JURAR BANDERA EN NAVIDAD. General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

JURAR BANDERA EN NAVIDAD. General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Las redes sociales me proporcionan mucha y buena información. Un excelente barómetro que señala la temperatura y la presión bajo la cual vivimos.

Recojo hoy una magnífica sugerencia que a través del blog me remite un amable lector.

Me hace ver que en estas fechas navideñas es mucha la gente que viene de lejanos lugares, fuera de España, a celebrarlas en familia lo que hace que sea un momento especial y muy adecuado para poder jurar bandera ya que a lo largo del resto del año vienen en cortos periodos y escasas veces.

Parece ser que hacerlo en Embajadas y Consulados no es tan fácil ni se organizan actos con ese bello ceremonial militar para públicamente dejar sellado el amor a España y su compromiso de defenderla con un beso a la bandera.

Me parece una idea realizable y conveniente que para empezar y dar lugar a posteriores contagios se me ocurre iniciarla en la Plaza de la Armería, en un acto próximo a la Pascua Militar; ¿por qué no el mismo día de la Pascua Militar para que a la gran fiesta militar se uniese el resto de españoles?

No están las Fuerzas Armadas sobradas de imaginación para mostrar y demostrar a cada paso su presencia en la sociedad y el culto que profesan a España. Bueno sería que formase parte de esa Cultura militar unida a la de Defensa, distintas pero complementarias.

Si el Patrimonio nacional pone dificultades para celebrar este acto Castrense en la Armería es de suponer que el alcalde de Madrid estaría encantado de realizarlo en cualquier otro lugar de su municipio.

La idea quizá sea precipitada para materializarla este mismo año, pero una vez lanzada la propuesta es cuestión de perfilar los detalles de ejecución y abrir las listas que seguro serán numerosas.

Por ejemplo y para que vean el éxito que la idea puede tener. Sin forzar a nadie y, repito, solo por barajar una posibilidad, que sería éxito total, ofrecemos una alternativa.

La Jura ante la Bandera de España podría ser la Navidad del año 2024 frente al Congreso de los Diputados de España y allí, sus moradores, todos ellos, diputados y senadores, jurar o volver a jurar, todo depende, ante la bandera depositando ese beso que la Patria les devolverá agradecida. El Gobierno en cabeza: Presidente del Senado, del Congreso, del Gobierno, del Tribunal Constitucional, del Supremo, Vicepresidenta, ministra de Defensa, ministro de Asuntos Exteriores y ese largo etcétera que vendría después. De regalo todos se llevarían una bandera de mochila personalizada, la foto que recoge tan trascendental juramento y un pin de solapa o broche con la bandera española.

Antes habría que saber, tampoco es que sea confidencial, pero el que no quiera que no lo diga, cuantos senadores y diputados no han jurado bandera.

El éxito estaría a segurado porque -caso de ser así- si no hay muchos senadores y diputados que hayan jurado bandera es porque seguramente no han tenido la oportunidad y con este acto quedaría resuelto ese afán que a diario muestran por jurar algo tan importante como es guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, con lealtad al Rey, y si preciso fuera, entregar su vida en defensa de España. Al menos la mayoria simple.

Como la fórmula del juramento ha sido motivo de cambios les dejo el texto actual de acuerdo con la Ley 39/2007, de 19 de noviembre, de la carrera militar. Una vez conocida y asumida seguro que no surge la menor duda.

En primer lugar la formulada para militares y a continuación la reglamentada para los españoles que soliciten manifestar su compromiso con la defensa de España, prestando el juramento o promesa ante la Bandera.

—«¡Soldados! ¿Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor cumplir fielmente vuestras obligaciones militares, guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, obedecer y respetar al Rey y a vuestros jefes, no abandonarlos nunca y, si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?».

A lo que los soldados contestarán: «¡Sí, lo hacemos!».

El jefe de la unidad militar replicará:

«Si cumplís vuestro juramento o promesa, España os lo agradecerá y premiará y si no, os lo demandará», y añadirá: «Soldados, ¡Viva España!» y «¡Viva el Rey!», que serán contestados con los correspondientes «¡Viva!».

Los españoles que lo soliciten podrán manifestar su compromiso con la defensa de España, prestando el juramento o promesa ante la Bandera, con la siguiente fórmula:

—«¡Españoles! ¿Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, con lealtad al Rey, y si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?» A lo que contestarán: «¡Sí, lo hacemos!»

Gracias a mi querido lector por su magnífica idea que aquí dejo plasmada con la absoluta seguridad de que seremos escuchados y el año que viene comeremos el turrón gritando ¡Viva España!

Seguro que entre todos queremos más a España y la queremos mejor.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

29 noviembre 2023

Blog: generaldavila.com

OFENSAS A LA BANDERA Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Junts mueve la bandera de España en el Congreso e Inés Arrimadas la coloca. El Mundo

España y sus Fuerzas Armadas son la prioridad de este blog. Dicho de otra manera: España y su unidad, su historia y tradiciones, su cultura, es decir el conjunto de todos los españoles representados en sus símbolos: la Bandera, el Escudo, el Himno Nacional. De tal manera que cualquier ofensa de las que a diario se lanzan contra nuestros símbolos y sus Fuerzas Armadas es motivo de denuncia y de réplica por nuestra parte, aunque el ofensor no sea para tenerlo en cuenta por su incultura democrática. Lo que ocurre es que uno a uno, esta incultura democrática suma y se instala en las instituciones para nutrirse del esfuerzo y buena voluntad del conjunto y, lo que es peor, ser admitido por el partido en el Gobierno, encamarse con ellos para destruir desde dentro la unidad de España y la convivencia democrática.

Este preámbulo viene porque la portavoz del partido independista Junts, Míriam Nogueras, pretendió mostrar su falta de educación democrática, y de la otra, retirando de su proximidad la bandera de España, la suya, cuando hablaba, no sé para qué ni por qué, en el Congreso de los Diputados. Le guste o no, la señora Nogueras sabe que esa bandera que pretendía alejar de su proximidad es la suya, lo es y será, por lo que mucho será su dolor al tener que soportar los colores de nuestra bandera y así será día a día hasta el final de los días. No hay quien la cure este mal antidemocrático. Es para siempre. Lo sentimos.

La unidad de España no hay ni habrá quien la destruya y su bandera será hoy, mañana y siempre. Ofende quien puede y no quien quiere. No hay quien pueda.

Nos indignan las ofensas, incluso las concesiones de nuestro Gobierno al independentismo, que tenemos que soportar, al ver la calaña de sus compañeros de viaje. Pero nada de eso nos intranquiliza, solo nos indigna temporalmente, porque sabemos que tarde o temprano las aguas volverán a su cauce porque no hay quien pueda con España, con su bandera y sus símbolos, su unidad. Nadie destruirá España; ni su Ley. Van a rabiar durante todo el tiempo porque España seguirá siendo España y sus Fuerzas Armadas cumplirán con su deber y su misión constitucional.

Hubo España, hay España y siempre habrá España; y españoles para contarlo y defenderlo.

Lo siento señora Nogueras, va a tener la bandera de España muy cerca, siempre, para siempre, y si no le gusta váyase del Congreso, deje su sueldo y prebendas que la Patria, la suya también, España, le da; y que le vaya bonito.

Conviene que recuerde que:

«La bandera de España simboliza la nación; es signo de la soberanía, independencia, unidad e integridad de la patria y representa los valores superiores expresados en la Constitución».

Sentencia del Tribunal Supremo del 24 de julio de 2007:

«La bandera debe ondear diariamente con carácter de permanencia, no de coyuntura, no de excepcionalidad sino de generalidad y en todo momento».

Es cierto que la Bandera de España no se iza en todo el territorio nacional. En Cataluña y en muchos rincones del País Vasco se ha arriado la Bandera de España. Incluso se la ofende a diario. Nadie hace nada, no pasa nada.

No lo olvidemos. Pero es coyuntural. Les aseguro que es coyuntural.

España aguanta y resiste. Sus enemigos no. Caerán derrotados por la Ley y por los españoles que levantan España cada día con su esfuerzo, respeto, educación y amor a España y su bandera. ¿He dicho pocas veces España? Pues lo diré de nuevo: ¡Viva España!, y su bandera.

Mañana será otro día. Lucirá la bandera de España. Como ayer, hoy y mañana.

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog generaldavila.com

22 febrero 2023

 

LA FÓRMULA DEL JURAMENTO A LA BANDERA. General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Besando con unción la Bandera

«La bandera de España simboliza la nación; es signo de la soberanía, independencia, unidad e integridad de la patria y representa los valores superiores expresados en la Constitución» (Ley 38/1981 por la que se regula el uso de la bandera de España y el de otras banderas y enseñas).

Es una buena forma de empezar el año. Con el nombre de España en nuestros labios, con su bandera ondeando en nuestro corazón mientras recordamos el beso depositado entre sus pliegues. Es el símbolo de la patria y de su unidad.

Decían nuestras Reales Ordenanzas antes de que suprimiesen alguna de sus esencias: «La Bandera de España y el Himno Nacional merecen el máximo respeto y veneración. La Institución Militar es la encargada de la custodia, honores y defensa de la Bandera, como símbolo de la Patria y de su unidad». No busquen; estas palabras ya no figuran en las Reales Ordenanzas.

Algunas cosas han cambiado, con intención, sin razones que las avalen a no ser las partidistas o rencorosas fruto del desconocimiento del alma de aquellos que hacen del valor y del honor oficio y sacrificio. Con intención se ha trastocado la tradición militar olvidando que hay un mandato moral en nuestro código ético, en las Ordenanzas.

HISTORIA DE LA FÓRMULA DEL JURAMENTO ANTE LA BANDERA

Besando con unción la BANDERA

Entre los cambios uno muy sensible: la fórmula del juramento ante la Bandera. Decían nuestras Reales Ordenanzas que el juramento ante la Bandera de España es un deber esencial del militar, con él se contrae el compromiso de defender a la Patria aún a costa de la propia vida; su formula será fijada por Ley.

Es el beso a la bandera la huella permanente grabada a fuego y sangre en el alma de todo aquel que besa sus pliegues.

Como una sentencia suena la voz de mando cuando en formación se pronuncia la fórmula del juramento:

«¿Soldados juráis por Dios y prometéis a España, besando con unción su Bandera…?». El juramento sellado con un beso será la conciencia que te conduce moralmente por los caminos del servicio y la entrega a la Patria, incluso con la ofrenda de la vida si necesario fuera.

Besando con unción la Bandera

Rotundo aquel final: «…derramar, si es preciso, en defensa del honor e independencia de la Patria, y del orden dentro de ella, hasta la última gota de vuestra sangre», «… entregar vuestra vida en defensa de España».

El solemne compromiso no es algo reciente. Desde los Tercios de Flandes todo español que sentaba plaza como soldado adquiría el compromiso con el propio Rey, aunque el soldado español, a diferencia con otros vasallos,  no estaba obligado a jurar fidelidad y lealtad expresa ya que el juramento se sobreentendía por ser español, algo que llevaba consigo la lealtad a su soberano.

Besando con unción la Bandera

La fórmula del juramento introducida por Carlos III en sus Reales Ordenanzas (1768) ha servido de guía para las que posteriormente se han impuesto: «¿Juráis a Dios y prometéis al Rey el seguir constantemente sus banderas y defenderlas hasta perder la última gota de vuestra sangre y no abandonar al que os esté mandando en acción de guerra o disposición para ella? ». Los reclutas contestaban: «Sí, juramos», y el capellán rezaba por ellos: «Por obligación de mi Ministerio ruego a Dios que a cada uno le ayude si cumple lo que jura, y si no, se lo demande».

Desde aquel momento se institucionalizó el beso a la Bandera como símbolo del poder real desfilándose bajo sus pliegues como señal de acogimiento.

Es en febrero de 1927 cuando se establece una nueva fórmula: «¿Juráis a Dios, por vuestra fe, prometéis al Rey por vuestro honor, seguir constantemente sus banderas defendiéndolas hasta perder la vida, cumplir las leyes y ordenanzas militares y obedecer a quien en nombre del Rey se os haya dado a reconocer como para mandaros?».

¡Soldados: Juráis por Dios…

Los reclutas contestaban con un rotundo sí que repetían tres veces: «Sí, sí, sí». Finalizaba con el rezo del capellán: «Si así lo hacéis, que Dios y la Patria os lo premien y si no os lo demanden».

Siempre el juramento y el beso se realizaban formando con la espada del jefe de la formación y la Bandera una cruz como señal de fe y protección.

Con la llegada de la República en 1931 los cambios que se introducen en la fórmula del juramento acaban con la esencia y profundidad del juramento convirtiéndola en pura retórica administrativa que nada tiene que ver con el sentido ni con la historia del juramento a la Bandera. Dios desaparece de la fórmula y por tanto el juramento se cambia a promesa. Se hace constar (diría que rabiosamente) que la pregunta y la réplica al juramento se harán sin cruzar el sable con la bandera. También se obligaba a todos los miembros de los Ejércitos a realizar solemne promesa de adhesión y fidelidad a la República so pena de pasar automáticamente a la situación de retiro. Fueron muchos los que optaron por ello.

Estas eran los protocolos que impuso la República:

«Todos los Generales en situación de actividad o reserva y todos los Jefes, Oficiales y asimilados que no estén en la de retirados o separados del servicio habrán de prestar, en el plazo de cuatro días, contados desde el de la publicación de este Decreto en la Gaceta de Madrid, solemne promesa de adhesión y fidelidad a la República».

El texto de la promesa se ajustaba a la siguiente fórmula: «Prometo por mi honor servir bien y fielmente a la República, obedecer sus leyes y defenderla con las armas».

El acto de Jura ante la Bandera fue denominado Promesa a la Bandera Nacional y seguiría el siguiente protocolo.

«Pregunta: ¿Prometéis ser fieles a la Nación, leales al Gobierno de la República y obedecer y respetar y no abandonar a los que os manden?

Respuesta: Sí, prometo.

Réplica: La Ley os amparará y la Nación os premiará si lo hacéis, y si no, seréis castigados.

Jura de Bandera en la Plaza de España de Sevilla

La pregunta y la réplica se harán sin cruzar el sable con la bandera».

Legislación a todas luces rencorosa y que nada tenía que ver con las tradiciones españolas y de sus ejércitos.

Ni juramento, ni beso, ni tradición…

Por Decreto de septiembre de 1936 vuelve a modificarse y se recuperan los principales aspectos de la tradicional fórmula del juramento. Muchos hemos jurado ante la Bandera con aquellas palabras inolvidables; ya no podemos memorizar ninguna otra. No es posible cambiarlas por otras. Son la primera oración a la Patria, los cromosomas que llevan para siempre tu identidad genética. Ni una coma se puede cambiar. Así es y así debe ser: «Soldados: ¿Juráis por Dios y prometéis a España, besando con unción su Bandera, respetar y obedecer siempre a vuestros Jefes, no abandonarles nunca y derramar, si es preciso, en defensa del honor e independencia de la Patria, y del orden dentro de ella, hasta la última gota de vuestra sangre?». Los reclutas contestarán: «Sí, lo juramos».

Luego dicho Jefe añadirá: «Si así lo hacéis, la Patria os lo agradecerá y premiará y, si no, mereceréis su desprecio y castigo, como indignos hijos de ella. Soldados: ¡Viva España!» (Decreto de 13 de septiembre de 1936).

Y se besaba la Bandera formando la Cruz con la espada. Por Dios y por España.

La aprobación de la Constitución en 1978 trajo modificaciones en el texto del juramento a la Bandera.

Ley 79/1980: Para Jurar la Bandera de España se empleará la fórmula siguiente: «¡Soldados! ¿Juráis por Dios o por vuestro honor y prometéis a España, besando con unción su Bandera, obedecer y respetar al Rey y a vuestros Jefes, no abandonarles nunca y derramar, si es preciso, en defensa de la soberanía e independencia de la Patria, de su unidad e integridad territorial y del ordenamiento constitucional, hasta la última gota de vuestra sangre?»

Jura de Bandera en la Legión

Los soldados contestarán: «¡Sí, lo juramos!»

El que tomó el juramento replicará: «Si así lo hacéis, la Patria os lo agradecerá, y premiará, y si no, mereceréis su desprecio y su castigo, como indignos hijos de ella», y añadirá: «¡Soldados!, ¡Viva España! y ¡Viva el Rey!», que serán contestados con los correspondientes «¡Viva!».

Cambio a nuestro juicio sensato y que no modificaba sustancialmente el espíritu del juramento adaptándose a la recién aprobada Constitución.

Ya en el año 1999 la Ley 17/1999 de Régimen de Personal de las Fuerzas Armadas vuelve a introducir nuevos cambios:

«¡Soldados! Juráis por Dios o prometéis por vuestra conciencia y honor, cumplir fielmente vuestras obligaciones militares, guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, obedecer y respetar al Rey y a vuestros jefes, no abandonarlos nunca y, si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?». A lo que los Soldados contestarán: «¡Sí, lo hacemos!». El que tomó juramento o promesa replicará: «Si cumplís vuestro juramento o promesa, la Patria os lo agradecerá y premiará, y si no, mereceréis su desprecio y su castigo, como indignos hijos de ella, y añadirá: «Soldados, ¡Viva España!», y «¡Viva el Rey!», que serán contestados con los correspondientes ¡Viva!

A mi juicio se comete el enorme error de suprimir dos párrafos de enorme tradición e importancia:

  • …besando con unción su bandera
  • …hasta la última gota de vuestra sangre

Inolvidables palabras, profundas y llenas de épica y rotundidad. Toda una lección de amor a la Patria. Una arenga para la sacrificada vida de soldado.

Nunca debieron suprimirse de la fórmula del juramento o promesa. Pero el paso estaba dado; solo faltaba culminarlo. Y se hizo.

Te devuelve agradecida el beso que recibió…

La Ley de Carrera Militar (39/2007) repite la fórmula de 1999 con una pequeña salvedad. Sin importancia ¿verdad? Se suprime a Dios. Y pasó desapercibido; casi sin comentarios. Las anteriores fórmulas en nada contradecían a la Ley, pero… ¿molestaba la figura de Dios?

«¡Soldados! ¿Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor cumplir fielmente vuestras obligaciones militares, guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, obedecer y respetar al Rey y a vuestros jefes, no abandonarlos nunca y, si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?». A continuación, los soldados besarán uno a uno la Bandera y, posteriormente, como señal de que España acepta su juramento o promesa, desfilarán bajo ella.

Por último la misma ley introdujo la fórmula para que aquellos españoles que lo soliciten puedan manifestar su compromiso con la defensa de España, prestando el juramento o promesa ante la Bandera, con la siguiente fórmula: «¡Españoles! ¿Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, con lealtad al Rey, y si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?».

Así llegamos al final de este relato. Algo tan importante para un soldado como es su jura ante la bandera. El compromiso de su vida. Consagrar su vida al servicio de España hasta derramar la última gota de su sangre. Compromiso sellado con un beso. A nadie se le pide tanto. Nadie da nada hasta que no lo ha dado todo. Morir cada día o el definitivo día. Sin pedir nunca nada a cambio, nunca, nada a cambio.

…formando la Cruz con la espada

Es un buen comienzo del año recordar aquel día, el día en que besamos con unción a nuestra Bandera.

Ten por seguro que en su momento te devolverá agradecida el beso que recibió.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog generaldavila.com

21 febrero 2022

 

ESPAÑOLEAR EN ESPAÑA Rafael Dávila Álvarez

Hoy luchar como español, por España, por su idioma y sus tradiciones, hacerlo en Cataluña o en el País Vasco, en Baleares —y empieza a correrse la voz en otros lugares— es un riesgo que muy pocos valientes se atreven a afrontar. No exagero si digo que cuando alguien allí levanta la voz para reclamar su derecho a que se cumpla la ley y le permitan españolear (Diccionario de la RAE: «Hacer alarde público de españolidad») se expone a un riesgo físico elevado y a sanciones por parte de la autoridad (de la que se han apropiado). Gritar ¡Viva España! puede costarte pasar por las dependencias policiales (de su policía).

Pedir que tu hijo estudie español ¡un 25%!, se convierte en una marca que te estigmatiza.

Esto se le ha ido de las manos al presidente del Gobierno, un personaje que tendrá que dar cuenta del destrozo que ha hecho en la convivencia entre españoles. Algo gravísimo que su desnudez intelectual no llega a captar.

La Justicia, por ahora, podemos destacarla en mayúscula, a la espera de pronunciarse, en otro caso idéntico al de Canet del Mar, en El Prat de Llobregat.

El independentismo está furioso, rabioso ante su impotencia ante la ley a pesar de estar indultados sus delincuentes cabecillas (en contra de la opinión de los jueces y tribunales).

El mundo al revés vuelve a Cataluña y hemos visto al perisidente Pere Aragonés al frente de la manifestación en contra de las familias de Cataluña que piden clases de español para sus hijos. Rodeado por cierto por alguno de los delincuentes independentistas.

La escena se remata con el ataque sistemático, incluso desde el Gobierno, a la Justicia; sin olvidar casos y cosas como el nombramiento del nuevo ministro de Universidades (votante del ilegal referéndum y una cesión más) que escribe con faltas de ortografía, lógico y natural, y que no suele cantar con Luis Lucena aquello de «españolear», que no es un verónica de Curro Romero, pero en Cataluña, por si acaso, lo primero que hizo el independentismo rancio fue acabar con los toros y con la plaza de toros Monumental después del apoteosis de José Tomás. El Tribunal Constitucional anuló la prohibición, pero, y ustedes perdonen, a pesar de los muchos aficionados que hay, pues «no hay», como sí hay al menos dos familias del 25%. Pocas, pero las hay; y alguna más que calla.

Menuda se lio en el Parlamento cuando el señor José Ignacio Wert, ministro de Educación, Cultura y Deporte, dijo lo que dijo y se refería al sistema educativo en Cataluña: «Nuestro interés es españolizar a los alumnos catalanes y que se sientan tan orgullosos de ser españoles como de ser catalanes y que tengan la capacidad de tener una vivencia equilibrada de esas dos identidades porque las dos les enriquecen y las dos les fortalecen».

¡Anatema! Lo comprendo. Es rancio, cateto, de gente inculta, usar vocablos como españolear y españolizar. Eso al menos leo en los inteligentes prosistas y noveleros de las listas de más vendidos; tan profundos ellos, cuevudos al amparo del actual Régimen.

¡Ay! Luis Lisart Tamarit, Luis Lucena, si yo cantase tu copla en la Plaza de Cataluña o dijese Viva España en España, o escribiese al terminar estas palabras, aquí: ahora y siempre, viva España.

Sin exageraciones: pasas a formar parte de los estigmatizados.

Probaré de nuevo. ¡Viva España! y ¡Feliz Navidad!

Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

 

 

DON ODÓN (ELORZA) Rafael Dávila Álvarez

Don Odón (Elorza) es un nombre que habrá que recordar. Su imagen es ya un significante icónico. Todo es artificio; corta y pega. Hasta sus palabras no son suyas; del averno.

Un hombre es capaz de convertirse en un símbolo. Incluso de la vileza e infamia y aún así sentirse orgulloso de ello.

En el Congreso de los Diputados cada uno dice lo que le viene en gana, aunque a alguno, que viene mal de casa, le sirve para aprovechar el momento y evacuar. Lo dicho en el Congreso no lo dice a la cara de la inteligencia, sino a la de la agitación. Un vulgar tirón de la cadena para finalizar el acto.

El Congreso de los Diputados ha aguantado casi todo. Hasta la metáfora del caballo con un general que lleva las riendas desde sus lomos y aprieta las espuelas. A algunos les gusta la democracia a caballo y sobre todo dar espuelas al público. La democracia sin espuelas no acaba de entenderse.

Los tiros al aire que detuvo el techo del Congreso han quedado allí para siempre mientras resuene el grito de la chapuza: «¡Se sienten, coño!».

Don Odón: ¡Se siente, cáspita!

Siéntese entre los agitadores y deje su metralleta vocinglera. Esos, como usted, que usan el canto para amedrentar tienen un nombre: le llaman el Pico de hoz marrón y habita en las selvas de Nueva Guinea. Un simple pájaro que quería ser ametralladora..

Los vómitos se limpian, pero del vomitador queda siempre esa imagen de repugnancia que aparece cuando le ves. Por muy limpio que parezca. Las imágenes deben ir vestidas siempre de lo que representan y cuando las desnudas la cruda realidad te hace ver lo endeble de Superman sin su traje o convertido en piltrafa en las proximidades de la criptonita, abundante en el norte. Cobardean en tablas y huyen a los chiqueros. Como los terroristas cuando no les apoyaba una pistola. O la política; o algún político

Blanquear a la ETA a voces, protegido por la inmunidad que da el escenario es muy cobarde. Una vergonzosa puesta en escena que provoca dolor y devuelve el vértigo del terror. La náusea.

La ETA está; y lo peor es que está al lado del poder en la maniobra más repugnante que han hecho en España personajes que aceptan que el tiro en la nuca consiga sus objetivos. Matar para sentarse en las instituciones y ser bendecidos como hombres de paz es el espectáculo dantesco que ahora se revive para bochorno de todos. La sutil diferencia está en que él, don Odón, puede decir eso y más, pero si yo voy al centro de San Sebastián y grito ¡Viva España! me detienen y encima me piden explicaciones o me acusan de delito de odio.

Franco fue. Es una historia que se estudia en el contexto de lo sucedido y que yo sepa nadie la utiliza políticamente ni para el insulto o enfrentamiento, sino que son ellos, su partido socialista, de siglas PSOE, don Odón Elorza, los que hacen uso de la historia para insultar, mentir y sobre todo enfrentar que es lo que pretende con sus estentóreas voces desde donde lanza su infame arrebato contra las víctimas. Porque la ETA existe reencarnada en esos «hombres de paz» que no dudan en agitar su nombre, y exigir, para a cambio apoyar, por ejemplo, los Presupuestos.

Son muchos los testimonios que me llegan de indignación contra este don Odón (Elorza). Son relatos tristes, sensatos, dolorosos y correctos. Todo lo que él no es. Ha hecho usted mucho daño. Le recomiendo que lea la carta que publica el ABC del pasado día 26 firmada por Almudena Blanco Martín, hija de Pedro Blanco García, teniente coronel asesinado por la ETA. «Su sacrificio nuestra libertad». Libertad de la que usted, señor Odón, abusa. Ha hecho usted mucho daño.

Eso es todo a pesar del vuelo y gritos del Pico de hoz marrón.

Compruebo y comprendo que los aseos del Congreso estén ocupados de manera permanente.

Habla don Odón

como el reclamo del

Pico de hoz marrón:

al suelo tol mundo.

¡Cococo coñó!


Pico de hoz marrón (Epimachus meyeri) o pájaro ametralladora: La particularidad del Pico de hoz marrón es que algunos machos utilizan un reclamo que no suena para nada natural y recuerda al ruido de una ametralladora. Ello provocaba que en la IIGM, los soldados se tirasen al suelo al oír su canto por creer que era una ráfaga enemiga.

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

29 noviembre 2021

 

 

 

CONMEMORACIÓN DEL CENTENARIO DE LA CAMPAÑA DE MELILLA. ANNUAL 1921 Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

El General de Ejército D. Amador Enseñat y Berea, recién nombrado JEME. ha querido que su primer acto de carácter militar sea el homenaje a los miles de soldados que lucharon y murieron dando su vida por España en la Campaña militar de Melilla en 1921 de la que se celebra el Centenario. Un Centenario que había pasado desapercibido institucionalmente y que ahora se recupera en una ceremonia celebrada en nuestra eterna ciudad de Melilla y que a pesar de la poca repercusión mediática queremos resaltar aquí porque: es la conmemoración de mayor relevancia militar de todo esta año 2021 que termina.

El pasado sábado día 17 el nuevo Jefe del Ejército de Tierra presidió en Melilla el homenaje para corroborar que la historia militar la componen y la estructuran nuestros soldados y por tanto seguimos fieles a nuestras Reales Ordenanzas: «Los miembros de las Fuerzas Armadas se sentirán herederos y depositarios de la tradición militar española. El homenaje a los héroes que la forjaron y a todos los que entregaron su vida por España es un deber de gratitud y un motivo de estímulo para la continuación de su obra».

Hace ahora cien años muchos de nuestros compatriotas regaron con su sangre la seca y correosa tierra rifeña donde el deber les exigía aguantar el silencio de aquella incomprendida misión que les llevó a un final aún inexplicado e inexplicable.

La conmemoración militar tiene algo que va más allá de la historia y de las opiniones. Significa que el recuerdo a los que cayeron en el campo de batalla permanece en los anales de su historia y en nuestros corazones a base de recordar los hechos y transmitirlos como enseñanza y ejemplo.

Hace unos meses escribía un artículo sobre el homenaje que un español, en solitario, en La Coruña, rendía honores a los héroes de Annual depositando una Corona de rosas blancas a los pies de la bandera de España que se iza en la antigua Capitanía General. Expresé mi admiración a aquel español al que luego tuve la oportunidad de conocer personalmente: Francisco Vázquez de la Iglesia; y escribí aquello también con un reproche dirigido al olvido, a aquellos que deberían recordar institucionalmente los hechos y no lo hicieron.

Hoy tengo que mostrar mi alegría, la de soldado, y con ello me llega el recuerdo de las primeras estrofas del Himno de Infantería

Ardor Guerrero vibre en nuestras voces

y de amor patrio henchido el corazón

entonemos el Himno Sacrosanto

del deber, de la Patria y del Honor.

¡Honor!

Por fin se ha rendido el debido homenaje institucional y restituido la memoria de aquellos que murieron cumpliendo su deber. Hay España por la que rezar y a la que defender. Solo con un gesto se puede hacer más que con mil campañas de desmemoria.

Permanezcan en nuestro recuerdo aquellos que en los confines de la tierra su último suspiro fue un Viva España para morir por España.

Elevemos nuestra oración por ellos.

 El toque de oración inicia el vuelo

y hay en las últimas luces del cielo

algo invisible que nos acompaña,

como si en la quietud de los soldados

estuvieran aquí formados

todos los que murieron por España”

(Coronel Luis López Anglada)

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

18 octubre 2021

 

 

DÍA DE LA FIESTA NACIONAL DE ESPAÑA Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

 

Todos los años, llegada esta fecha, surge el interrogante sobre su finalidad y sentido ya que nadie se preocupa de explicar y fomentar el espíritu que encierra esta celebración. ¿Qué celebramos? ¿Por qué el 12 de octubre es el Día de la Fiesta Nacional? ¿Qué significado tiene esta fecha para España y los españoles? ¿Por qué hay un desfile militar? ¿Es el Día de las Fuerzas Armadas?

En 1978 se estableció el día de las Fuerzas Armadas, coincidente con la festividad de San Fernando, celebrándose cada año con especial énfasis en una Capitanía General. El año 1987 se extendió la celebración simultáneamente a todo el territorio nacional, quedando configurado el día de las Fuerzas Armadas como una jornada de encuentro y comunicación entre los ciudadanos civiles y militares.

Al aprobar las Cortes Generales en 1987 una ley que establecía el 12 de octubre “Día de la Fiesta Nacional”, se decretó en1997 que se trasladasen a este día los actos más significativos que se venían desarrollando anualmente el Día de las Fuerzas Armadas (sin suprimirlo), al considerar que tal medida contribuiría notablemente a realzar la conmemoración de la Fiesta Nacional y a la plena integración de todos los elementos históricos y culturales que conforman la Nación española. Esa es la razón por la que se celebra un desfile militar el 12 de octubre, que nada tiene que ver con el día de las Fuerzas Armadas.

A lo largo de la historia de España, la Fiesta Nacional del 12 de octubre se ha conmemorado con distintos nombres: “Fiesta Nacional” en 1892, “Fiesta de la Raza” en 1918, “Día de la Hispanidad” en 1958 y “Día de la Fiesta Nacional de España y de la Hispanidad” en 1981 y, por fin, “Día de la Fiesta Nacional” en 1987.

La ley actual dice:

“La conmemoración de la Fiesta Nacional, práctica común en el mundo actual, tiene como finalidad recordar solemnemente momentos de la historia colectiva que forman parte del patrimonio histórico, cultural y social común, asumido como tal por la gran mayoría de los ciudadanos.

Sin menoscabo de la indiscutible complejidad que implica el pasado de una nación tan diversa como la española, ha de procurarse que el hecho histórico que se celebre represente uno de los momentos más relevantes para la convivencia política, el acervo cultural y la afirmación misma de la identidad estatal y la singularidad nacional de ese pueblo”.

La simple lectura del texto legal es suficiente para sonrojar a todos los que irresponsablemente nos han llevado al lugar de incertidumbre en el que nos encontramos. Algo que resulta práctica común en cualquier nación aquí, entre la confusión conceptual y la meliflua actitud de los responsables de cumplir y hacer cumplir la ley, nos encontramos ante la España de la incertidumbre. No tenemos la certidumbre de estar en un Estado de Derecho que asegure el imperio de la ley como expresión de la voluntad popular al ponerse en duda la misma Nación española y por tanto, la convivencia democrática dentro de la Constitución y de las leyes.

12 de octubre 2020. Celebramos el día de la Fiesta Nacional. ¡Quién lo diría! La participación queda reducida a la Corona y a las Fuerzas Armadas. Pura anécdota. Que si confinamiento, que si no. Recorte a las libertades: «…una injerencia de los poderes públicos en los derechos fundamentales de los ciudadanos sin habilitación legal». Eso ha dicho la Justicia sobre las medidas de un Gobierno que camina a la deriva.

Día de la Fiesta Nacional de España. Ninguna Institución del Estado, al margen de la Corona, cooperan en realzar esta fecha. Nada, ni declaraciones institucionales, conferencias, jornadas de recíproco conocimiento. De España como Nación, nada. Para todo ello da igual la pandemia o no. Para hablar de España no hace falta mascarilla ni limitaciones a las libertades. Como no se limita hablar contra España y su unidad.

¿Dónde están los políticos, profesores y colegios, universidades, embajadas, autonomías, medios de comunicación, Reales Academias, el Instituto Cervantes o la Marca España ¿Cómo celebran esta festividad? ¿Fiesta Nacional? Mucho queda por hacer; todo queda por hacer.

Recoges lo que siembras. Si siembras vientos recoges tempestades. Tenemos lo que nos merecemos aunque España y los españoles no se merezcan lo que tienen. ¿O sí?

Una nación “discutida y discutible” (con uno), centraba su fiesta nacional en “el coñazo del desfile” (con el otro), mientras los soldados se quedan sin su “A España servir hasta morir” por capricho de un mal ministro de Defensa. Lucha entre presidentes autonómicos para ver quién hace más sonora su renuncia a este día de la Fiesta Nacional de España. El Parlamento y el Senado, cerrados. La soberanía nacional desperdigada. Crisis de unidad y sentimientos. Profunda crisis de valores alrededor del día de la Fiesta Nacional de España. El valor de España tasado en marca comercial. Una tarea académica, política y de carácter inclusivo. Planteamientos exclusivamente económicos. De España como Nación, nada, mientras la soberbia o la inconsciencia de un pequeño grupo de hombres, se atreven, por sí y ante sí, a romper la unidad de España.

Sobra el Ministerio de Defensa, sobran los soldados, sobra el desfile militar, sobra la defensa. ¿Y la Fiesta Nacional?

El 12 de octubre, serán las Fuerzas Armadas la única institución que, junto a la Corona, celebren el día de la Nación española. Poquito, pero al menos lo celebrarán. ¿Sobramos?

La gran mayoría sentimos y amamos a España con enorme fuerza y valentía. No debemos dejarnos dominar por el pesimismo sino por la esperanza que da la fuerza que tenemos, desde la unidad. Es la conmemoración del día en que España como Nación surgía en el mundo; y así seguirá siendo pese a quien pese.

Fiesta Nacional de España, Día de la Virgen del Pilar Patrona de la Hispanidad.

Nuestra identidad, nuestro futuro, está en la unidad, en nuestra fuerza como pueblo, como españoles. Gritemos sin miedo ¡Viva España!

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

12 octubre 2020. Día de la Fiesta Nacional de España

 

Himno Nacional   http://youtu.be/pkeSGGZ6LP0

Las Corsarias         http://youtu.be/k7JdPIStVDw

DÍA DE LAS FUERZAS ARMADAS SIN SOLDADOS. General Dávila (R.)

Hoy es el Día de las Fuerzas Armadas, es decir de los Ejércitos de España. No lo olvidamos, aunque las circunstancias hayan hecho suspender todos los actos previstos. Ellos están ahí, y estarán siempre. Han demostrado sus capacidades y lo volverán a hacer a pesar de su errónea utilización y deriva equivocada hacia donde las llevan.

Solo una palabra entre tanta vacía declaración que hoy aprovecha la política: Presupuestos y soldados. O Presupuesto para los soldados. Lo demás son cuentos y hueras palabras. No nos pasen las manos por encima y dedíquense a cuidar de sus Ejércitos y asignarles las misiones que les corresponden.

¡Felicidades Soldados! Gracias por vuestra labor callada y eficaz. Nuestra felicitación va para los soldados, no para los que políticamente les dirigen entre los que se encuentran los que no aman a España y desean una Patria rota y desunida en contra de lo que la Constitución en su artículo artículo 8 asigna como misión a las Fuerzas Armadas.

Unidad de España. Por España. Todo por España.

¡Viva España! ¡Viva el Rey! ¡Viva las Fuerzas Armadas!

Hoy nos sentimos más que nunca unidos a la unidad de España y su futuro en paz y convivencia desde la solidaridad y el convencimiento de que cada uno cumplirá con su deber.

¡Felicidades soldados!

Blog: generaldavila.com

30 mayo 2020

COMO LOS ESPAÑOLES: ENTREGARSE CON LAS MANOS ARRIBA General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Autoridad policial, moral, militar, política… eclesial. Miro a mi alrededor y pierdo la vista. Negro. Oscuro. Sin referencia en el horizonte. Abuso.

Cordura: «Prudencia, sensatez, buen juicio». También hacer cordura: «hacer reflexión».

Nada.

Grandes y pequeñas acciones. Desde hundir una nación entregada a comunistas y socialistas de los años treinta a ver actuaciones policiales desmesuradas ante un hombre mayor que se manifiesta en Madrid en la sede del PSOE; no pertenecía a los CDR claro. Gritar Viva España está prohibido ante Sánchez.

Para colmo el Papa, la autoridad moral, arrea con fuerza y cara de pocos amigos a una feligresa que quizá agarra demasiado. Me ha recordado -en todo lo contrario- a la mujer que tocó el manto de Jesús: <<¿Quién es el que me ha tocado? Y negando todos, dijo Pedro y los que con él estaban: Maestro, la multitud te aprieta y oprime, y dices: ¿Quién es el que me ha tocado? …al instante había sido sanada…Y él le dijo: Hija, tu fe te ha salvado; ve en paz>>.

Quizá ha llegado la hora de arrear. Crispación, inseguridad. ¿En quién confío?

No crean que estas cosas hacen bien alguno.

Hay honda preocupación por el ataque estadounidense con drones en el aeropuerto de Bagdad en el que ha muerto el general iraní Soleimani.

“Su marcha hacia Dios no pone fin a su camino o su misión, pero una poderosa venganza aguarda a los criminales que tienen su sangre y la sangre de los otros mártires de anoche en sus manos”, ha sido la respuesta verbal del ayatolá Jamenei, líder moral y material de muchas vidas. Infunde temor.

Avisábamos hace unos días de las maniobras navales combinadas de China, Rusia e Irán. Una preocupación más porque esta guerra, que venimos anunciando hace tiempo, puede en cualquier momento presentarse en su forma más conocida y terrible: de controlar nuestros movimientos y mentes a terminar con todos nosotros. Es tan fácil como que tenga un mal día el coreano del norte o similar, que los hay al frente de muchos misiles.

Por lo pronto hasta aquí ya han llegado las flechas del arco que llevaba tiempo tensado desde aquellos lugares lejanos.

Si no fuese por los niños no creo que los Reyes Magos se atreviesen a adentrarse por territorios tan hostiles. Seguramente les llamará Jameini para pedirles información sobre el belén que ha montado en España.

Por lo pronto el Papa ya se ha arremangado y se ha puesto a repartir…

No queda nada ni nadie. Antes creía en los Reyes Magos. Ahora en Amazon y cosas así.

¡Tiempos aquellos!

A última hora me comentan que lo más sensato es no enredarse en valores y defensas, sino hacer como los españoles: entregarse con las manos arriba. Se está escenificando el atraco en Madrid, Carrera de S. Jerónimo, s/n, 28071, allí donde vigilan los leones hechos del bronce de los cañones de guerra. ¡Para lo que sirven!

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

5 enero 2020

JURA DE BANDERA EN SEVILLA. ¿QUÉ HAS SENTIDO AL BESAR LA BANDERA DE ESPAÑA? General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

De aquí al 1 de junio, con motivo del Día de las Fuerzas Armadas que tendrá su Acto Central ese día en Sevilla, serán muchos los lugares de España donde se celebre el acto de Jura de Bandera para personal civil. Durante el mes de mayo se celebraron en Cartagena, León, Fuente del Maestre (Badajoz), Madrid, Herrera de Pisuerga (Palencia), Granada, Pontevedra, Madrid y Sevilla.

Ayer sábado más de dos mil personas lo hicieron en Sevilla, en su Plaza de España. Son muchos los lectores sevillanos que leen este blog y ellos me han mandado sus emociones en videos y fotografías. He vivido esta Jura de Bandera sevillana muy cercana y emotiva gracias a sus testimonios.

«¡Españoles! ¿Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, con lealtad al Rey, y si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España?» A lo que contestarán: «¡Sí, lo hacemos!».

¡Sí, lo hacemos! y lo que se afirma en el juramento o promesa no es sencillo, sino un exigente compromiso que va más allá de una ceremonia más o menos vistosa o una foto enmarcada. <<Y si preciso fuera, entregar vuestra vida en defensa de España>>. No es retórica. Es lo que es: la vida. Llegado el momento, que Dios no lo quiera, que cada cual vea lo jurado o prometido. Pero es la vida lo que se ofrece.

No nos quedemos solo en le exigencia máxima. <<Si preciso fuera>> no lo será nunca mientras se cumpla el juramento día a día. Nadie quiere héroes sino cumplidores del deber, cada uno el suyo, día a día, en su labor o misión concreta, de servicio a España, de cumplimiento de la Ley, y eso, todo eso, cada día es más difícil llegando en muchas ocasiones a ser heroico.

Ayer Sevilla era España bajo su Bandera, las de combate de sus unidades: Bandera del Tercio “Alejandro Farnesio” 4º de la Legión, Bandera del Rgto. de Guerra Electrónica nº 32, Bandera de la Agrupación Logística nº 21 de Sevilla, Bandera del Grupo de Regulares nº 54 de Ceuta, Bandera del Rgto. “La Reina” de Córdoba, Bandera del Rgto. “Saboya” de Badajoz, Bandera del Rgto. “Nápoles” y Bandera de la Brigada VI de Paracaidistas de Madrid.

La Bandera de España, el símbolo de la Patria que ha sido besada en Sevilla, en juramento, en acto de amor, con esa emoción individual imposible de narrar. El beso a la bandera no tiene explicación. Se guarda y no se cuenta. Se sabe dentro y se nota fuera, pero no se cuenta.

¿Qué has sentido al besar la Bandera de España? ¿Qué has pensado para tus adentros? ¿Qué compromiso has aceptado? No tienes que contestar a ninguna pregunta. Solo ser fiel al juramento o promesa y sí así lo haces la Patria te lo agradecerá y premiará, y si no, merecerás su desprecio y su castigo, como indigno hijo de ella.

Doña María Dolores de la Victoria nació el 30 de abril de 1939. Ha cumplido 80 años. Es una de las muchas madres de España que han vivido este juramento con los ojos cuajados de lágrimas por dentro mezclados con la sonrisa en su rostro.

Ayer se cuadró ante la Bandera de España, la besó despacio, sintiendo hondo, y la Enseña Nacional, como a una reina, agradecida se lo devolvió. Son besos de dos banderas, la madre y la patria.

Ella, María Dolores de la Victoria juró Bandera en Sevilla con la juventud a cuestas y el juramento cumplido con creces. Su beso tiene el hondo significado de madre y bandera, bandera y madre que solo ellas comparten y saben.

Y la Bandera de España se lo devolvió agradecida. Ayer en Sevilla, en la Plaza de España.


Gracias Sevilla. Gracias España… y miren ustedes por donde hoy me apetece gritar: ¡Viva España!

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

20 mayo 2019

BESANDO CON UNCIÓN SU BANDERA

LA ARMADA ESPAÑOLA LA ARMA ¡VIVA ESPAÑA! General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

¡Viva España! Es lo único que hoy me sale del corazón cuando con emoción veo las imágenes del “Juan Carlos I”, buque insignia de la Armada española, en Guecho con cientos de españoles esperando su turno para poder visitarlo. Su atraque en ese puerto ha sido motivo de rechazo, insulto y escarnio, por parte de los de siempre, también del partido socialista español (?) de Pedro Sánchez, el de la ministra de Defensa (que no debería permanecer ni un segundo más en su ministerio por la postura de su partido, el pesoe). Para estar a la cabeza de nuestras Fuerzas Armadas hay que ser responsable y tener el mismo comportamiento y coraje que exiges a los que mandas.

La Armada española, nuestra gran embajadora en el mundo, sigue siendo una gran desconocida. Alejada de las cámaras y del interés mediático cumple una misión fundamental en el desarrollo de nuestra política internacional y es un elemento clave de nuestra seguridad. Silenciosa, eficaz, audaz, siempre estuvo en vanguardia de los sueños de España cruzando los mares llevando la paz en los colores de su bandera.

Ha llegado a Guecho el buque insignia de la Armada española. La noticia era el rechazo a su presencia de los personajes que están al frente de su ayuntamiento, y que creían iban a ser secundados por los guechotarras. Desde primeras horas de la mañana de hoy sábado -mañana ocurrirá lo mismo-, se producían enormes colas de españoles vascos que iban visitar el buque de la Armada “Juan Carlos I”. Querían sentir el calor de su Patria en los uniformes de sus marinos. Querían sentirse españoles.

Es una victoria contra la intransigencia y lo que es aún mayor victoria: la ganada contra el odio que llevan sembrando algunos partidos hacia España. Una victoria más de las que la Armada con su silencioso buen hacer ha ganado para España.

La belleza de nuestra ARMADA no solo está en sus buques, en su navegar, en sus uniformes, en su historia. La belleza de nuestra Armada está en los corazones de sus componentes, que como dice su himno navegan “Soñando victorias, diciendo cantares…”.

“Yo no digo mi canción sino a quien conmigo va”. El cantar de su querida España.

El ejemplo de la Armada española debe seguirse, y acudir a todos esos lugares de España donde viven tantos españoles arrinconados, y hasta perseguidos por su amor a España, para que con libertad y seguridad puedan sentir el latido firme y recio de su Patria junto a nuestros soldados y marineros y gritar: ¡VIVA ESPAÑA!

Sin miedo ni rencor, pero hay que armarla.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog. generaldavila.com

23 marzo 2019

EL REY CUELGA EN EL BALCÓN LA BANDERA DE ESPAÑA ¡VIVA EL REY! General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez.

EL REY CUELGA EN EL BALCÓN LA BANDERA DE ESPAÑA

¡VIVA EL REY!

Pues sí. La Pascua Militar del año 2019 tiene un nombre: la Bandera de España.

Su Majestad el Rey ha querido asomarse al balcón de España y colgar la Bandera mientras nos dice: <<La Bandera es de todos>>. Acto de gran simbolismo al hacerlo ante sus compañeros de armas, las Fuerzas Armadas, en la Pascua Militar, y recordar que simboliza al conjunto de nuestra nación y que es signo de su soberanía e independencia, de su unidad e integridad.

La Bandera de España cuelga este 6 de enero de 2019 en el Palacio Real con elegancia y firmeza, repito, con elegancia y firmeza. A ver quién es el… que se atreve a retirarla. El año pasado fue su 175 aniversario, pero este año ha dicho el Rey que aquí está, en el balcón de mi corazón, en el juramento que hice como han hecho todos los soldados, mis compañeros de armas, que hoy me rodean. Ha sido un mensaje entre soldados para los soldados, y para los españoles. También para esos que quieren romper con España.

Si quieren se lo repito: <<La Bandera es de todos>>. Quede claro el significado de las palabras del Rey. Claro y rotundo. Se entiende y se asume.

Ese sentimiento de unidad, integridad, soberanía e independencia, la de la patria, solo tiene una manera de expresarse y es en el silencio del símbolo que nos une; y no hay ninguno como el de la bandera. La de todos.

Llevamos la bandera en el corazón y desde el año 2015 pedimos colgarla en los balcones como símbolo de nuestra unidad ante el feroz ataque independentista, como muestra de nuestra firmeza y defensa de la unidad de España, como dicta nuestra Constitución.

Hoy 6 de enero de 2019, en la Pascua Militar, el Rey de España ha desplegado la bandera en su balcón y nos ha enviado el esperado mensaje de unidad. La de todos.

El 3 de octubre de 2017 el Rey, ante el ataque independentista, dejó claro cual es el camino a seguir y la postura a adoptar frente los intentos de secesión. Hoy el Rey, por si había alguna duda, ha enarbolado la bandera  que simboliza al conjunto de la Nación, la unidad.

Terminó el Rey diciendo: ¡Viva España! y contestamos nosotros: ¡Viva el Rey!

Sus Reales Ejércitos se lo agradecemos.

Del resto del acto poca cosa.

La Bandera de España en el Palacio Real de Madrid

De la ministra de Defensa nada que destacar. Nivel mínimo. Tampoco esperábamos más.

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

7 enero 2019

Palabras de Su Majestad el Rey en el Día de la Pascua Militar

GANA ANDALUCÍA. GANA ESPAÑA. POR CIERTO: EL MENSAJE DE NAVIDAD NO LO DARÁ EL PRESIDENTE DEL GOBIERNO Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

No es plato de mi devoción entrar en análisis políticos. Y menos a toro pasado, cuando ya se conoce el resultado electoral del que todos ahora presumen diciendo que ya lo habían vaticinado.

Este juego del análisis político <<después de…>> me parece aburrido, cansino, y la mayor parte de las veces innecesario, a no ser que se haga en clave de humor, serio y profundo, que en España hay verdaderos especialistas en ello. Las redes sociales, tan criticadas, hacen esa labor de manera magistral. Uno de los últimos chascarrillos que corre por ellas es que alguien debería avisar con tiempo al presidente del Gobierno, doctor Sánchez, el socialisto, especialista en perder elecciones, de que el mensaje de Navidad a todos los españoles, la noche del día 24 de diciembre, lo pronuncia el Rey de España y no él; que ni siquiera es necesario que aparezca sentado a su lado. Que el Rey se basta solo para ello.

Digo esto porque el presidente, doctor Sánchez, el socialisto, aún no se ha enterado de que ha perdido las elecciones, una vez más, en Andalucía y, aunque se empeñe en lo contrario, él ha perdido, ha perdido el PSOE en Andalucía y con ello gana Andalucía y gana España. Dice el presidente, doctor Sánchez, el socialisto, que <<espera que no haya bloqueo y que gobierne quien gane>>. Hay que tener cuajo. La inteligencia es un don que hay que cultivar, pero si se anda escaso, el esfuerzo puede suplirla, pero sin inteligencia ni esfuerzo los resultados son los que son.

Estas elecciones andaluzas han tenido dos protagonistas: PSOE y PP. Los dos grandes perdedores. Parece que ninguno de ellos se ha enterado. Y solo hay una razón para este fracaso: la hartura, el hartazgo que tenemos de todos estos políticos del engaño, la mentira, que nada les importa España. Y la hartura salta por dos lados. Unas veces lo hace por la izquierda y otras por la derecha. Y los ejemplos llenarían páginas. Y resulta que ahora, en este momento de la historia  de España, se están olvidando PSOE y PP de España. El PSOE de Zapatero y el del doctor Sánchez, el socialisto,  y el PP también; el de Rajoy y su sucesor, Casado, que nos mantiene en la incógnita con esa pléyade de peperos a los que les gusta recordar lo que hicieron (tan mal) mientras presumen de ser más rojos que el capote de Cagancho. Y claro la gente que no es tonta acaba diciendo, lo primero España y luego ya veremos, y como ni el PSOE ni el PP estaban ni parece que estén por España y nada les importa esas cosas de la unidad, la solidaridad, la convivencia, ¡que viva España!, todos iguales, que ni catalán ni leches, que aquí todos iguales, a la hora de cobrar y a la hora de pagar, que no están por lo español y hablo español, y estudio español porque me da la gana; pues entonces eso: que llega la hora de votar y a ver si te quitas el problema de encima. Y piensas: ¿quiénes son esos los que defienden de verdad la unidad de España, y dicen esas cosa de la emigración, y del habla español y que España es de todos y para todos, que sin diferencias ante la ley y la justicia por ser andaluz o madrileño, y que nos devuelvan a todos la educación, la sanidad, la justicia y la seguridad? Y buscan a los que no les ideologicen, no coarten su libertad con leyes ideológicas y que no a los corruptos. Y claro pasa lo que pasa. Que la hartura es tanta que revienta, la hartura de esta izquierda ideológica, federalista, independentista, con tintes autoritarios, y la hartura por la tibieza de los que no son nada ni de nada, rompe por la derecha. Y aparece un partido al que no le daban importancia, al que miraban con desprecio, y mira por donde se hace con la llave de España: VOX. Por cierto: ¿podrían explicarnos por qué le llaman extrema derecha? Cuando no hay explicación nada mejor que insultar, que algo queda.

Y Ciudadanos que poco a poco deberá ir definiéndose en ese <<entre dos mares>> que no conduce sino a la deriva.

Y las cosas, poco a poco van poniéndose en su sitio. Y hay mucho trabajo por delante y tentarse las ropas y ver si cada uno lleva puesto el traje que le corresponde o es ropa prestada o incluso robada.

Y entonces, cuando cada uno lleve su traje y hable como debe, y sabe, si es que sabe, y asume su papel, y aprende que esto es España y no <<españas>>, empezaremos de nuevo a hablar y a votar en convivencia y solidaridad. Y entonces cada uno será lo que quiera pero será España.

Y el Rey será el Rey de España. Y  España será de  los españoles. Y el mensaje de Navidad lo dará el Rey de España sin inoportunos que se le cuelen.

En Andalucía ha empezado a hablar parte de España, la de la hartura. Ahora hace falta que hable toda España. Y eso, mientras antes mejor, no sea que este presidente doctor Sánchez, el socialisto, siga pensando que ha ganado las elecciones y se nos cuele en el mensaje de Navidad. ¡Que alguien le diga algo por Dios!

En resumen: hay que hablar de España, ese es el camino y solo hay uno. España, hasta hartarse de decir España, y si a alguien no le gusta pues se le contesta con España.

Y eso: que ¡Viva España! y en este caso bien por Andalucía ¡Viva Andalucía!, y ¡Viva España!

Y les aseguro que no hablo de política, que eso es para quien sabe, sino de España, de la que muy pocos saben (entre los partidos políticos que alguno no parece de España).

¡Qué hartura!

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

3 diciembre 2018)

VIVA ESPAÑA, VIVA EL REY, VIVA EL ORDEN Y LA LEY… Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Estas estrofas del Himno de la Guardia Civil resumen a mí entender el sentimiento de millones de españoles. España, la monarquía, el cumplimiento de la Ley y la exigencia de su cumplimiento, es decir: el orden. Todas en peligro: España, el Rey, el orden y la Ley.

Si se prolonga mucho la agonía presidencial que vivimos, este presidente postizo, sobrepuesto, inmaduro, errante y babieca, va a tener que enfrentarse a situaciones muy tensas. Tanto que puede verse obligado a usar la escalera legal que se eleva por el 116 de la Constitución; sin que le dé tiempo a mostrar, mucho más allá, las carencias de su magistratura.

La situación, cada vez más grave, le arrastrará. Se aferrará a cualquier cosa antes de perder el poder que sabe que está a punto de perder.

Si es por defender el poder, su poder, los pilares que lo sustentan, no dudará(n), no tiene(n) límites y a todos se llevará(n) por delante. La lucha va a ser violenta y puede que desgarradora. Hará(n) uso de lo que crea(n) conveniente, para su beneficio, lo que sea con tal de mantenerse en el poder. Pactará(n) con el diablo. Si en un momento debe(n) utilizar el 116 lo hará(n); para su beneficio siempre. Sin dudar, sin preguntar. No me fío del tufo que sale de las alcantarillas.

Sabe(n) que ir más lejos de lo que puede(n), y mucho puede(n), no puede(n) y puede que el poder le(s) pueda; porque no siempre todo se puede. El pesoe de ahora tiene un presidente rencoroso y mal encarado, radical, siempre sonriente, no sé de qué se ríe, autocalificado según su terminología, cuando estaba en estado puro, ante las cámaras, cara a cara con su oponente, descarado, mal educado: ruin, mezquino, deleznable; palabras dirigidas a Rajoy en un debate que ahora tapan, olvidan y evitan.

«El presidente nunca ha dicho…», dice la vicepresidenta.

Las palabras se fueron, con ellas quedó el retrato harto certero de quien las pronunciaba; desconocía todo, ni sabía ni aprendió, más allá de repetir lo que le dijeron, sin caer en la cuenta de que se estaba definiendo. Ahora, las palabras, viajeras, van y vienen, cuando menos te las esperas aparecen y se quedan, se revuelven como si en el espejo, que no perdona, se mirase: <<Si usted gana el coste de la democracia es enorme porque el presidente debe ser una persona decente y usted no lo es>>. Nunca se pudo decir más claro, cristalino, queriendo ser hiriente se hirió hondo, definió su quehacer futuro. Decente es honesto, justo, debido, adornado, sin lujo, con limpieza, digno, bien portado, de buena calidad, recatado, pudoroso, razonable y justo.

Ahora resuena el eco de sus palabras ante el obstáculo: eco, eco, eco… ruin, mezquino, deleznable; ruin, mezquino, deleznable…, deleznable…, deleznable… Llega hasta nosotros: <<persona decente, persona decente… y usted no lo es>>. 2015. Cara a cara. Logró echar al que, él, descaradamente, llamaba: ruin, mezquino, deleznable.

No hay eco para España, España, España ¡Viva España!, no hay eco a pesar de tanto obstáculo. Débil y confuso, el sonido se apaga: ¡¡España!!, ¡España!, España…

Llegado el caso, que llegará, cada vez más próximo, tendrá que recurrir a la Ley. Cumplirla y hacerla cumplir. O cambiarla. Cambiarla, cambiarla, cambiarla… Miedo da. Por ahí va la decencia, la mezquindad, la ruindad: cambiar la Ley.

Miedo me da: <<El poder tiene recursos para todo… ofrece muchas posibilidades… Todo el secreto está en saber manejar los dispositivos legales>>.

Dice la copla:

Me han dicho que no me quieres

no me da pena maldita,

que la mancha de la mora

con otra verde se quita.

Una Ley con otra Ley. La ley con otra Ley, el poder, el secreto, que los recursos legales son infinitos, como estamos viendo y viviendo con impotencia y nada que hacer; se quita, se cambia, adormecidos, cuando ya están casi dormidos una nueva aventura borra todo lo anterior. Se legitima con el tiempo, con la memoria convertida en ley. Tiempo al tiempo, que pasa y todo lo cambia, anestesiados, tiempo indecente, tiempo ruin, tiempo mezquino, deleznable, visible mancha de la mora, de la dilación en cumplir, con otra verde, inexperta, se quita; el presidente debe ser una persona decente, el presidente debe ser una persona decente, el presidente debe ser una persona decente…

<<Si usted gana el coste de la democracia es enorme porque el presidente…>>.

Viva España, Viva el Rey, Viva el orden y la ley… Pues algo tendrán que hacer todos ustedes.

Porque del orden al desorden, la Ley se cambia con otra Ley, que no la va a conocer ni la madre que la parió, España desaparece fraccionada en naciones, y el Rey sin reino. República de repúblicas, ley del desorden, todo llama a nuestras puertas y si no contestan, ustedes, con firmeza, con decencia, abrirán la puerta, la suya, entrarán en sus casas, los indecentes ocuparán sus habitaciones y les pondrán de patitas en la calle. Sin más explicaciones.

<<Si usted gana el coste de la democracia es enorme porque el presidente debe ser una persona decente y usted no lo es>>.

¿Viva España, viva el Rey, viva el orden y la ley…? No hacer nada. Nada. Esperar a que otros lo hagan. Nada pasa. Nada.

No pasa nada. No hagan nada. No habrá España, no habrá Rey, no habrá orden, no habrá ley.

que la mancha de la mora con otra verde se quita.

Rafael Dávila Álvarez. General de División (R.)

Blog: generaldavila.com

1 noviembre 2018

 

ACTO DE DESAGRAVIO A LA BANDERA. ¿QUIÉN SE ATREVE? A ESPAÑA SERVIR HASTA MORIR General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

¿No había un español para defenderla con su vida si necesario fuere?

¿Habremos llegado a tal grado de indiferencia, pasotismo – el Diccionario de la lengua española recoge el término pasota: indiferente ante las cuestiones que importan o se debaten en la vida social- que nos haga permanecer mudos e impávidos ante el ultraje perpetrado en Gerona a la Bandera de España? En un edificio público, con vigilancia y seguridad, con obligación moral y material de su defensa, la Bandera fue arrancada de su mástil, lanzada por la ventana, pisoteada y abandonada en la calle. Nadie la recogió y la besó con su juramento y vida. Nadie. ¿No había un español en aquel lugar de Gerona? La Bandera de España fue sustituida por un trapo negro símbolo del grupo terrorista Bandera Negra, aquel  que intentó asesinar a Alfonso XIII, y al que han añadido caracteres independentistas.

El ultraje visto por toda España, por el mundo entero, tiene un simbolismo mayor que cualquier otro de los vividos el 1 de octubre en Cataluña. Es el símbolo de su lucha, una acción marca de la casa independentista. Es la revolución independentista, su bandera de combate. Un gesto que no puede ni debe pasar desapercibido. Los símbolos traen consecuencias porque unen o enfrentan, ganan y pierden batallas, pero siempre arrastran con su significado.

Bandera negra originaria del grupo terrorista que atentó contra Alfonso XIII

Nos enseñaron que: <<La Bandera de España y el Himno Nacional merecen el máximo respeto y veneración. La Institución Militar es la encargada de la custodia, honores y defensa de la Bandera, como símbolo de la Patria y su unidad>> (artículo 18 de las Reales Ordenanzas para las Fuerzas Armadas). Ahora han cambiado la letra, incluso el estilo de nuestras Reales Ordenanzas, pero el espíritu nunca podrá ser otro que ese. Por eso atacan a la Bandera: símbolo de la Patria y su unidad. Atacan al símbolo que nos une y que nos hace fuertes.

Un soldado no puede quedar impasible ante la gravedad de la situación y ver la Bandera que ha jurado arrastrada por el suelo y ofendida sin que nadie tenga el valor de dar un paso en su defensa. Con el sentimiento y la sensibilidad a flor de piel ante hechos que tocan lo más sagrado, hay que saber mantener la calma, la moderación y el comportamiento. Los momentos de crisis y de tensión ponen a prueba la sensatez y el equilibrio del soldado preparado, eficaz y de ejemplar comportamiento por su disciplina y fortaleza de espíritu. Eso no significa pasar con indiferencia ante hechos tan ofensivos y menos permitir el silencio cobarde. Sería muy grave para un soldado. Debe mantener silencio, aunque todos saben cómo está su corazón ante lo inadmisible. Pero en nombre de todos los soldados, en su representación, alguien debe recoger el dolor de la afrenta y asumir la necesidad de organizar y encabezar el desagravio. Una afrenta que ha dolido a los soldados de ayer, a los de hoy, a los españoles de bien y no digamos a los millones de españoles que año tras año han dejado su beso de vida entregado en los pliegues de su Bandera. La Bandera de España merece el máximo respeto y veneración. Hay que recordárselo a todos los españoles. También a los que legislan, porque este respeto y veneración no debe ser exclusivo de los soldados que en definitiva están al servicio de la sociedad. Debe ser deber de todos.

Monte Constampla: A ESPAÑA SERVIR HASTA MORIR

 El Talarn es un pueblo español en la provincia de Lérida, catalán hasta la médula, donde se encuentra la Academia General Básica de Suboficiales. Desde el año 1974 en aquel hermoso paraje se forman los suboficiales del Ejército de Tierra. En las laderas del monte que allí domina el paisaje, Monte Constampla, se podía leer: A ESPAÑA, SERVIR HASTA MORIR. Es el lema de la Academia, con el que amanecían aquellos jóvenes soldados y era su Oración al anochecer. Un político nacionalista catalán, de cuyo nombre no quiero acordarme, presionó al ministro de Defensa, inmerecido ministro para tan buenos soldados, para que retirase aquel lema que le molestaba ver desde el cielo cuando su avión pasaba por encima de aquellos montes catalanes. Se cedió. El ministro ordenó retirar el lema y los militares cumplieron. Bajaron del monte el lema, se borró de los cielos de España para colocarse, modesto y sumiso, en la Plaza de Armas de la Academia. Aunque parezca mentira esto ha ocurrido en España con el Gobierno del señor Zapatero y su ministro de Defensa; de nefasto recuerdo. De aquellos, y otros más cercanos, polvos… ¿Nos extraña que ocurra lo que ahora ocurre?: A ESPAÑA SERVIR HASTA MORIR. ¿Quiénes? ¿Cuándo? ¿Cómo? ¿Dónde?…

Triunfarán porque nosotros nada hacemos por evitarlo. Nos robarán España cuando los españoles nos dejemos robar.

¿Ni un solo español para defender la Bandera? No quisiéramos tener que bajarla del monte más alto de nuestra patria para guardarla, esconderla, en las Plazas de Armas. No queremos nuestra Bandera empequeñecida en ningún rincón de España, ni borrar de sus laderas los colores rojo y gualda. Una vez ya basta.

Por ello en esta ocasión pedimos un acto de desagravio. Que alguien encabece el acto. En Gerona, en su plaza, con los honores reglamentarios, tres secciones de soldados, una compañía con una sección de cada uno de nuestros ejércitos y Armada, que icen la Bandera de España, bien alto, mientras suena el himno y España despierta de su letargo al oír el grito de ¡Viva España! ¿Quién se atreve a encabezar el desagravio?

En homenaje merecido. Es el Santo de nuestra Bandera. El próximo día 13 de octubre cumple 175 años, fecha en la que por Real Decreto se reconoció como Nacional la bandera de colores rojo amarillo y rojo y se ordenó que todas las unidades la utilizaran.

La Bandera de España.

¿Quién se atreve a encabezar el desagravio?

General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez

Blog: generaldavila.com

3 octubre 2018