricos por metro cuadrado en España. Precioso lugar donde los vecinos (nadie es de allí pero todo Coruña vive allí) hablan muy bien de su alcalde al que llevan votando varias legislaturas sin fijarse mucho en la ideología que vende. Hablando con los que allí viven descubrí las razones del éxito. Servicios impecables, colegios, limpieza, atención sanitaria, playas… y ¡por fin!, lo mejor y quizá la secreta razón de su éxito: una gran rotonda (el alcalde que no hace rotondas coronadas por un bodrio no es nadie) con una gigantesca imagen del Che Guevara inaugurada, no sin polémica, por su hijo. Los vecinos de Oleiros que, repito, en su mayoría no son oleirenses, presumen de alcalde y de rotonda, aunque dudo que alguno de ellos entienda porqué hay una avenida y rotonda con monumento incluido dedicados al Ché Guevara. Yo tampoco ¿Sería el Ché pescador de salmones en Oleiros? La cercanía al Pazo de Meirás hace que todo sea posible, incluso me atrevo a adivinar que este magnífico y singular alcalde en otros tiempos hubiese sido gobernador civil de Lugo.

¿Qué razones históricas habrá para enlazar la historia de Oleiros con el Ché?

¡Ay, si yo fuera rico!… haría escaleras que no llevasen a ningún lado. Presumir de originalidad.

En este caso puede ser que el insolvente intelectual sea yo al no entender las razones de un alcalde tan querido por sus votantes de derechas.

En fin, que ustedes lo voten bien y no olviden aquello: «Vístanme -dijo Sancho- como quisieren, que de cualquier manera que vaya vestido seré Sancho Panza».

Rafael Dávila Álvarez

21 abril 2021

Blog: generaldavila.com

VISUS MILITIS (General Emilio Pérez Alamán)

    26 de junio de 2016                            

AÚN QUEDA MUCHA ESPAÑA

Durante esta última semana de campaña electoral, el soldado ha iniciado su servicio de ronda por donde no llegan los mítines en vivo de los mendicantes de votos.

Para ello ha recorrido una importante parte de los pueblos rurales del antiguo Reino de León y de Castilla la Vieja, incluidos los de la montañuca que la abren hacia mar en el puerto de Santander..

Flag of Spain

Flag of Spain

Esta  experiencia que se pierden las caravanas electorales es la muestra de su desconocimiento de la realidad nacional y de que su única obsesión son los números y no sus razones

Pese a la tecnología invasiva de la televisión, el sentimiento de “patria chica” y a través de ella de su Patria común, forma parte de la cultura de  tradición oral de estos españoles que, pese a su gran número y calidad, son ignorados por sus dirigentes, cuando no ninguneados como en las municipales de 1931 en las que los “espavilaos” de la capital les “virlaron” su voluntad (como le cuentan al soldado).

La realidad es que son muchos los españoles unidos a su terruño que, a través de la comunicación comunitaria familiar y vecinal, independientemente de la transformación social de los tiempos, mantienen la esencia de la Historia de su pueblo, su Región y su identidad nacional por la que tantos familiares, cercanos y lejanos, lo entregaron todo.

Sin embargo, por  la desigualdad de ese mismo desarrollo, se observa en ellos una importante resignación, que si se activara en una concentración de resignados, la Tierra de Campos se quedaría pequeña. Nada que ver con la de los “indignados” que salvo de porquería no lograron llenar la Puerta del Sol de Madrid y menos aún las plazas de las otras ciudades capitalinas.

Solo esa resignación colectiva, bien inoculada por quienes no aprecian ni practican sus valores, impide comprobar que, por mucho que pretendan cambiarla o reformarla

¡Aún  queda mucha España! 

Emilio Pérez Alamán Teniente General (R.) 

VISUS MILITIS Domingo 19 de junio 2016 «LA UNIDAD DE ESPAÑA»

19 de Junio de 2016

firmas

Por España. Todo por España

LA UNIDAD DE ESPAÑA

Estamos en plena campaña electoral. Se analizan los mensajes. Cada uno busca el que más le interesa, individual o colectivamente.

A los soldados solo les interesa el mensaje que hable de España y su unidad. Es la misión que la Constitución les otorga:

‹‹Garantizar la soberanía e independencia de España, defender su integridad territorial y el ordenamiento constitucional››.

Es además el juramento a la Bandera: «¡Soldados! ¿Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor cumplir fielmente vuestras obligaciones militares, guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, obedecer y respetar al Rey y a vuestros jefes, no abandonarlos nunca y, si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?».

Debates, generalidades, lugares comunes. España al margen. ¿Defenderá con rotundidad alguien la unidad de España?¿Cumplirá y hará cumplir la Ley? Queremos oírlo.

Expectantes y preocupados.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez